Todo en el Matiz está perfectamente escalado y responde a un sesudo análisis de costes, necesidades y opciones. Daewoo no se ha complicado mucho la vida. Su respuesta a los coches polivalentes urbanos, un segmento en expansión, es una mecánica sólida pero de prestaciones más que modestas, un diseño atrevido y unos acabados correctos, pero con materiales de calidad más bien pobre, aunque muy acordes con el precio del coche.
Y es que, al analizar este vehículo, uno tiene que pensar constantemente “cuesta menos de un millón de pesetas". Así es. Por algo menos de 6.000 euros, a ver qué vehículo te lleva por la ciudad con cinco plazas útiles, cinco puertas, un maletero capaz y una facilidad para aparcar más propia de un microcoche que de un utilitario.
“Cuesta menos de un millón de pesetas".