Termina la producción del Koenigsegg Agera RS

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Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen).

 

Fue en 2011 que la firma de Ängelholm producía el primer ejemplar del vehículo con el que demostraba que había alcanzado la plena madurez en menos de dos décadas, el Agera, continuando con la siguiente fase tras sus productos identificados con las siglas CC.

 

 

En 2015, presentaba un derivado que, de paso, se convertía en el modelo capaz de rodar en calle más radical que habían fabricado hasta entonces, el Agera RS. Utilizaba el mismo bloque de ocho cilindros en V de 5.0 litros (aunque con un ligero incremento de 23 cc), con un ajuste inicial de 1,176 caballos, que tras una revisión profunda llegaron nada menos que a 1,360 corceles.

 

El par motor no era menos con 1,280 Nm (949 lb-pie), que luego pasaron a 1,370 Nm (1,000 lb-pie), con una línea roja que llegaba a las 8,250 rpm y un peso de 1,395 kg, con lo que declaraba un 0 a 100 km/h en 2.9 segundos.

 

 

No son los únicos números impresionantes del Agera RS: el 1 de octubre de 2017 marcó un nuevo registro en la prueba de 0 a 400 a 0 km/h con 36.44 segundos, pulverizando el récord establecido por el Bugatti Chiron unas semanas antes, que detuvo el reloj en 41.6 segundos.

 

Sólo un mes después, el 4 de noviembre, el Koenigsegg alcanzaba el récord de velocidad absoluto para un auto de producción, con una velocidad promedio de 447.2 km/h, ya que para validar el récord deben hacerse dos carreras, una en sentido contrario. El récord anterior era del Bugatti Veyron, con 431.07 km/h, mientras que el Hennessey Venom GT hizo una marca no validada de 435.21 km/h.

 

 

Sólo 25 afortunados recibieron un ejemplar de este auténtico asesino, aunque en realidad se construyeron 26, uno más de los proyectados, para reponer una unidad destrozada durante la fase de pruebas. La empresa ahora se enfocará en su no menos impresionante Regera de 1,500 caballos de fuerza, aunque advierten que están preparando algo espectacular para el Salón de Ginebra 2019, estaremos muy atentos.