Capital del estado de Estiria, en el sudeste austriaco, Graz se derrama a ambas orillas del río Mura, con la Hauptplatz como corazón vibrante que irradia vida al resto de la ciudad a través de las estrechas callejuelas medievales que la circundan, arterias que llevan su idiosincrasia hasta el último rincón.

© Graz Tourismus/Fischer
Segunda ciudad más grande de Austria, tiene alrededor de 300.000 habitantes, de los que unos 60.000 son estudiantes en alguna de sus cuatro universidades y dos escuelas técnicas. No hay que olvidar que Johannes Kepler, astrónomo y matemático alemán conocido por sus leyes sobre el movimiento de los planetas, impartió en Graz clases de matemáticas en el s. XVI.
Una polifacética ciudad saldrá a nuestro encuentro para despertar un mosaico de emociones

© Graz Tourismus /Harry Schiffer
Pero será algo más que los números lo que nos cautive. Una polifacética ciudad saldrá a nuestro encuentro para despertar un mosaico de emociones, una urbe vibrante, llena de vida, que nos arrastrará en un torbellino para regalarnos a continuación la tranquilidad necesaria y calmar nuestro acelerado corazón, siempre arropado por un marcado sentido del gusto y la cultura.

© Graz Tourismus/Harry Schiffer
Impregnada de arte y cultura
El centro de la ciudad rezuma historia en cada una de sus calles y sus edificios, más que suficiente para que fuese declarada, en 1999, Patrimonio Mundial por la UNESCO, con un poso de saber que la llevó a convertirse en 2003 en Capital Europea de la Cultura. Por si esto fuera poco, en 2011 fue merecedora de otro título otorgado por la UNESCO, el de Ciudad del Diseño, donde el desarrollo moderno y la preservación de la tradición pasean de la mano para deleite de sus ciudadanos y visitantes.

El Museo Kunsthaus es el símbolo contemporáneo de la ciudad apodado como “friendly Alien”. © Österreich Werbung/Julius Silver
Graz es a la vez historia y punto de encuentro para artistas jóvenes y prometedores. Las tradiciones se aman, se viven y se celebran cuando la gente baila en la plaza Hauptplatz con vestidos Dirndl y pantalones de cuero y cuando el Schloßberg se transforma en un encantador paisaje invernal durante el Adviento.
Las tradiciones se aman, se viven y se celebran

© Graz Tourismus,/Harry Schiffer
El arte y la cultura nos esperan en los espacios públicos, los museos y los barrios artísticos de una ciudad que también sabe hacer autocrítica, al mismo tiempo que disfruta de la vida e irradia color y diversidad. Junto a imponentes instituciones clásicas como la ópera, el teatro o el Congreso, Graz siempre ha sido un centro importante para la escena local de cabaret y de arte a pequeña escala.
El corazón se conquista por el estómago
Graz, es, oficialmente, la capital gastronómica de Austria, distinción que confirma la alta calidad de los productos utilizados que se extiende más allá de los restaurantes condecorados con estrellas Michelin y toques de la guía GaultMillau. Los productos regionales y de temporada, que encontraremos en sus mercados de agricultores, son perfeccionados por todos los chefs de la ciudad. Encontrarás un lugar donde deleitarte en casi cada rincón de la ciudad: cafeterías, vinotecas, restaurantes, fondas, puestos de salchichas... en todas partes se puede descubrir el gusto de los habitantes de Graz por la buena vida.
Graz es la ciudad de los sentidos

© Graz Tourismus,/Tom Lamm
A todo ello hay que sumar un sugestivo toque mediterráneo. No en vano se la conoce como la ciudad más septentrional del sur. Esto se debe, por un lado, a las numerosas horas de sol y, por el otro, a la hospitalidad. Porque nada les gusta más a sus habitantes que sentarse en un espacio abierto con una buena copa de vino blanco, mientras lo degustan y observan a su alrededor. Graz es la ciudad de los sentidos.

© Erlebnisregion Graz/Tom Lamm
Más cerca de lo que crees
Los atractivos de Graz no terminan en el límite de sus calles ya que mucho más cerca de lo que crees, a pocos minutos de la ciudad, descubriremos grandes tesoros que no harán más que confirmar nuestro amor por este paraíso austriaco. El Museo al aire libre de Stübing, la abadía de Rein, el Parque de las Esculturas, el Museo Arnold Schwarzenegger, las cuevas de Lurgrotte o el criadero federal de caballos de la Escuela Española de Equitación de Viena en Piber terminarán de cautivarnos para hacer de Graz ese lugar al que siempre querremos volver.
A pocos minutos de la ciudad, descubriremos grandes tesoros

© Tourismusverband Lipizzanerheimat/Die Abbilderei