McLaren se apoyará en BMW para sus motores

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Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen).

 

McLaren prácticamente ha concretado el plan de relanzamiento de su división de autos de calle. Mientras que la Serie Ultimate (P1) espera reemplazo, la Serie Super (12C, 625C,650S y 675LT) está prácticamente agotada y la Serie Sport (540C y 570S) está a pleno, cumpliendo adecuadamente su papel de rentabilizar a la firma.

 

Por tanto, es momento de ver hacia el siguiente paso y quizá más allá. Es por ello que, sin terminar relación con su actual proveedor de motores, Ricardo, McLaren anuncia un nuevo acuerdo de colaboración para el desarrollo de plantas motrices, esta vez con BMW.

 

También colaborarán estrechamente con Grainger y Worrall, firmas especializadas en metales y aleaciones que también trabaja con Aston Martin, así como Lentus Composites, especialista en materiales ligeros y la Universidad de Bath, que aportará su capacidad de investigación en sistemas de combustión interna.

 

McLaren promete que todo esto derivará en una nueva tecnología de combustión interna que, al tiempo que reducirá las emisiones, producirá más potencia y par. No hay muchos detalles, más al respecto. Los últimos avances presentados en materia de eficiencia corresponden a Infiniti, con su sistema de compresión variable; y Mazda, con la ignición por compresión de carga homogénea que prescinde de bujías.

 

McLaren pretende lanzar 15 nuevos modelos y derivados en el siguiente lustro, bajo el proyecto denominado Track22, por el año 2022. A decir de la marca, algunos de estos ejemplares recuperarán la hibridación, tal como el McLaren P1 y podremos esperar al menos un modelo eléctrico. Si bien falta mucho para ver cómo se irán concretando los planes de los británicos, el primer objetivo se logrará en el Salón de Ginebra, donde conoceremos al sucesor del 650S, estaremos atentos al resto de los avances.

 

¿Llegará algo de esta colaboración a la máxima categoría?