Alfa 147 JTD 16v M-Jet

Motor explosivo, cambios estéticos y misma filosofía. El discurrir de los años no pasa en balde, ni siquiera para el bello producto de Alfa.

Alfa 147 JTD 16v M-Jet
Alfa 147 JTD 16v M-Jet

El puesto de conducción es cómodo, los asientos recogen el cuerpo correctamente. Sin embargo, la tapicería de cuero (opción que cuesta 1.010 euros) no permite alcanzar un nivel de sujeción mayor. El conductor se sentirá agradablemente envuelto por todos los mandos requeridos para una conducción fácil y segura.En la zona de los relojes, destaca el color rojo, que, en conducción nocturna, puede llegar a saturarnos. Ello hace necesario que modulemos el reostato a nuestro gusto para evitar el cansancio de los ojos.

Las plazas traseras no son muy amplias. La colocación muy vertical del respaldo, en viajes largos, puede comprometer el confort de los ocupantes. En general, viajarán mejor dos personas que tres en esta parte trasera del 147.La capacidad del maletero no es una de sus grandes virtudes: hemos calculado que tiene 250 litros. Aunque la boca de carga es amplia, el hueco en sí del maletero no resulta muy aprovechable si tenemos que cargar, por ejemplo, voluminosas maletas. Si no llevamos ocupantes en las plazas traseras, lo podremos solucionar echando los asientos hacia delante. De esta forma, ganamos un piso plano y más litros de capacidad.Hasta 25 versiones diferentes ofrece Alfa Romeo en el mercado nacional. Las combinaciones resultan de conjugar dos carrocerías (tres y cinco puertas), cuatro motores –dos gasolina y dos Diesel-, con hasta siete variantes de potencia diferentes, y tres terminaciones: Distinctive, Impression y Progression. El 147 más sencillo es el tres puertas 1.6 de 105 CV que cuesta 16.503 euros. Casi por el doble (32.082 euros) sale el tope de gama, el deportivo GTA, que monta una mecánica de 3,2 litros de cilindrada y anuncia 250 CV de potencia. Nuestro protagonista se sitúa en la zona alta de la gama 147: es el más potente de los Diesel. Al lado de estas líneas, encontrarás un enlace a la gama completa. Los cambios estéticos son ligeros. No hace falta ser un alfista para darse cuenta de ellos, pero sí es preciso prestar un poco de atención. De perfil ya vemos que el morro ha cambiado, se ha hecho más afilado, y que los tiradores de las puertas son nuevos. Si lo miramos de frente, los cambios sí son más evidentes. Ahora se distinguen tres ópticas y una forma más suave de la cápsula que las envuelve; la parrilla también ha sido retocada, con el objetivo de integrar en la parte inferior de la carrocería los faros de niebla, y la parte de atrás de los espejos retrovisores ya no es del color de la carrocería (un error, creemos). En la trasera, acusamos como variación principal una banda cromada en la parte baja del portón. Entremos dentro del 147. Impecable es el adjetivo que mejor describe el interior: buenos acabados y materiales con aspecto de calidad, pero nada nuevo. Cuando apareció la anterior versión del 147, allá por 2001, muchos subrayábamos “el renovado diseño" y destacábamos su “cuidada estética". Han pasado ya casi cinco años y todo sigue igual; ahora nos sorprende menos.

El puesto de conducción es cómodo, los asientos recogen el cuerpo correctamente. Sin embargo, la tapicería de cuero (opción que cuesta 1.010 euros) no permite alcanzar un nivel de sujeción mayor. El conductor se sentirá agradablemente envuelto por todos los mandos requeridos para una conducción fácil y segura.En la zona de los relojes, destaca el color rojo, que, en conducción nocturna, puede llegar a saturarnos. Ello hace necesario que modulemos el reostato a nuestro gusto para evitar el cansancio de los ojos.

Las plazas traseras no son muy amplias. La colocación muy vertical del respaldo, en viajes largos, puede comprometer el confort de los ocupantes. En general, viajarán mejor dos personas que tres en esta parte trasera del 147.La capacidad del maletero no es una de sus grandes virtudes: hemos calculado que tiene 250 litros. Aunque la boca de carga es amplia, el hueco en sí del maletero no resulta muy aprovechable si tenemos que cargar, por ejemplo, voluminosas maletas. Si no llevamos ocupantes en las plazas traseras, lo podremos solucionar echando los asientos hacia delante. De esta forma, ganamos un piso plano y más litros de capacidad.Hasta 25 versiones diferentes ofrece Alfa Romeo en el mercado nacional. Las combinaciones resultan de conjugar dos carrocerías (tres y cinco puertas), cuatro motores –dos gasolina y dos Diesel-, con hasta siete variantes de potencia diferentes, y tres terminaciones: Distinctive, Impression y Progression. El 147 más sencillo es el tres puertas 1.6 de 105 CV que cuesta 16.503 euros. Casi por el doble (32.082 euros) sale el tope de gama, el deportivo GTA, que monta una mecánica de 3,2 litros de cilindrada y anuncia 250 CV de potencia. Nuestro protagonista se sitúa en la zona alta de la gama 147: es el más potente de los Diesel. Al lado de estas líneas, encontrarás un enlace a la gama completa. Los cambios estéticos son ligeros. No hace falta ser un alfista para darse cuenta de ellos, pero sí es preciso prestar un poco de atención. De perfil ya vemos que el morro ha cambiado, se ha hecho más afilado, y que los tiradores de las puertas son nuevos. Si lo miramos de frente, los cambios sí son más evidentes. Ahora se distinguen tres ópticas y una forma más suave de la cápsula que las envuelve; la parrilla también ha sido retocada, con el objetivo de integrar en la parte inferior de la carrocería los faros de niebla, y la parte de atrás de los espejos retrovisores ya no es del color de la carrocería (un error, creemos). En la trasera, acusamos como variación principal una banda cromada en la parte baja del portón. Entremos dentro del 147. Impecable es el adjetivo que mejor describe el interior: buenos acabados y materiales con aspecto de calidad, pero nada nuevo. Cuando apareció la anterior versión del 147, allá por 2001, muchos subrayábamos “el renovado diseño" y destacábamos su “cuidada estética". Han pasado ya casi cinco años y todo sigue igual; ahora nos sorprende menos.