¿Sabes que hay un lugar donde un carbonero reparte regalos en el solsticio de invierno? ¿Y que existe una isla donde la gente se comunica silbando? ¿Has oído hablar de una laguna tan negra y profunda que se dice que no tiene fondo? ¿Y de una cascada que cae sobre el mar? ¿Te gustaría caminar por dentro de una montaña de sal o bucear sobre una pradera submarina? ¿Sabes que hay un pueblo donde hacen caramelos gigantes, tan grandes como adoquines? Todo esto y mucho más es lo que se puede encontrar en el encontrar en el Atlas de España para niños, de Lonely Planet.
España es un país de grandes contrastes, no solo por su naturaleza variada y las características de sus ciudades, sino también por la diversidad de sus gentes y sus costumbres
Los desiertos de Almería frente a las verdes praderas asturianas. Las cascadas del valle de Arán junto a las aguas plácidas de las salinas de Ibiza. La efervescente y populosa Puerta del Sol madrileña y la inquietante soledad de los pueblos vaciados de Soria. España es un país de grandes contrastes, no solo por su naturaleza variada y las características de sus ciudades, sino también por la diversidad de sus gentes y sus costumbres. En definitiva, gracias a este atlas se puede explorar hasta el último rincón del país, para descubrir todos los tesoros que esconde.

De norte a sur, de este a oeste, la Península Ibérica, las islas y las dos ciudades autónomas que forman España cuentan con una larga historia que abarca desde los primeros humanos que pisaron Europa y habitaron Atapuerca, hasta la modernidad de las grandes construcciones contemporáneas, como la Ciudad de las Artes y de las Ciencias de Valencia o el Museo Guggenheim de Bilbao. Y también de ancestrales leyendas que pueblan cada rincón de su territorio, como las meigas gallegas, el monstruo del lago de Banyoles o la diabólica cueva de Salamanca.
Tan solo hay que agarrar la tabla de surf y prepararse para cabalgar las olas del norte, donde el mar Cantábrico muestra su bravura. Y ponerse el bañador para disfrutar de las soleadas playas del Mediterráneo
Este atlas ilustrado invita a viajar por el país a través de sus páginas. Tan solo hay que agarrar la tabla de surf y prepararse para cabalgar las olas del norte, donde el mar Cantábrico muestra su bravura. Y ponerse el bañador para disfrutar de las soleadas playas del Mediterráneo. O calzarse las botas de montaña para subir a los picos más altos de los Pirineos y recorrer a pie la Meseta Central y sus dos Castillas, a las que elogió el poeta Antonio Machado.

Por el camino, se descubre la historia de estos lugares, como hicieron Don Quijote y Sancho Panza, y se encuentran los restos de las civilizaciones que habitaron España a lo largo de la historia: los yacimientos íberos, los acueductos romanos, los palacios islámicos, los castillos medievales y las grandes construcciones modernas.
Los lectores visitarán el Museo del Prado, para admirar la obra de grandes artistas. Asistirán al Festival Internacional de Benicàssim. Bailarán al son de las dulzainas en las fiestas populares
A través de sus páginas, los lectores visitarán el Museo del Prado, para admirar la obra de grandes artistas. Asistirán al Festival Internacional de Benicàssim. Bailarán al son de las dulzainas en las fiestas populares. Y disfrutarán de la cultura y las tradiciones más divertidas, como la Tomatina de Buñol, las Fallas o la Feria de Abril.
Asimismo, se podrá viajar por el tiempo para averiguar qué ocurrió aquí hace cientos de años y conocer a españoles famosos con vidas de lo más interesantes. Por el camino, se podrán sumergir en las mil y una formas de vivir España y aprender palabras en algunas de las lenguas que se hablan en el país. Y por supuesto, también se podrá disfrutar de su gastronomía, sin que falten la paella, el jamón, el gazpacho, las tapas y, cómo no, la tortilla de patatas.