La nueva Clase C de Mercedes llegaba al mercado a finales del año pasado y ahora le toca el turno a la atractiva versión Coupé que, como se puede imaginar, se beneficia de todos los avances experimentados en la berlina tanto a nivel técnico como en lo que se refiere a equipamiento y soluciones de vanguardia.
Salta a la vista que el nuevo Clase C Coupé ofrece un diseño más estilizado y moderno que su antecesor, lo que también se pone de manifiesto con un coeficiente de penetración aerodinámica Cx que se reduce de 0,27 a de 0,26. Sus formas son asimismo más fluidas, da la sensación de ser más coche, algo que se deja sentir también por unas dimensiones ligeramente más grandes. No en vano, la longitud total aumenta 95 mm, 40 mm la anchura, mientras que la distancia entre ejes también crece 80 mm. Lo mejor es que el nuevo bastidor es de igual manera 50 kg más ligero, entre otras cosas gracias al empleo de aluminio para la construcción de aletas, capó delantero y tapa de maletero. Las nuevas dimensiones también permiten una superior habitabilidad, lo que se aprecia sobre todo en las plazas traseras, que son bastante aceptables y permiten viajar sin demasiadas apreturas a dos adultos.
El habitáculo del nuevo Mercedes Clase C Coupé puede presumir asimismo de una terminación exquisitamente cuidada, como es norma entre las realizaciones de la marca. El diseño, muy minimalista, resulta sumamente atractivo y cálido a la vez. Muy completo, el equipamiento, como ocurre con la berlina, puede ser casi de ciencia ficción si uno se deja seducir por la inacabable lista de opciones que se ofrece.
Desde el punto de vista técnico, el bastidor del Mercedes Clase C Coupé emplea prácticamente las mismas soluciones técnicas que la berlina; el refinado tren delantero de cuatro brazos es prácticamente idéntico, lo mismo que el eje trasero multibrazo. Eso sí, dado su talante deportivo, la altura de casco se ha reducido 15 mm con respecto a la berlina. Con la opción Agility Control se puede además disponer de unos tarados más enérgicos del conjunto muelle-amortiguador y una desmultiplicación más rápida de la dirección. De igual manera, también se puede montar opcionalmente la amortiguación neumática Airmatic que varía los tarados de forma inteligente y en función del programa de conducción escogido Eco, Confort, Sport, Sport e Individual.
Motores del Mercedes Clase C Coupé
Los motores que se ofrecen para el C Coupé son básicamente los mismos que en la berlina, si bien la oferta no es tan completa y algunas de las versiones tampoco se encuentran disponibles para el mercado nacional. Entre los gasolina figuran los C200 y 300 con motor cuatro cilindros de 2 litros turbo de 184 y 245 CV, mientras que entre los diesel se puede escoger entre los C220 CDI y 250 CDI para los que se anuncian 170 y 204 CV respectivamente. Todas las motorizaciones se encuentran disponibles con cambio manual de seis marchas, mientras que en opción se pueden montar una automática de siete velocidades o bien el sofisticado cambio GTronic de nueve relaciones.
Las versiones AMG no se han hecho esperar y llegan al mismo tiempo que las variantes más modestas. Con un aspecto mucho más llamativo, estas se distinguen por la adopción de llantas y neumáticos específicos, aletas ensanchadas, las cuatro salidas de los escapes y algunas cosas más como las voluminosas entradas de aire en el frontal o el discreto difusor trasero.
Mercedes Clase C Coupé AMG
Más evidentes son las diferencias con respecto a las versiones más modestas de la Clase C Coupé cuando el motor que anima al AMG C 63 Coupé cobra vida. El rugido que emite, es capaz de poner los pelos de punta a cualquiera. Al igual que en la berlina, el V8 de 4 litros alimentado por doble turbo se ofrece en versiones de 476 CV para el AMG C 63 y 510 CV si se escoge la variante S.
Esta mecánica impresiona por su poderío y capacidad de respuesta; absolutamente apabullante a cualquier régimen, casi brutal, pero afortunadamente la abundante caballería se dosifica con bastante facilidad. Con 510 CV de potencia y un par que supera los 70 mkg, el Mercedes AMG C63 S Coupé consigue acelerar de 0 a 100 en 3,9 segundos, mientras que la velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h. Por buscar comparaciones, el BMW M4 emplea 4 décima más para acelerar de 0 a100 km/h y la cifra aumenta hasta 6 décimas de segundo en el caso del Audi RS5. El modelo de la estrella se sitúa, por tanto, a la cabeza en prestaciones entre los de su clase, algo que también ocurre si se escoge la versión de 476 CV, que apenas pierde 1 décima de 0 a 100 km/h y eso a pesar de que el peso en orden de marcha ronda los 1.800 kg y supera al del BMW M4 en aproximadamente 150 kg.
Como en la berlina, asociado al poderoso V8 de 4 litros va un cambio automático Speedshift MCT de siete velocidades. Esta transmisión, que combina el convertidor de par con un embrague multidisco, ha demostrado sobradamente sus cualidades en otros modelos de la marca y desde luego tiene poco que envidiar a los cambios de doble embrague que montan sus oponentes.
Para transmitir al suelo tan elevado rendimiento mecánico, el nuevo Mercedes AMG C 63 Coupé también dispone de diferencial autoblocante mecánico, que en el caso de la versión S cuenta con gestión electrónica para mejorar su eficacia. El AMG C 63 S Coupé también incorpora apoyos dinámicos para el motor, llantas de 19” en lugar de 18” y un calzado más generoso, también frenos más potentes en el tren delantero, donde uno se encuentra con discos de 390 mm de diámetro en lugar de 360 y pinzas más grandes. En opción también se puede montar un impresionante equipo de discos cerámicos de 400 mm de diámetro.
Comportamiento del Mercedes Clase C Coupé AMG
El Mercedes AMG C 63 Coupé estrena un tren trasero de nuevo diseño, mucho más refinado que el de la berlina y del que montan las verxiones del Coupé más modestas. Este ofrece una pisada más consistente y permite un comportamiento más eficaz en cualquier circunstancia. También dispone de amortiguación pilotada con tres tarados diferentes y que varía los tarados de forma automática y en función del modo de conducción que se escoja. Se ofrecen los programas Eco, Confort, Sport, Sport y Race, este último reservado a la versión S. Asimismo dispone del modo Individual que se puede programar a gusto del consumidor. En función del programa escogido, cambia la respuesta y el sonido del motor, la velocidad del cambio, la dureza de la suspensión, también la asistencia de la dirección y las ayudas a la conducción, entre otros. Por cierto, que tanto el ESP como el control de tracción se pueden desconectar parcial o totalmente.
Aunque las suspensiones son bastante enérgicas incluso en el modo Confort, este coupé sorprende por la facilidad con la absorbe las irregularidades del firme, lo que le sitúa en una posición muy favorable frente a la competencia a la hora de realizar viajes de largo recorrido. Ni que decir tiene que se trata de un coche muy veloz, que poco o nada tiene que envidiar en prestaciones a los deportivos más rápidos del mundo. Lo mejor de todo es que a pesar de su configuración mecánica clásica motor delantero, propulsión trasera y de su elevado potencial, ofrece una nobleza y facilidad de manejo sorprendente, si bien es verdad que las ayudas a la conducción tienen mucho trabajo a poco que se intente aprovechar su descomunal caballería, pero es un coche que lo puede conducir cualquiera. Este cupé impresiona por sus prestaciones y capacidad rutera, también por la eficacia que ofrece para rodar por trazados sinuosos.
En el circuito malagueño de Ascari el Mercedes AMG C 63 S demostraba una nobleza de reacciones sorprendente, incluso en el modo Race y con las ayudas a la conducción en Sport, que es como rodamos en este trazado, el tren trasero se mostraba bastante juguetón y se insinúa con facilidad a poco que se tratara el pedal del gas con demasiado optimismo. Su eficacia resulta impresionante, si bien es verdad que uno no puede dejar de pensar como sería este coupé con 200 kg menos. Desde luego no tendría problemas para convertirse en el nuevo rey de la categoría. No, obstante, tiempo habrá para comprobarlo.
Precios del Mercedes Clase C Coupé
Los nuevos Mercedes C Coupé se encuentran ya disponibles en los concesionarios de la marca. El precio de la versión más económica, el C220 CDI alcanza los 41.900 €, mientras que el C300 llega a los 48.000 €, pero en ambos casos la factura puede subir considerablemente, a poco que uno se encapriche con algunos de los elementos que figuran en la suculenta y casi inacabable lista de opciones. Por su parte el precio del Mercedes AMG C 63 Coupé, todavía sin confirmar rondara los 72.000 € aproximadamente 6.000 € más la versión S. De estos últimos ya se pueden hacer pedidos, pero no llegarán al mercado hasta el próximo mes de marzo.
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