El Alfa Romeo Giulia Veloce 2.0 de 280 CV, el Opel Insignia 2.0 GSi de 260 CV y el VW Arteon 2.0 TSi de 280 CV son tres interesantes berlinas con motor turbo de gasolina, cada una con sus propias características y esencia. Pero, ¿qué esconden cada uno de nuestros tres protagonistas?
Alfa Romeo Giulia Veloce: acción/reacción
El Alfa Giulia tiene tanta personalidad que cualquier versión, empezando por la mecánicamente más discreta, basta para sentirla una berlina espectacular. Su puesto de conducción (muy bajo de asiento, volante muy vertical y consola central elevada) y respuesta de chasis hacen del Giulia una berlina para los más entusiastas de la conducción deportiva. Su tren delantero es diabólicamente rápido y, en conjunto, su agilidad dinámica propuesta con muy poco volanteo puede llegar a exigirte que lo asimiles. Nada que no consigas a la tercera curva y entonces ya no querrás otra puesta a punto de acción/reacción. Puede parecer una exageración decir que el Alfa va mejor en curva que en recta, cuando las exigencias dinámicas en curva son infinitamente superiores, pero es en las curvas, y cuanto más cerradas mejor, donde su comportamiento te lleva a sentirlo extremadamente bien elaborado y eficaz para ese cometido de entrar, trazar y salir. Es muy rápido, muy preciso, muy incisivo… y muy sencillo, cuando has asimilado sus tiempos, que todo surja así. Además, lo hace con una suspensión muy equilibrada (dispone de amortiguadores variables), que te reporta igualmente una buena calidad de bacheo y una razonable suavidad general de marcha. Su exigencia, dificultad o inferioridad no está tanto en el también rapidísimo auto-alineamiento de la dirección al salir de la curva, como en una geometría del tren delantero y en un prácticamente inexistente juego central de volante que hacen que el Giulia “husmeé" según qué asfaltos hasta en línea recta, obligándote a redirigirlo en ciertas situaciones con pequeños movimientos de muñeca.
PRESTACIONES | Alfa Romeo Giulia 2.0 Turbo Veloce 280 CV 4x4 | Opel Insignia Grand Sport 2.0 Turbo GSi 260 CV 4x4 | VW Arteon 2.0 TSi 4Motion 280 CV |
Acel. 0-100 km/h | 5,44 s | 6,71 s | 5,35 s |
Acel. 0-1000 metros | 25,28 s | 26,84 s | 25,09 s |
Sonoridad 100 km/h | 65,1 dBA | 68,3 dBA | 66,3 dBA |
Sonoridad 120 km/h | 68,5 dBA | 70,8 dBA | 68,5 dBA |
Frenada desde 140 km/h | 72 m | 67,75 m | 71,57 m |
Peso en báscula | 1.600 kg | 1.680 kg | 1.728 kg |
Opel Insignia GSi: equilibrio deportivo
El Opel Insignia GSI lleva su deportividad al extremo opuesto del Alfa Romeo Giulia Veloce. Hay un trabajo específico (geometrías, muelles, amortiguadores, estabilizadoras, frenos etc,) respecto al Insignia Exclusive con el mismo motor y transmisión, pero su configuración, si bien dinamiza y estabiliza su conducta, le hace una versión también exquisitamente equilibrada, agradable y confortable como deportivo. De hecho, podría pasar por una variante no estrictamente deportiva, como sugieren sus históricas siglas. En ningún caso el GSI exalta algún tipo de actitud como lo pueden llegar a hacer sus rivales, siquiera cuando optas por el modo de conducción “Competition", que gestiona con las leyes más deportivas la respuesta de la amortiguación, dirección, acelerador, transmisión y control de estabilidad. Por comparación con sus rivales, donde más pierde el Insignia GSI es en curva muy cerrada, donde no llega a ser tan rápido, incisivo y preciso. Pero también, en trazados apenas más abiertos su equilibrio confort/estabilidad es impecable y su conducción muy despreocupada.
ESPACIO | Alfa Romeo Giulia 2.0 Turbo Veloce 280 CV 4x4 | Opel Insignia Grand Sport 2.0 Turbo GSi 260 CV 4x4 | VW Arteon 2.0 TSi 4Motion 280 CV |
Anchura delantera | 142 cm | 144 cm | 143 cm |
Anchura trasera | 137 cm | 142 cm | 137 cm |
Altura delantera | 90/96 cm | 91/98 cm | 87/94 cm |
Altura trasera | 90 cm | 87 cm | 87 cm |
Espacio para piernas | 75 cm | 79 cm | 86 cm |
Maletero | 390 litros | 495 litros | 590 litros |
VW Arteon R Line: más deportivo que Insignia y menos que Giulia
El punto de partida del VW Arteon R Line no se aleja mucho del Insignia GSI, pero Volkswagen acentúa mucho más los cambios sobre la amortiguación, dirección y acelerador (y sonido de escape) de los distintos modos de conducción. En su modo Confort puede sentirse tan suave de pisada como el Insignia en Tour (no es mucho menos el Alfa en Normal) y en modo Sport incluso más sólido que el Giulia bajo sus leyes Dynamic. En ningún caso su tren delantero se vuelve tan reactivo como el de la berlina italiana, pero el conjunto sí se muestra muy preciso en todo tipo de curva y trazado. El Arteon transmite más deportividad que el Insignia y, aunque no sea tan emocionante el Volkswagen como el Alfa Romeo, su comportamiento general siempre es soberbio en cualquier entorno.
CONSUMOS | Alfa Romeo Giulia 2.0 Turbo Veloce 280 CV 4x4 | Opel Insignia Grand Sport 2.0 Turbo GSi 260 CV 4x4 | VW Arteon 2.0 TSi 4Motion 280 CV |
Consumo en ciudad | 10,5 l/100 km | 10,4 l/100 km | 10,7 l/100 km |
Consumo en carretera | 6,8 l/100 km | 8,0 l/100 km | 8,3 l/100 km |
Consumo medio | 8,3 l/100 km | 8,9 l/100 km | 9,3 l/100 km |
Los tres protagonistas de esta comparativa ofrecen mucha y muy buena mecánica. Tanto los 280 CV del Alfa y VW como los 260 del Opel provienen de motores 2 litros turbo de 4 cilindros. El Giulia tiene el “valor técnico" de llevarlo colocado longitudinalmente, dictado por la propulsión trasera de las versiones 4x2. Insignia y Arteon lo llevan transversal. Así, cada uno a su manera reciben transmisiones integrales, con mayor preponderancia el eje trasero del Giulia y los delanteros en los Insignia y Arteon; y cambios automáticos, por convertidor de par y 8 velocidades en Alfa y Opel y un doble embrague de 7 en el Volkswagen. Las tres opciones se muestran espectaculares, por el propio funcionamiento de los motores: desde la suavidad de giro, el empuje desde muy bajo régimen y, al fin y al cabo, por unas prestaciones sobresalientes. El Insignia paga su menor potencia con registros inferiores, pero nunca te hace dudar de lo mucho y bien que empuja. En todo caso, su cambio automático es el que de alguna manera te transmite menos deportividad, por sentir sus transiciones muy suaves y menos rápidas. El del Alfa llega a ser tan rápido gestionando los cambios en su modo Dynamic, que a veces bajo máxima aceleración incluso te resulta brusco. Y es el único que no cambia a una marcha superior cuando llevas el motor al corte en modo manual. El DSG del Arteon funciona muy bien en todas las situaciones, cuando delegas en él los cambios, como cuando pasas a dirigirlos tú, tanto por suavidad como rapidez. Su 7ª desahoga algo menos que las 8ª de sus rivales y quizá por aquí vengan sus mayores consumos ruteros. En cualquier caso, en todos re-descubres el placer de conducir una berlina y un motor turbo de gasolina. El Giulia es pasional, pero también el menos funcional. Insignia y Arteon tratan mejor el papel familiar de la berlina, aunque solo sea por el portón trasero, una mejor habitabilidad y capacidad de carga. Digamos que el Alfa es un deportivo familiar y el Opel y Volkswagen unos familiares deportivos. Y los tres, unas excelentes berlinas de gasolina.