Un amigo te dice que se ha comprado un Volkswagen Golf y lo primero que te viene a la mente es un GTI. Te lo imaginas con sus deportivas llantas, la tapicería de cuadros de toda la vida y las siglas GTI por todas partes. Sin embargo, cuando te lo enseña te encuentras con un familiar, con sus dos sillitas de niño atrás, las barras en el techo y que poco tiene que ver con el deportivo y pasional Golf que tenías en mente, sí, ése que sale en el anuncio y con el que soñaste cuando eras joven. Es cierto, versiones distintas han hecho que el Golf pierda pasión. Carece ya de esa esencia que no tenía ningún otro y que lo hacía único, y hace tiempo que lo ha cambiado por ser más práctico, completo y adecuado para cada público. Como ferviente defensor de las siglas GTI te diré que la versión deportiva sigue conservando parte de su magia original, pero cuando te encuentras con un modelo familiar como éste que aquí pruebo, por muy bueno que sea, ya no es lo mismo.
El nuevo Golf Variant es un buen coche y esta versión 2.0 TDI con cambio DSG y 150 caballos me parece muy recomendable, pero es la primera vez que siento en un Golf la sensación de perfecto "electrodoméstico"; este Variant lo hace todo bien, ofrece buen espacio, transmite calidad y no encuentras en él un sólo defecto grave. Se acerca mucho al ideal de lo que debe ser un coche para todos los días. Sobre el Golf convencional el Variant añade un espectacular techo solar (enorme) y un maletero 175 litros superior hasta la altura de la bandeja, espacio que se multiplica si decidimos aprovechar el hueco hasta el techo. Ese es el único motivo (en tus gustos estéticos no me meto) por el cual debes decidir entre un Variant y un Golf de 5 puertas convencional, ya que en el resto de mediciones, equipamiento o mecánicas son calcados. Es más, si lo que buscas es espacio de verdad, no pierdas el tiempo en la propia Volkswagen mirando un Tiguan (180 litros menos de capacidad) que el Golf Variant incluso te aporta más espacio en las plazas traseras y también lo hay en versión 4x4.
Podrías dudar en irte a un Passat y, salvando la lógica diferencia de precio, me parecería razonable, aunque lo único que ganarás es en espacio en las plazas traseras (que no está mal) porque hasta el maletero del Golf Variant es 20 litros más grande que el del Passat Variant. La conclusión de esto es que estás ante uno de los modelos que más interesa en lo que se refiere a espacio interior y tamaño exterior. Obviamente nada tiene que hacer frente a un Skoda Octavia Combi, pero comparado con el resto de competencia se queda en muy buen lugar. No es un coche de diseño espectacular pero con las barras del techo cromadas y unas llantas bonitas gana atractivo. Con el acabado Sport ofrece unos buenos asientos delanteros. Detrás hay poca ergonomía de respaldo, lo que contribuye a que el pasajero que va en el centro esté más cómodo que en un Golf de 5 puertas. El mullido en estas plazas es algo duro... va en gustos, ya que habrá quien prefiera la menor dureza y mayor confort de asientos de los rivales franceses.
Con este motor Diesel el Variant se mueve de sobra. Esta unidad ha sido la que menos potencia ha dado de todas las que han pasado por nuestro Centro Técnico, y eso no ha impedido que el nivel prestacional fuese bueno. Cargado hasta los topes y con el climatizador funcionando sigue ofreciendo buena respuesta en carretera, siendo una buena combinación. Con el cambio DSG gana en agrado de uso, si bien se pone en un precio superior al de la mayoría de sus rivales. Se comporta bien aunque yo prescindiría de las llantas de 18 pulgadas con neumático de perfil 40 que llevaba esta unidad (opcionales), ya que provoca cierta sequedad innecesaria en el tren trasero; mejor con la rueda de 17 pulgadas de serie.
Tiene un buen sistema de Stop/Start y con el modo eco conectado logra un acertado nivel de consumos, ofreciendo un gran compromiso entre el gasto y las prestaciones, algo común a todos los modelos del Grupo VW equipados con esta combinación de plataforma con multibrazo trasero y TDI de 150 CV. Con el acabado Sport transmite una elevada sensación de calidad, tanto al rodar como al tacto de todos los mandos o filtración de ruido y vibraciones. En conjunto me parece un coche práctico y recomendable. Otra cosa es que el precio no te encaje, en cuyo caso mira en Seat o Skoda porque tendrás similares prestaciones, tacto, consumo y espacio.