Renault Logan Dynamique 2015: prueba de manejo

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Por Manuel Fernández Fotos: Claudia Rivera Edición para online: Manuel Fernández

 

El precursor directo en México es el Nissan Aprio, un Logan de primerísima generación rebautizado con el emblema de la casa japonesa. Las evoluciones, versiones equipadas y notorias mejoras recibidas con el tiempo, por tener una referencia, son apreciables en los Sandero y Stepway (el Logan hatch) que aún arriban de la planta de Envigado en Colombia.

 

Brecha eliminada

Con todo y las optimizaciones aplicadas, este sedán subcompacto seguía viéndose un tanto más simple que sus rivales directos en su habitáculo.

 

Ahora, si bien se conserva ese halo de simpleza, no hay una línea que divida al Logan de, por ejemplo, un Nissan Versa. Y la desventaja ante alternativas posicionadas un poco arriba como un Sonic o un Vento no las consideramos tan determinantes.

 

Podemos partir de una postura de manejo modernizada, ahora con ajuste en altura del volante (no en profundidad), con la regulación equivalente de la banca ya no en unos puntos fijos tan evidentes y más opciones. Aún así, se va sentado siempre alto y los pedales tan poco profundos condicionan a las piernas. Los retrovisores son aún más grandes que en el facelift de los pasados Logan/Sandero.

 

En cuanto despliegue de materiales y ajustes no se puede esperar algún plástico blando y, siguiendo la tendencia de su perfil y precio, resuelve con remates duros y bien ejecutados por texturas y uno que otro detalle sorpresivo, evoluciones ergonómicas en la ubicación de los mandos de los vidrios o unos instrumentos de este siglo, ya con las flechas indicadoras de los intermitentes separadas.

 

Clave el espacio interior y no salimos decepcionados: aún es enorme.

 

 

Paseo relajado

 

La vocación familiar del Logan no solo está bien conseguida adentro sino en su conducción. Claro: hablamos de un auto que se pensó para vías más tranquilas que las mexicanas.

 

Así, no hay que pedir una estabilidad lineal impecable con la presencia de muchos vientos laterales (si bien la sensibilidad tampoco es dramática) y más vale ser responsable y sensato. A 120 km/h está en su punto ideal, con una marcha suave y excelente por filtración y, de herencia de antes, un aguante grato en ciudad ante irregularidades y hoyos. Tanto aislamiento se refleja en un balanceo y cabeceo evidente incluso sin exigirse demasiado.

 

La dirección es solo uno de los componentes que nos familiarizan de inmediato con el carro reemplazado. Es de asistencia fija y tirando a dura en parado, cumplidora en carretera.

 

Su 1.6 16v, viejo conocido, está enfocado hacia la economía y cumple por elasticidad en la urbe al responder con aceptable soltura poco antes de las 2,500 rpm. De ahí al suave corte de inyección a 6,250 no hay nada intenso, pero se eliminó el ahogo en altos regímenes propio del pasado impulsor de ocho válvulas.

 

Un asunto importante es adaptarse a los pedales, con un embrague que corta muy bajo para los conocido en Renault y un acelerador electrónico con un retraso evidente. Abordando la transmisión, el selector es muy del fabricante galo con recorridos largos y esponjosos, aunque claros y precisos en últimas. Las relaciones entre cada marcha tienen las caídas de revoluciones normales.

 

Quedan por comentar los frenos, con un pedal que no perdió nada de firmeza ni mermó su buen tacto durante las evaluaciones, unas distancias convencionales y unas excelentes llantas de fábrica.

 

 

Merecedor

 

Con los precios anunciados, el Logan anula en cualquier aspecto al Chevrolet Aveo, se mete en el territorio de los Sonic básicos (sin equipamiento de seguridad), le planta la cara a su primo el Nissan Versa, se acerca muchísimo al Peugeot 301 y pone en aprietos a los Volkswagen Gol sedán o a los Vento de acceso. Muy bien.

 

NOS GUSTA

Marcha robusta

Cabina gigante

Evolución de acabados y equipamiento

 

NOS GUSTARÍA

Control de estabilidad

Acelerador sin retrasos

Quinto cinturón de tres puntos

 

Resumen técnico

 

MOTOR

Tipo/cilindrada: L4, 1.6 l

Potencia máxima: 100 hp a 5,750 rpm

Par máximo: 145 Nm a 3,750 rpm

TRANSMISIÓN

Caja: Manual, cinco velocidades

Tracción: Delantera

DIMENSIONES

Largo x ancho x alto: 434 x 173 x 151 cm

Distancia entre ejes: 263 cm

Cajuela: 510 litros

Tanque de combustible: 50 litros

Peso vacío: 1,054 kg

PRUEBAS AUTOMÓVIL (a 2,240 msnm)

0 a 400 metros: 19.74 s

Rebase 80 a 120 km/h: 20.20 s

Frenado de 100 a 0 km/h: 42.78 m