Europa pierde biomasa, ¿cuánta y cómo nos afecta?

Los satélites se han convertido en el ojo que todo lo ve… y lo mide, como la pérdida de biomasa en Europa, un fenómeno que está alcanzando cotas elevadas y que puede traer serias consecuencias a nuestros planes de reducción de emisiones.

Planeta 2030

El volumen de biomasa disminuye con la explotación forestal. Foto: iStock
El volumen de biomasa disminuye con la explotación forestal. Foto: iStock

En los últimos años el área boscosa europea destinada a la silvicultura ha aumentado un 49 %, a la vez que se ha elevado un 69 % su pérdida de biomasa, según los datos recogidos por Landsat. Este incremento puede alterar la capacidad de absorción de carbono en la UE y sus planes para combatir la crisis climática.

Los bosques representan aproximadamente el 38 % de la superficie de la Unión Europea y proporcionan servicios esenciales para nuestra sociedad, desde madera a aire puro. Además, al actuar como sumideros de carbono, estas masas forestales compensan aproximadamente el 10 % de las emisiones totales de gases de efecto invernadero de la UE.

Se ha producido un aumento del área forestal cultivada (49 %) y pérdida de biomasa (69 %) en Europa entre 2016 y 2018, en comparación con 2011-2015 

Sin embargo, la creciente demanda de productos foestales, impulsados ahora por la nueva bioeconomía, plantea desafíos para desarrollar una explotación forestal verdaderamente sostenible.

En este contexto, un equipo de investigadores del Joint Research Centre (JRC) de la Comisión Europea ha utilizado los datos de los satélites Landsat para analizar los cambios en la cobertura forestal de 2004 a 2018 en 26 países de la Unión Europea.

Superficie forestal mapaEuropa

Superficie forestal cultivada por año en la Unión Europea. / G. Ceccherini et al./Nature

Pérdida de biomasa forestal en Europa

Los resultados, publicados en la revista Nature, muestran un aumento tanto del área forestal cultivada (49 %) como de pérdida de biomasa (69 %) en Europa entre 2016 y 2018, en comparación con el período comprendido entre 2011 y 2015, “con grandes pérdidas en la península ibérica y en los países nórdicos y bálticos”.

Superficie forestal cultivada por año en la Unión Europea. / G. Ceccherini et al./Nature

Los datos muestran que la intensidad de la explotación forestal fue estable en la mayoría de los países europeos entre 2004 y 2015. El aumento repentino se observó durante los años 2016 a 2018, y fue particularmente marcado en países con actividades económicas relacionadas con la silvicultura, como el sector bioenergético y las industrias papeleras.

La mayor parte de la variación en el área forestal ‘cultivada’ durante ese trienio se registró en Suecia y Finlandia, que en conjunto representaron más del 50 % del aumento total observado en los 26 países. Por su parte, Polonia, España, Francia, Letonia, Portugal y Estonia representaron conjuntamente alrededor del 30 %.

Satélites para luchar contra el cambio climático

Los autores indican que los datos que facilitan los satélites de observación de la Tierra, como los europeos Sentinel del programa Copernicus, pueden ser una herramienta muy útil para apoyar el manejo sostenible de los bosques, al monitorizar su explotación en grandes áreas geográficas.

También advierten que si continúa una tasa tan alta de aprovechamiento forestal, la mitigación climática basada en los bosques que tiene prevista la UE a partir de 2020 se puede ver obstaculizada, “y las pérdidas de carbono adicionales de los bosques requerirían reducciones extra de emisiones en otros sectores, para alcanzar la neutralidad climática prevista para 2050”.