Si echas un ojo a este artículo (Todos los coches urbanos y utilitarios que llegan en 2020), verás que el segmento de coches pequeños y utilitarios va a estar revuelto en 2020. Protagonistas hay muchos, pero te aseguro que uno de ellos es el Hyundai i10, un benjamín de la marca coreana, un coche de enfoque eminentemente urbano pero de vital importancia para que Hyundai haya podido revalidad su liderazgo en Europa por quinto año consecutivo. Nos hemos ido hasta Portugal a probarlo, donde la marca también ha puesto énfasis en su futura estrategia de movilidad eléctrica, y donde por cierto, de momento no tienen cabida coches tan pequeños como el i10, un segmento donde el cliente se tira de cabeza a por el precio más rompedor. De momento, la estructura de la gama en cuanto a equipamiento y precios finales es una incógnita, aunque sí sabemos que el Hyundai i10 2020 saldrá al mercado, en su versión básica, desde poco más de 10.690 euros.
Hyundai i10 2020: un coche pequeño, pero no sólo urbano
Está claro que el nuevo Hyundai i10 es carne de ciudad, pero ya sea dentro o fuera de ella, ofrece algunas características ventajosas frente a sus competidores. Una de ellas es que tiene 5 plazas de serie, algo no muy habitual en la categoría; la otra es que, fuera de la ciudad, no parece un coche “tan pequeño": es estable, da sensación de seguridad, resulta bastante cómodo y razonablemente ágil. Te aseguro que no es lo normal en coches de ciudad. Las dimensiones del Hyundai i10 han variado ligeramente: la línea del techo es ahora 20 mm más baja y el coche tiene 20 mm más de anchura, aunque el cambio más significativo es la distancia entre ejes, que ahora aporta su nueva plataforma, 40 mm más (hasta 2,42 m de batalla).
Aunque el cuerpo central del i10 2020 es semejante al anterior, distinguirás a esta nueva generación por el moderno y juvenil diseño de sus extremos, con elementos reposicionados a mayor altura aunque la línea de cintura en sí se ha bajado en 11 mm en la parte delantera y en 13 mm en la trasera, optimizando así la visibilidad. Esto ha permitido diseñar un pilar C menos inclinado —11,9º en lugar de los 13,1º de la generación saliente— y, al mismo tiempo, recudir la aerodinámica, algo que contribuye, más que a la eficiencia de los motores en este caso, a la reducción de ruidos que puedan proceder del roce del viento.
El nuevo Hyundai i10 2020 también ofrece un mejor acceso al malero, además de un volumen considerable parta su longitud: 252 litros de volumen de carga para un coche de 3,67 m en total no están nada mal. No es un maletero muy profundo, pero tiene una respetable altura para poder meter, por ejemplo, maletas de muy diferentes dimensiones. Dentro, milagroso habitáculo el de este nuevo coche que incluso con el puesto de conducción adaptado a mis 1,83 m de altura, cabría detrás sin grandes dificultades.
Al interior del Hyundai i10 2020 tampoco le falta chispa, buenos acabados plásticos que generan una percepción a la vista y tacto bastante homogénea, guantera de gran tamaño y pedales y mandos en general con muy buen tacto, nada de coche barato, aunque habrá que perdonarle unos asientos algo estrechos y cortos de banqueta. Hay cuatro posibles tonalidades, y en las condiciones que hemos podido conducir, ninguna de las dos probadas —negro y bitono negro/gris—genera molestos reflejos en el cristal delantero. El cuadro de relojes es bastante completo y de lectura muy clara, pero en el interior del i10, el elemento protagonista es —según versiones— la nueva pantalla táctil de 8 pulgadas con funciones Android Auto, Apple Car Play, sistema de navegación y telemática Bluelink para controlar remotamente, desde el smartphone, diferentes parámetros del coche, así como Live Services, para conocer en tiempo real información de tráfico o, por ejemplo, el precio del combustible en cada gasolinera. También puede disponer de una cómoda base de carga sin cables para el móvil, justo delante de la palanca de cambios, otro elemento más que también ha mejorado su posición y, sobre todo, su enclavamiento.
Pero aquí no se acaba todo. El nuevo Hyundai i10 2020 también se echa a cuestas el Hyundai SmartSense, un completo sistema de asistentes de seguridad con 5 elementos de elevado valor, como son el asistente de frenada de emergencia con detector de peatones (acciona los frenos en caso de riesgo elevado) y advertencia por colisión frontal; asistente de cortas y largas; sistema de mantenimiento de carril con control de dirección; reconocimiento de señales de tráfico y advertencia de atención del conductor. Lo dicho, no muchos coches urbanos pueden presumir de este equipamiento.
Hyundai i10 2020: dos motores, dos cambios, versiones ECO y una sorpresa para el verano
El Hyundai i10 2020 se lanzará al mercado con dos motorizaciones de gasolina, ambas ligadas de serie a un cambio manual de 5 relaciones y con posibilidad de optar opcionalmente por una caja de embrague robotizado con el mismo número de marchas. La hemos probado en el motor más potente de los dos que se ofrecen de momento y te reconozco que me he encontrado con una transmisión mucho más reactiva y suave de lo que me esperaba.
El motor básico es un tres cilindros de 1,0 litros con 67 voluntariosos caballos y 96 Nm de par. Vale, no es un tiro, pero en ciudad te garantiza una gran suavidad de funcionamiento y con él nos hemos movido más que dignamente por sinuosas carreteras portuguesas, aunque como imaginas, tienes que renunciar a adelantar si no tienes muchos metros por delante. La marca anuncia entre 5 y 5,5 l/100 km de consumo combinado en ciclo WLTP, con unas emisiones de entre 114 y 126 g/km en el caso de su versión manual de 5 velocidades.
El 1.2 de cuatro cilindros, por su parte, abre un radio de acción mucho mayor al i10 al combinar no sólo muy buena respuesta en ciudad, sino a resultar mucho más ágil y solvente en carretera y autopsita, donde, como te decía anteriormente, el i10 sorprende por un comportamiento fantástico y buen aplomo a alta velocidad. Esta motorización de cuatro cilindros ya ofrece unos respetables 84 CV y 118 Nm de par, una diferencia respecto al 1.0 que se siente mucho más en pegada y capacidad prestacional que en consumos en condiciones reales de conducción; la marca anuncia entre 5,4 y 6,1 l/100 km de consumo medio WLTP, con emisiones entre 122 y 138 g/km de CO2, pero ante un trazado de cierta exigencia las diferencias respecto al 1.0 litros son bastante menos, e incluso, se pueden llegar a revertir.
Hyundai nos ha hablado de una versión ECO para el motor 1.0 MPi —en realidad, lo definen como un paquete ECO—, aunque no han asegurado si finalmente llegará o no a nuestro mercado. Su desarrollo se ha enfocado para reducir las emisiones y los consumos, al disponer de sólo 4 asientos, ruedas de 14 pulgadas e incluso relaciones de cambio modificadas respecto a la caja manual. Pierde algo de capacidad de aceleración y también velocidad máxima, aunque los consumos se reducen hasta en dos décimas.
En verano esperamos el i-10 N-Line, y no, no es sólo una versión de aspecto más deportivo, sino un i10 muy serio equipado con el motor 1.0 T-GDi de 100 CV y 172 Nm de par. De momento, no hay prestaciones ni consumos declarados, pero sin lugar a dddas es un propulsor que hará destacar al i10 y lo convertirá es una especia única. Esta versión varía estéticamente al disponer de luces diurnas con diferente diseño, elementos específicos en el exterior e interior, llantas de 17 pulgadas y ajustes de suspensiones acordes a la mayor potencia. Sin duda, un pequeño gran coche.
