Si preferimos la comodidad a las sensaciones, en el C3 tendremos un polivalente cabrio, más barato que el Mini, con algo más de espacio y, en el caso de esta versión, con cambio manual robotizado. Eso sí, el sistema para quitar la capota es muy engorroso (hay que deshacerse de unos arcos que tendremos que dejar en el garaje) y no podremos disfrutar de un comportamiento parecido al de nuestro protagonista.Aunque sólo tiene dos plazas, consideramos justo incluir el Streetka entre los rivales del Mini, ya que es perfectamente capaz de plantarle cara en los terrenos sinuosos, gracias su comportamiento eficaz. Sin embargo, el Ford nos dará más problemas a la hora de quitar la capota, ya que será necesario bajar del coche.El techo metálico del Tigra es muy útil, ya que nos permite contar con un vehículo más utilizable en el “día a día". No encontraremos pegas si circulamos por la ciudad, pero, al llegar a las carreteras, su potencia se queda algo justa. Tampoco es tan ágil como el Mini (sólo el Streetka se le acerca en este apartado), por lo que debemos sopesar muy bien cuál es el uso que vamos a dar al vehículo.Inauguró el segmento de los “generalistas" con techo metálico desplegable y es el que mejores resultados de ventas ha cosechado. Cuenta con cuatro plazas (aunque las traseras sólo sirven en caso de apuro) y su comportamiento es suave y aplomado. Su motor es más potente que el del Mini, aunque no hay diferencias abismales en el apartado de las prestaciones. Las distancias entre ambos modelos son mayores en el capítulo del equipamiento, bastante pobre en el caso del 206.También es un vehículo muy exclusivo, muy eficaz y con una imagen muy sofisticada: es, en definitiva, un rival muy potente para el Mini, al que supera en sensaciones deportivas gracias a su propulsión trasera. Entre su equipamiento sí encontraremos el ESP, aunque no el climatizador. Sólo cuenta con dos plazas, si bien la mayoría de los compradores de este tipo de cabrios no contarán el número de asientos entre los argumentos principales en la compra. Si preferimos la comodidad a las sensaciones, en el C3 tendremos un polivalente cabrio, más barato que el Mini, con algo más de espacio y, en el caso de esta versión, con cambio manual robotizado. Eso sí, el sistema para quitar la capota es muy engorroso (hay que deshacerse de unos arcos que tendremos que dejar en el garaje) y no podremos disfrutar de un comportamiento parecido al de nuestro protagonista.Aunque sólo tiene dos plazas, consideramos justo incluir el Streetka entre los rivales del Mini, ya que es perfectamente capaz de plantarle cara en los terrenos sinuosos, gracias su comportamiento eficaz. Sin embargo, el Ford nos dará más problemas a la hora de quitar la capota, ya que será necesario bajar del coche.El techo metálico del Tigra es muy útil, ya que nos permite contar con un vehículo más utilizable en el “día a día". No encontraremos pegas si circulamos por la ciudad, pero, al llegar a las carreteras, su potencia se queda algo justa. Tampoco es tan ágil como el Mini (sólo el Streetka se le acerca en este apartado), por lo que debemos sopesar muy bien cuál es el uso que vamos a dar al vehículo.Inauguró el segmento de los “generalistas" con techo metálico desplegable y es el que mejores resultados de ventas ha cosechado. Cuenta con cuatro plazas (aunque las traseras sólo sirven en caso de apuro) y su comportamiento es suave y aplomado. Su motor es más potente que el del Mini, aunque no hay diferencias abismales en el apartado de las prestaciones. Las distancias entre ambos modelos son mayores en el capítulo del equipamiento, bastante pobre en el caso del 206.También es un vehículo muy exclusivo, muy eficaz y con una imagen muy sofisticada: es, en definitiva, un rival muy potente para el Mini, al que supera en sensaciones deportivas gracias a su propulsión trasera. Entre su equipamiento sí encontraremos el ESP, aunque no el climatizador. Sólo cuenta con dos plazas, si bien la mayoría de los compradores de este tipo de cabrios no contarán el número de asientos entre los argumentos principales en la compra. Si preferimos la comodidad a las sensaciones, en el C3 tendremos un polivalente cabrio, más barato que el Mini, con algo más de espacio y, en el caso de esta versión, con cambio manual robotizado. Eso sí, el sistema para quitar la capota es muy engorroso (hay que deshacerse de unos arcos que tendremos que dejar en el garaje) y no podremos disfrutar de un comportamiento parecido al de nuestro protagonista.Aunque sólo tiene dos plazas, consideramos justo incluir el Streetka entre los rivales del Mini, ya que es perfectamente capaz de plantarle cara en los terrenos sinuosos, gracias su comportamiento eficaz. Sin embargo, el Ford nos dará más problemas a la hora de quitar la capota, ya que será necesario bajar del coche.El techo metálico del Tigra es muy útil, ya que nos permite contar con un vehículo más utilizable en el “día a día". No encontraremos pegas si circulamos por la ciudad, pero, al llegar a las carreteras, su potencia se queda algo justa. Tampoco es tan ágil como el Mini (sólo el Streetka se le acerca en este apartado), por lo que debemos sopesar muy bien cuál es el uso que vamos a dar al vehículo.Inauguró el segmento de los “generalistas" con techo metálico desplegable y es el que mejores resultados de ventas ha cosechado. Cuenta con cuatro plazas (aunque las traseras sólo sirven en caso de apuro) y su comportamiento es suave y aplomado. Su motor es más potente que el del Mini, aunque no hay diferencias abismales en el apartado de las prestaciones. Las distancias entre ambos modelos son mayores en el capítulo del equipamiento, bastante pobre en el caso del 206.También es un vehículo muy exclusivo, muy eficaz y con una imagen muy sofisticada: es, en definitiva, un rival muy potente para el Mini, al que supera en sensaciones deportivas gracias a su propulsión trasera. Entre su equipamiento sí encontraremos el ESP, aunque no el climatizador. Sólo cuenta con dos plazas, si bien la mayoría de los compradores de este tipo de cabrios no contarán el número de asientos entre los argumentos principales en la compra. Si preferimos la comodidad a las sensaciones, en el C3 tendremos un polivalente cabrio, más barato que el Mini, con algo más de espacio y, en el caso de esta versión, con cambio manual robotizado. Eso sí, el sistema para quitar la capota es muy engorroso (hay que deshacerse de unos arcos que tendremos que dejar en el garaje) y no podremos disfrutar de un comportamiento parecido al de nuestro protagonista.Aunque sólo tiene dos plazas, consideramos justo incluir el Streetka entre los rivales del Mini, ya que es perfectamente capaz de plantarle cara en los terrenos sinuosos, gracias su comportamiento eficaz. Sin embargo, el Ford nos dará más problemas a la hora de quitar la capota, ya que será necesario bajar del coche.El techo metálico del Tigra es muy útil, ya que nos permite contar con un vehículo más utilizable en el “día a día". No encontraremos pegas si circulamos por la ciudad, pero, al llegar a las carreteras, su potencia se queda algo justa. Tampoco es tan ágil como el Mini (sólo el Streetka se le acerca en este apartado), por lo que debemos sopesar muy bien cuál es el uso que vamos a dar al vehículo.Inauguró el segmento de los “generalistas" con techo metálico desplegable y es el que mejores resultados de ventas ha cosechado. Cuenta con cuatro plazas (aunque las traseras sólo sirven en caso de apuro) y su comportamiento es suave y aplomado. Su motor es más potente que el del Mini, aunque no hay diferencias abismales en el apartado de las prestaciones. Las distancias entre ambos modelos son mayores en el capítulo del equipamiento, bastante pobre en el caso del 206.También es un vehículo muy exclusivo, muy eficaz y con una imagen muy sofisticada: es, en definitiva, un rival muy potente para el Mini, al que supera en sensaciones deportivas gracias a su propulsión trasera. Entre su equipamiento sí encontraremos el ESP, aunque no el climatizador. Sólo cuenta con dos plazas, si bien la mayoría de los compradores de este tipo de cabrios no contarán el número de asientos entre los argumentos principales en la compra. Si preferimos la comodidad a las sensaciones, en el C3 tendremos un polivalente cabrio, más barato que el Mini, con algo más de espacio y, en el caso de esta versión, con cambio manual robotizado. Eso sí, el sistema para quitar la capota es muy engorroso (hay que deshacerse de unos arcos que tendremos que dejar en el garaje) y no podremos disfrutar de un comportamiento parecido al de nuestro protagonista.Aunque sólo tiene dos plazas, consideramos justo incluir el Streetka entre los rivales del Mini, ya que es perfectamente capaz de plantarle cara en los terrenos sinuosos, gracias su comportamiento eficaz. Sin embargo, el Ford nos dará más problemas a la hora de quitar la capota, ya que será necesario bajar del coche.El techo metálico del Tigra es muy útil, ya que nos permite contar con un vehículo más utilizable en el “día a día". No encontraremos pegas si circulamos por la ciudad, pero, al llegar a las carreteras, su potencia se queda algo justa. Tampoco es tan ágil como el Mini (sólo el Streetka se le acerca en este apartado), por lo que debemos sopesar muy bien cuál es el uso que vamos a dar al vehículo.Inauguró el segmento de los “generalistas" con techo metálico desplegable y es el que mejores resultados de ventas ha cosechado. Cuenta con cuatro plazas (aunque las traseras sólo sirven en caso de apuro) y su comportamiento es suave y aplomado. Su motor es más potente que el del Mini, aunque no hay diferencias abismales en el apartado de las prestaciones. Las distancias entre ambos modelos son mayores en el capítulo del equipamiento, bastante pobre en el caso del 206.También es un vehículo muy exclusivo, muy eficaz y con una imagen muy sofisticada: es, en definitiva, un rival muy potente para el Mini, al que supera en sensaciones deportivas gracias a su propulsión trasera. Entre su equipamiento sí encontraremos el ESP, aunque no el climatizador. Sólo cuenta con dos plazas, si bien la mayoría de los compradores de este tipo de cabrios no contarán el número de asientos entre los argumentos principales en la compra. Si preferimos la comodidad a las sensaciones, en el C3 tendremos un polivalente cabrio, más barato que el Mini, con algo más de espacio y, en el caso de esta versión, con cambio manual robotizado. Eso sí, el sistema para quitar la capota es muy engorroso (hay que deshacerse de unos arcos que tendremos que dejar en el garaje) y no podremos disfrutar de un comportamiento parecido al de nuestro protagonista.Aunque sólo tiene dos plazas, consideramos justo incluir el Streetka entre los rivales del Mini, ya que es perfectamente capaz de plantarle cara en los terrenos sinuosos, gracias su comportamiento eficaz. Sin embargo, el Ford nos dará más problemas a la hora de quitar la capota, ya que será necesario bajar del coche.El techo metálico del Tigra es muy útil, ya que nos permite contar con un vehículo más utilizable en el “día a día". No encontraremos pegas si circulamos por la ciudad, pero, al llegar a las carreteras, su potencia se queda algo justa. Tampoco es tan ágil como el Mini (sólo el Streetka se le acerca en este apartado), por lo que debemos sopesar muy bien cuál es el uso que vamos a dar al vehículo.Inauguró el segmento de los “generalistas" con techo metálico desplegable y es el que mejores resultados de ventas ha cosechado. Cuenta con cuatro plazas (aunque las traseras sólo sirven en caso de apuro) y su comportamiento es suave y aplomado. Su motor es más potente que el del Mini, aunque no hay diferencias abismales en el apartado de las prestaciones. Las distancias entre ambos modelos son mayores en el capítulo del equipamiento, bastante pobre en el caso del 206.También es un vehículo muy exclusivo, muy eficaz y con una imagen muy sofisticada: es, en definitiva, un rival muy potente para el Mini, al que supera en sensaciones deportivas gracias a su propulsión trasera. Entre su equipamiento sí encontraremos el ESP, aunque no el climatizador. Sólo cuenta con dos plazas, si bien la mayoría de los compradores de este tipo de cabrios no contarán el número de asientos entre los argumentos principales en la compra.
Mini One Cabrio
Si algo le faltaba al Mini para hacerlo aún más atractivo, era una versión descapotable con la que siempre encontraremos una excusa para salir de casa. Este cabrio es ágil, muy llamativo y su precio... Bueno, un capricho es un capricho y algunos -¡ay!- son tan necesarios...
