Primera prueba: Skoda Superb Combi, amplio y elegante

Un decisivo paso más en la oferta Skoda de amplitud de habitáculo y maletero. El Superb Combi lo materializa sin descuidar la prestancia interior y equipamiento.

Eduardo Azpilicueta

Primera prueba: Skoda Superb Combi, amplio y elegante
Primera prueba: Skoda Superb Combi, amplio y elegante

La práctica versión Combi del Skoda Superb  ha representado en nuestro país más de la mitad de las ventas del modelo checo, y por ahí seguirá la cosa con la nueva generación, para la cual se admiten pedidos desde finales de julio, con entregas previstas para finales de septiembre. Los precios van desde los 25.970 euros para el 1.6 TDI 120 CV Active hasta los 43.410 del 2.0 TDI 190 CV DSG Laurin&Klement con tracción 4X4, pasando por los 26.470 del 1.4 TSI 150 CV Active (con desconexión de cilindros) y los 29.320 del 2.0 TDI 150 CV Ambition, versión ésta última que por sí sola podría acercarse al 80 por ciento del total de ventas en España. Por encima del Ambition (y debajo del lujoso L&K) está la versión Style, que cuesta 2.550 euros más que el Ambition. Existen motorizaciones de gasolina para otros mercados, como el 1.8 TSI de 180 CV, el 2.0 TSI de 220 CV, o incluso un 1.4 TSI de 125 CV; pero, dada la polarización de la demanda española hacia el TDI de 150 CV, no es extraño que se prescinda de ellas en una primera etapa.

La nueva carrocería, con un coeficiente aerodinámico Cx de 0,28, es curiosamente unos milímetros más corta que el nuevo Superb berlina, y también unos milímetros más alta. Y desde luego, es mucho más atractiva que la del anterior Superb Combi, así como con un interior con diseño más logrado e impresión de mayor calidad. Y, pese a tener 80 mm más de distancia entre ejes y 47 mm más de anchura, también es significativamente más ligera. En su zaga, el umbral de carga queda a 62 cm de altura respecto al pavimento, dando desahogado acceso a una amplia zona de carga, con 660 litros bajo el cubre-equipajes y casi dos metros cúbicos cuando se abaten los asientos traseros y se llena el espacio hasta el techo. Bajo ese plano de carga, existe una rueda de repuesto de medida completa.

Skoda Superb Combi III

El suelo del amplísimo maletero tiene 117 cm de longitud y 1 metro justo de anchura. Para que los objetos o maletas no ‘bailen’ de un lado al otros en las curvas, los costados del maletero ocultan unos elementos que pueden disponerse en ángulo recto (y afianzarse firmemente al plano de carga con un fuerte velcro) formando una delimitación que sujeta las esquinas de la caja o maleta para que no se desplace intempestivamente. Los respaldos traseros, por sectores, pueden abatirse remotamente desde la zaga del coche con un interruptor. Si también se abate hacia delante el respaldo delantero derecho, un Superb Combi podría portar interiormente objetos alargados de hasta 3,1 metros. Bajo el cubre-equipaje puede equipar una funda porta-trajes, y la versión superior también dispone de una linterna LED recargable en la zona del maletero. El portón es de apertura y cierre eléctricos en la versión L&K, y  abrirse con ‘pedal virtual’.

La funcionalidad del Combi se completa con una anchura de habitáculo aún mayor (140 cm a la altura de los hombros) y un espacio longitudinal récord, sin olvidarse de detalles típicamente Skoda (los hay a docenas) como sendos paraguas dispuestos en los paneles de puertas delanteras. El habitáculo, además, está equipado con numerosos huecos portaobjetos (refrigerables la guantera y el amplio hueco bajo el reposabrazos central), incluyendo un cajón bajo el asiento delantero derecho, a partir de la versión Ambition. Esta, además de los numerosos detalles de dotación del Superb Active (como control de presión de neumáticos, control de crucero, stop&start, bluetooth, recuperación de energía en frenada, 4 elevalunas eléctricos, siete airbag, diferencial tipo XDS , sistema Front Assist, freno multicolisión, etc), lleva climatizador bi-zona, sensores de lluvia y luz, radio con pantalla color de 6,5”, luces antiniebla con función curva, faros bixenon con ledes, ayuda trasera al parking y llantas de 17”. Las versiones Style y L&K añaden otros diversos detalles, como tapicería de Alcantara o de cuero, asientos de ajuste eléctrico o retrovisor interior anti-deslumbrante; pero curiosamente sus opciones no incluyen Head-up display para proyectar informaciones esenciales en el campo de visión del conductor. El Superb L&K, además de sus llantas de 18”, navegador, sonido especial Canton con 12 altavoces, techo practicable e iluminación adaptativa en sus  faros bixenon, es el único con el que no se paga suplemento para la amortiguación pilotada DCC, un dispositivo muy conveniente para redondear la actitud dinámica de este coche en zonas viradas. En cuanto a conectividad, el Superb Combi ofrece variadas posibilidades, de serie u opcionalmente.

Skoda Superb Combi III

La versión mecánica más potente para España, el 2.0 TDI de 190 CV, existe también en tracción delantera y con cambio manual en terminación Ambition (desde 31.320 euros), y desde luego determina un excelente nivel de prestaciones. Pero el TDI de 150 CV ofrece ya un notable brío y destacados consumos, justificando las preferencias españolas. En cuanto al 1.4 TSI de 150 CV con desconexión de cilindros, su elasticidad no es la que esperábamos y no tira airosamente de los largos desarrollos del cambio a bajo y medio régimen, aunque si se sube de vueltas, acaban apareciendo los CV.