Comparativa: Hyundai ix20 1.6 CRDI Style vs Opel Meriva 1.6 CDTI Excellence

'Somos jóvenes y dinámicos, pero también nos gustan los niños... ¿Qué podemos elegir?'. Pues cualquiera de estos dos compactos monovolumen, Hyundai ix20 1.6 CRDI y Opel Meriva 1.6 CDTI, que son ágiles y atienden bien a una familia de cuatro integrantes.

Francisco Morillo. Fotos. Alicia Ruiz.

Comparativa: Hyundai ix20 1.6 CRDI Style vs Opel Meriva 1.6 CDTI Excellence
Comparativa: Hyundai ix20 1.6 CRDI Style vs Opel Meriva 1.6 CDTI Excellence

En tiempos de bonanza —no nos referimos a la serie de vaqueros— las expectativas en la compra de un coche nuevo eran como la máxima del deporte: más grande, más potente y más caro. Pero todo lo bueno suele acabar pronto y, ahora, nos hemos ido al extremo opuesto, demasiado temerosos, potenciando el mercado de segunda mano. Esperemos que, no tardando mucho, lleguemos a un punto intermedio donde ni la exageración ni el pánico nos impulsen en nuestras tomas de decisión. Y en ese punto se encuentran nuestros dos contendientes, pues se adaptan a la perfección a familias de cuatro integrantes, ofreciendo buenas prestaciones y un comedido consumo sin acercarse, peligrosamente, a los 30.000 euros, como ocurre con el segmento monovolumen inmediatamente superior.

Cierto es que, por nuestros pecados de soberbia, este tipo de monovolumen no ha vivido la popularidad que se hubiera merecido pero, ahora, puede que les haya llegado su hora. El Meriva ha recibido recientemente el propulsor más moderno de Opel en materia turbodiésel, con 1,6 litros y 136 CV. Frente a los 128 que declara el Hyundai —que luego, en banco, casi iguala el rendimiento del CDTI— se siente más enérgico, casi en exceso, con una reacción turbo que, a algunos conductores, les puede parecer excesiva. Por su parte, el motor del ix20 genera un poco menos de par, pero lo entrega de forma más progresiva, lo que acaba agradando más en una conducción turística. Esto tiene su contrapartida al comprobar las cifras de gasto de combustible. El motor CDTI del Meriva posee el sistema de parada automática en detención, lo que se traduce en un menor consumo urbano, que es realmente donde labra su victoria. Cierto es que se ha estimado que este sistema llega a reducir en 0,2 l/100 el gasto en ciudad, con lo que, vistas las diferencias, hay otros factores que influyen: desarrollos más largos, más par a bajas vueltas, diseño más actual, etc. Ya puestos a tratar temas relativos al dinamismo, no hay duda que el Meriva es un modelo más rápido y ágil, aunque en aceleración pura su rival se defiende mejor que bien. Sin embargo, en tráfico real, la reacción más enérgica —antes comentada— de su motor permite 'saltar' de forma más rápida entre el tráfico y, sobre todo, adelantar con más prontitud y seguridad.

Subir y bajar

Opel MerivaEn cualquier caso, el uso y la conducción de ambos es gratificante, aunque la dirección del Opel nos ha parecido dura en exceso, sin saber con exactitud si se trataba de esta unidad en concreto. También el manejo del cambio es más 'viril' y, por cierto, con mayor propensión a pellizcarse un dedo con el gatillo que hay que presionar para poder insertar la marcha atrás. La posición al volante no es totalmente paralela entre ambos, quizás porque la unidad de pruebas del Meriva disponía de asientos opcionales, muy buenos por cierto, pero que no ayudaban a conseguir la posición al volante más satisfactoria, al menos, para nuestro gusto. En el Hyundai, sin embargo, los asientos más sencillos nos hacían 'caer' a la primera en la posición deseada. Pero más que las diferencias entre posiciones, donde más disparidad encontramos es en el nivel sonoro, claramente superior en el modelo coreano, aunque no llega a ser desagradable. Las suspensiones mantienen la divergencia que en otros variados apartados se vive en estos dos modelos. El Opel se nota más firme y, en este caso, con la opcional monta de ruedas y neumáticos que equipaba a nuestra unidad de pruebas, casi deportivo. Tanto es así que el tren trasero se muestra vivo en las fases de descarga —al soltar el acelerador o frenar en plena curva—, lo que podría no congeniar con algunos de los conductores tipo de este modelo. Por su parte, el ix20 es claramente más blando, pero —y esto no hay que olvidarlo— con su mejor monta de llantas y neumáticos de serie, compite a la perfección en las habituales exigencias que unos padres de familia van a exigir un modelo como éste. Para terminar con el apartado dinámico llegamos a los frenos, donde la paridad en las distancias necesarias para la detención es palmaria, excepto en las paradas desde baja velocidad, donde el Opel, con neumáticos 'gordos' opcionales, aventaja claramente al Hyundai. Y no nos extraña porque la mordiente de sus frenos nos ha parecido casi exagerada, lo que nos ha llevado a 'pegar frenazos' con demasiada frecuencia, si no ponemos la debida atención.

Entrar y salir

Comparativa: Hyundai ix20 1.6 CRDI Style vs Opel Meriva 1.6 CDTI ExcellenceHemos dejado para el final la clave de la carrocería del Meriva, sus puertas traseras de apertura contraria a la marcha. El mero hecho de que no se hayan generalizado entre otros muchos modelos ya nos indica que tienen sus pros y sus contras. Entre los primeros destacaríamos la amplitud que se genera para acomodarse en el asientos posterior, máxime cuando el grado de apertura es, prácticamente, de 90 grados. En su contra, podríamos apostillar que no facilitan la visibilidad hacia atrás antes de abrirlas, por si vienen otros vehículos. Tampoco son la mejor solución si dos usuarios quieren entrar al mismo tiempo en las plazas delanteras y traseras del mismo lado. Incluso alguna fémina podría poner peros si se baja utilizando falda...Pasamos al maletero, donde hemos de recordar, ante todo, que hay veinte centímetros de diferencia en su longitud exterior, siendo el Meriva el más grande. En ambos casos, la banqueta trasera se puede deslizar a la distancia que nos interese en función de los pasajeros y la carga que llevemos. En el ix20 se dispone de un centímetro más para jugar con ello. Y en cuanto al maletero, las cifras son claras: alrededor de cien litros más a  favor del Hyundai.