Con motivo de la celebración hoy del Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, Greenpeace y el Observatorio Ciudadano de la Sequía han advertido de la grave situación que padece España. Así, denuncian que más del 75% del territorio se encuentra en riesgo de desertificación y el 70% de las demarcaciones hidrográficas cuenta con niveles de estrés hídrico alto o severo.
Por otra parte, la empresa social Aura hacer un llamamiento para recordar el riesgo que corre nuestro país de sufrir serias consecuencias derivadas del calentamiento global, incluida la escasez de agua.
Asimismo, esta firma, que dedica el 100% de sus dividendos a proveer de acceso a agua potable a países que carecen de ella, indica que las altas temperaturas registradas durante el mes de junio confirman la evidencia del cambio climático, mientras que la Organización Meteorológica Mundial pronostica un verano más cálido de lo normal en gran parte del hemisferio norte.

En España, la AEMET ha anunciado que se esperan temperaturas de hasta 2 grados por encima de la media, con precipitaciones más escasas de lo habitual.
Las altas temperaturas registradas durante el mes de junio confirman la evidencia del cambio climático
Para los expertos, como el profesor de la Universidad Pablo de Olavide, Jesús Vargas, “resulta urgente realizar una transformación profunda de las estrategias de gestión del agua y de los modelos de ocupación del suelo, así como de los riesgos asociados a ellos, de forma que prime el principio de precaución y se impulsen políticas integradoras de adaptación y de ordenación del territorio, que superen intereses sectoriales y visiones cortoplacistas”.

“Frente a los devastadores problemas asociados a la sequía y la desertificación, tenemos que frenar el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. Para ello hay que fortalecer el medio rural y cambiar el modo en que producimos nuestros alimentos y bienes de consumo. Así podremos evitar que nuestro país se convierta en un territorio desertificado en pocos años”, ha declarado también Julio Barea, responsable de la campaña de aguas de Greenpeace.
5 Consejos para un uso responsable del agua y proteger el medio ambiente
Por su parte, la empresa social AUARA ha querido aprovechar esta efeméride para concienciar a la población de la importancia de hacer un uso responsable del agua y proteger el medio ambiente para, entre todos, frenar el cambio climático. Para ello, recuerda que hay sencillos gestos que, integrados como rutinas en nuestro día a día, pueden conseguir grandes cosas:
1 Si sirve, reutiliza, y si no sirve, recicla
Todos los desechos que se generan en casa se pueden depositar en el lugar adecuado para causar el menor daño posible al medio ambiente. Pero también es importante no deshacerse de aquello que todavía está en buen estado, aunque a ti ya no te sirva. Con un poco de creatividad, hay muchas formas de dar una segunda vida a determinados objetos.

Y también existen iniciativas de economía circular, que permiten a otras personas aprovechar aquello que otros no necesitan, evitando comprar nuevos productos y, de ese modo, reduciendo el gasto de materias primas y las emisiones de CO2 resultantes de los procesos industriales.
2 Siempre que puedas, evita el plástico de un solo uso
Todos sabemos ya lo perjudicial que es este material para los océanos y el medio ambiente, por la cantidad de años que tarda en degradarse.
En el caso de utilizar plástico, fijarse en que sea reciclado, pues de este modo se evita el uso de petróleo y se reducen las emisiones de CO2
Por eso, es recomendable utilizar bolsas de tela para hacer la compra, elegir productos a granel (esto puede llegar a reducir la huella medioambiental de una persona en un 71%) o envasados en otros materiales; y en el caso de utilizar plástico, fijarse en que sea reciclado, pues de este modo se evita el uso de petróleo y se reducen las emisiones de CO2, además de contribuir a reducir el volumen de plástico que ya existe en nuestro planeta.
3 La energía, mejor limpia y en la cantidad justa
Si tienes la posibilidad de instalar en casa algún sistema para que tu electricidad proceda de fuentes renovables, no lo dudes. Procura elegir electrodomésticos y bombillas de bajo consumo, evita dejar luces encendidas de forma innecesaria, y practica un uso controlado y razonable de los sistemas de climatización.

En tus desplazamientos, apuesta por el transporte público y vehículos eléctricos siempre que puedas, y recuerda que andar en bici es sano, no contamina, te ayuda a estar en forma y además, está de moda.
4 Plantas y árboles, cuantos más mejor
Si tienes jardín o terraza puedes contribuir a regenerar la atmósfera y a compensar tu huella de carbono plantando en ellos flores y plantas, a ser posible adaptadas al clima de la zona para que no necesiten agua adicional en exceso. Las plantas producen oxígeno, absorben CO2 y favorecen la biodiversidad. Si te animas a probar con un huerto urbano, podrás consumir hortalizas más saludables que no necesitarán envases ni generarán emisiones con su transporte.
Puedes colaborar con iniciativas que plantan árboles para reforestar determinadas áreas dañadas del planeta

Además, puedes colaborar con varias iniciativas que plantan árboles para reforestar determinadas áreas dañadas del planeta o para regenerar el medio ambiente en zonas con mayor nivel de contaminación.
5 El agua, como si fuera un tesoro
Si la tenemos, es para disfrutarla, pero con consciencia y sin malgastarla. Por cada minuto que pasas en la ducha gastas unos 20 litros de agua, otros 10 litros desaparecen cada vez que tiras de la cadena, la lavadora se lleva entre 60 y 100 litros… Por eso es importante cerrar el grifo mientras te enjabonas o te lavas los dientes, o no poner la lavadora ni el lavavajillas si no están llenos.Pero también puedes aprovechar el agua que dejas correr hasta que se calienta para fregar el suelo, regar las plantas o para el retrete, lo mismo que cuando termina el verano y vacías la piscina portátil. Y por supuesto, si tienes piscina fija, conserva y trata el agua de un año para otro.