Volvo siempre se ha caracterizado por sus interesantes versiones familiares o station wagon, pero ahora se está convirtiendo en un verdadero especialista en vehículos con gran capacidad para circular fuera de carretera, pues aparte de los SUV XC90, XC60 y XC40, dispone de versiones Cross Country AWD en sus variantes familiares de las series 90 y 60.
Además, siguiendo su política de electrificación, más adelante ampliará la oferta por encima del T5 de gasolina con variantes híbridas enchufables T6, de 335 CV y T8 de 390 CV. También contará con una opción alimentada por gasóleo D4 de 190 CV, con el que se iniciará la comercialización del modelo en España —en un único acabado similar al Momentum—, que estará disponible en la red a partir del próximo mes de marzo por 50.195 y 53.087 euros.
No se descarta que en un futuro próximo pueda lanzarse una variante compacta en esta misma línea para reemplazar al V40, del que la marca ya ha confirmado ya su discontinuidad de producción.
Volvo V60 Cross Country 2019: la saga continúa
La filosofía del V60 Cross Country es similar a la de su hermano mayor V90, es decir, no sólo se trata de un modelo con un aspecto más robusto, sino que se le ha dotado de unas suspensiones que permiten elevar la distancia al suelo 75 mm respecto a los familiares convencionales del V60 (21 cm de altura libre, frente a los 14,7 de la variante familiar).
En su aspecto exterior presenta algunas diferencias respecto a los familiares convencionales de la serie V60, si bien la mayor altura al suelo es la característica más llamativa del Cross Country.
Parrilla frontal específica, faros antiniebla, aletines y estriberas reforzados en plástico mate y unos paragolpes específicos que aumentan la longitud total de la carrocería en dos centímetros marcan la estética de esta versión.
En el interior, pocas diferencias. Lo más significativo es la posición de asiento del conductor, que se encuentra unos milímetros más elevada que en las variantes convencionales.
Respecto a la gama del V60 no hay cambios en el diseño del interior, ni en la capacidad del maletero, que promete 529 litros, sin rueda de repuesto, que se ofrece como opción por 150 euros, un elemento imprescindible para un modelo de estas características.
Lógicamente, el sistema de tracción integral permanente está incluido en la configuración de serie de esta versión, al igual que ocurre con el sistema de control de descenso de pendientes, el control electrónico de estabilidad, el control de tracción en giros y el modo de conducción todoterreno Off-road, seleccionable desde el control de la consola central.
Un extenso paquete de opciones en materia de seguridad, confort, audio y comunicación, diseño y funcionalidad, están disponibles para personalizar el modelo a gusto del consumidor. De serie sí incluye el sistema City Safety con freno automático, capaz de detectar a distancia peatones, ciclistas o animales de gran tamaño.
Volvo V60 Cross Country 2019: buen comportamiento en carretera y campo
Durante la toma de contacto, celebrada al norte de Suecia, sólo hemos podido poner a prueba sus características más camperas en un circuito helado, pues la cantidad de hielo y nieve acumulada en las carreteras no nos ha permitido circular a alta velocidad, a pesar de equipar neumáticos de invierno en las unidades de prueba.
Sí hemos tenido la oportunidad de comprobar los beneficios de la tracción integral permanente, las bondades de las suspensiones con mayor recorrido, y la suavidad y entrega de potencia del motor T5 de gasolina, que se muestra pletórico de par en todo momento.
Su configuración de carrocería familiar permite disponer de gran capacidad de carga sin que se muestre aparatoso al circular por carretera a ritmos vivos y la mayor distancia al suelo, superior a la de muchos SUV de reconocido prestigio, permite afrontar con decisión grandes imperfecciones del terreno sin miedo a dañar los bajos del coche. Además, el tarado de la suspensión metálica, no neumática, no resulta excesivamente firme, lo que se traduce en especial comodidad para los ocupantes.