El Jetta GLI es uno de los sedanes más deseados del mercado mexicano… ¿mantendrá todavía su magia a ojos entusiastas de la casa VW?
Por Gilberto Samperio Fotos: Carlos Quevedo
Jetta GLI VIII
Un tanto tardía la aparición de tinte velocista del anhelado
VW Jetta, que recibe el apelativo extra de
GLI para sonar como su hermano de dos volúmenes más famoso –
GTI–, pero con una carrocería mucho más práctica a ojos de automovilistas nacionales.

Volkswagen Jetta GLI
Ello no obsta para reconocer casi de manera instantánea su básica apariencia cromática. Los “vestidos” a elegir serán colores primarios –rojo, negro, blanco y, como excepción, gris–, para dar esa sensación deportiva que muchos amantes de la conducción esperan de sus coches personales… o personalizados cuando el presupuesto lo permite.
Pequeños detalles
A la ancha, nervada y afilada figura del conocido Jetta se suma una parrilla diseñada ex profeso con una sólida línea roja al centro, que en este caso hace juego con los rines vía un filo muy discreto de igual tono.
Le siguen los anagramas conmemorativos –¡ya son
treinta y cinco años del primer GLI!– que exhiben bordes cromados para crear un acertado contraste.

Volkswagen Jetta GLI
El resto de la vestimenta va aderezado de acentos negros en puntos clave como el borde superior de la parrilla, detalles de la fascia, el armonizado oscuro del techo solar junto al complemento del toldo, así como los faldones laterales y trasero o el minialerón justo al borde de la tapa de la cajuela; todo busca marcar una diferencia visual de manera sutil, sin caer en aspavientos o exageraciones cosméticas.
Espacioso
La misma estrategia aplica para el interior. Gracias a su amplia cabina, abunda el espacio para cinco pasajeros, que gozarán de los pocos detalles en rojo, sustanciosos si miramos su aplicación: costuras rojas en volante y asientos de corte deportivo. Claro, la iluminación ambiental también concede esa atmosfera cálida vía luz carmín.

Volkswagen Jetta GLI
Un punto flaco del habitáculo son algunos de los paneles plásticos que rodean a los usuarios, pues se perciben un escalón debajo de lo que hemos visto en otros Jetta. Punto de mejora.
Novedades tecnológicas
Y debajo de la cúpula figura el más reciente despliegue
digital de la casa –herencia del Audi Cockpit–, que nos ahorra los relojes analógicos y concede tres visionados, al gusto del usuario: simulación de las esferas gráficas; simplificado dejando visibles solo la relación y velocidad; y el tercero, los resultados de la computadora de viaje.
Acompañan vivos rojos a los indicadores cuando se elige el modo más anhelado –Sport– del tren motor, aunque en el modo Individual pueden permanecer. En contraste, los modos Normal y Eco ilustran en discretos azules y blancos, acorde a la filosofía ahorrativa Think Blue de la casa.

Volkswagen Jetta GLI
Como en todo sedán de última hornada que se precie de lujo, el tablero del Jetta lo corona una táctil que no únicamente gestiona al sistema de infotenimiento y generales del auto. Incluye monitores que nos dejan conocer: potencia –en kW–; temperatura de agua; acelerómetro; presión del soplado del turbocargador; y temperatura del aceite. Y un cronómetro en otro despliegue. Perfecto para adoradores del rendimiento de corte deportivo.
En lo dinámico
Para su desplazamiento, este nuevo GLI recurre al dos litros turbocargado alistado para erogar
230 HP (el mismo del GTI), diligentemente administrados por una caja robotizada DSG de seis relaciones.
Un tren motor que gracias a los modos disponibles y un diferencial de avanzada –XDS con bloqueo electrónico–, ejecuta de manera impecable las órdenes dictadas desde el volante achatado (aglutina los mandos de velocidad crucero a izquierda y de las imágenes de la pantallita central, a derecha).

Volkswagen Jetta GLI
El motor presume muy buen empuje desde las 2,000 rpm pero su momento álgido ocurre al rebasar los 3,500 giros; a partir de este punto la respuesta tiende a fuerte, un tanto bronca. Curiosamente, el sonido del escape también acompaña estos exabruptos.
Lo mejor es que
esta energía prevalece casi hasta las 6,500 vueltas, justo cuando la caja cambia por protección. Por cierto, la transmisión conserva la palanca con dos posiciones pulsantes –Drive y Sport– y la casilla lateral para la elección Manual; ésta también se complementa desde las manetas tras el volante.
Ayuda mucho la dirección cuya progresividad variable facilita las cosas tanto en tramos callejeros, donde la premisa sea la rapidez de movimientos, como en vías rápidas, cuando la fidelidad resulta más que necesaria, obligatoria.
Ágil
Durante nuestra valoración en zona montañosa, este GLI presume muy buena actitud en las curvas -ojo:
suspensión trasera indepediente-, pues el subviraje solo surge al límite, un tanto por la masa, otro por los neumáticos, que pese a su buena calidad –Hankook Ventus–, sufren para mantenerse pegados por la respuesta contundente del turbocargado.
De hecho, el control de tracción trabaja constantemente en estas condiciones pero apenas surge una finísima afectación al volante; casi no hay torque-steer. Excelente.
Así, la conducción en este tipo de trazados es divertido, de buena precisión y hasta la marcha resulta bien filtrada, a pesar de que el calibrado de los amortiguadores apunta a duro. Muy bien VW.
Sin embargo, donde puede extraerse el mayor potencial de este sedán es en las autopistas de asfalto bien cimentado; ahí el GLI se siente como pez en el agua pues las velocidades de tres cifras son fáciles de alcanzar y mantener. Gracias a la suspensión poco menos que dura, la marcha se vuelve deliciosa, casi perfecta para rodar por muchos kilómetros, aunque en tramos maltratados puede tornarse áspera. Y el comportamiento en curva larga tiende a ser casi perfecto, si acaso requerirá un discreto juego de muñecas para corregir.
Los frenos son muy competentes –pinzas en rojo–, pero no toleran tan bien el castigo continuo; hay que ser prudentes en nuestra carretera favorita.

Volkswagen Jetta GLI
El balance
Con un precio por arriba de los 500 mil pesos, este nuevo GLI resulta un coche muy divertido y hasta muy satisfactorio a ojos de fieles seguidores de la firma alemana.
Sin embargo, su dinamismo en lo general es muy bueno pero no sorprende, y hay elementos de equipamiento donde cojea un poco como la caja de seis relaciones –en el mercado del vecino del norte ocupan la DSG de siete escalones– o algunos paneles internos.
Pero el aura de la casa y una posible buena relación valor/precio pueden colocarlo como la opción favorita de aquellos que todavía sueñan con un sedán teutón de corte velocista y bien equipado.
UNIDAD PROBADA
$515,065 pesos, a fecha de la publicación
DATOS OFICIALES
MOTOR
Situación: Delantero transversal
No. de cilindros: Cuatro en línea
Bloque/cabeza: Fundición/aluminio
Distribución: DOHC, 16 válvulas, VVT
Alimentación: Inyección directa c/turbocargador
Cilindrada: 1,984 cc / 2.0 l
Diámetro x carrera: 82.5 x 92.8 mm
Compresión: 9.6:1
Combustible: Gasolina, 92 oct
Potencia máx.: 230 HP entre 4,700 y 6,200 rpm
Par máximo: 350 Nm (258 lb-pie) entre 1,500 y 4,000 rpm
TRANSMISIÓN
Caja: Manual robotizada, 6 vels.
Tracción: Delantera
Embrague: Bidisco en seco
BASTIDOR
Susp. del.: MacPherson
Susp. tras.: Multibrazo, 3 elem.
Elem. elástico: Resortes helicoidales
Estabilizadora del/tras.: Sí/Sí
Frenos del.: Discos vents., 312 mm
Frenos tras.: Discos sólidos, 272 mm
Dirección: Eléctrica
Giros volante: 2.1
Diámetro de giro: 11.5 m
RENDIMIENTOS
Vel. máxima: 240 km/h (estimado)
Acel. 0-100 km/h: N.D.
Consumo medio: 17.2 km/l
Emisiones de CO2: 137 gr/km
CARROCERÍA
Tipo: Sedán, 4 puertas
Construcción: Monocasco de acero
No. de plazas: 5
Peso oficial/báscula: 1,480 / 1,480 kg
Depósito de combustible: 50 litros
Cajuela: 510 litros
Largo/Ancho/Alto: 470/179/147 cm
Distancia entre ejes: 268 cm
Distancia entre vías: 153-151 cm
Espacio máx/min x fila: 115-95/89-69 cm
Espacio piernas por fila: 105/76 cm
Espacio cabeza por fila: 89-97/91 cm
Espacio entre codos: 150/145 cm
Altura piso boca cajuela: 72 cm
Anchura boca cajuela: 106 cm
NUESTRAS MEDICIONES
ACELERACIÓN
0 a 100 km/h: 7.2 s
0 a 400 m: 15.26 s
80 a 120 km/h: 4.43 s
FRENADO
100 a 0 km/h: 37.9 m
Consumo medio: 9.8 km/l