La versión All Terrain de la GMC Acadia es una propuesta inusual en un mercado saturado de crossovers que a duras penas pueden salir del pavimento.
Por Edmundo Cano Texto: Redacción AP Fotos: Carlos Quevedo
De entrada, un poco de contexto por aquello de que no habíamos tenido a prueba a la vigente
Acadia en su segunda generación. Este SUV era antes casi un gemelo de las
Chevrolet Traverse y
Buick Enclave (y muchos años atrás también con la Outlook de la difunta Saturn) pero que ahora,
así comparta arquitectura con las mencionadas, tomó su propio camino no solo en lo visual sino en sus dimensiones, pues mientras las Traverse y Enclave pasan de largo los cinco metros de longitud, la Acadia se queda en los 4.9 m. Lo mismo sucede con la distancia entre ejes, de 285 cm en la GMC contra los más de tres metros en las Chevrolet y Buick. La Acadia también es más angosta y más baja, termina siendo una alternativa que, así mantenga tres filas de asientos utilizables, es por obvias razones más maniobrable y útil en el entorno urbano.
La clave en esta variante All Terrain está en,
como su nombre lo indica, su mayor preparación para incursiones en terrenos más hostiles, lo que empieza con unas llantas de especificación M+S de perfil inusualmente alto para estándares actuales, vía unos rines de apenas 17 pulgadas y una puesta a punto del sistema de tracción integral que se asegura de un mejor avance en superficies con muy poca adherencia a través del ajuste del embrague que conecta ambos ejes y del control de tracción, si bien por mucho se pueden conectar las cuatro ruedas de manera permanente, ya sea para carretera o para salir de ella, en esta última función siempre que se vaya por debajo de 80 km/h. No hay reductora.
La suspensión, con amortiguadores de dureza variable, mantiene un esquema tradicional de automóvil (al final es una estructura monocasco) y no recurre a un eje rígido adelante o atrás, así que a pesar del enfoque para escapar del asfalto, no hablamos de un vehículo todoterreno en el sentido más amplio del término.
Toque antiguo
De todas maneras,
la Acadia nos recordó por sus modales a SUVs de los años noventa que en nombre de sus mayores capacidades para circular en sitios más complicados, no eran
ningún prodigio de estabilidad en vías asfaltadas, lo que con el tiempo fue cambiando pero que en esta GMC no es así, pues pareciera que las prioridades en su planteamiento dinámico fueran otras incluso haciendo el paralelo contra la última Acadia que manejamos, una Denali también de cuatro ruedas motrices pero sin el acabado All Terrain.
Lo decimos porque así una marcha un poco más firme que en las Traverse/Enclave (sumado a la menor distancia entre ejes) anticipe un vehículo más ágil, en primer lugar
la dirección aislada, blanda y poco precisa nos hace recordar que estamos ante un crossover familiar sin ninguna intención de circular más allá del límite legal. Lo segundo es que la suspensión nos mostró ciertas reacciones que ya es difícil encontrar en SUVs comparables que tan bien han aprendido a dominar el pavimento, pues por ejemplo, al pisar una irregularidad en la mitad de una curva así no se vaya a mucha velocidad, responde con un balanceo inesperadamente alto y una tendencia a cerrar la trayectoria a ratos algo desconcertante. En autopista esa falta de aplomo se manifiesta si el camino nos arroja un hoyo (y no hablamos de uno grande) y pide un poco más de concentración. Ídem en
una frenada fuerte que podría descolocar la trasera si nos excedemos demasiado.
Un manejo así nos hace tomar las mismas prevenciones que tendríamos en
vehículos más guerreros en su concepción, como un Jeep Wrangler o una pick-up mediana, solo que vamos asentados sobre una plataforma moderna de la que no se espera ese tipo de comportamientos.
Compensa que
en terracería pisa con mucha robustez y confianza aun cuando se aumenta el ritmo sobre constantes desniveles o brincos, virtud que, aunada a su menor tamaño, la hace capaz de incursionar en escenarios a los que sus hermanas de Chevrolet y Buick (además de diversas competidoras) no podrían afrontar.
Otra variación reside en que
el V6 de inyección directa entrega un poco más de potencia y torque, lo que tal vez trata de contrarrestar que la caja automática no es de nueve escalones como en las muy citadas Traverse/Enclave, sino una unidad de seis cumplidora y suficiente para la pareja y holgada respuesta disponible, pues realiza los cambios requeridos sin tantos retrasos y en su modalidad manual, que en realidad es de bloqueo hasta la velocidad seleccionada, saca adelante su labor de requerirse una retención. En todo caso,
los números de aceleración y recuperación fueron peores a una Traverse, pero las paradas de emergencia, a pesar de las llantas todoterreno de compuesto duro, ofrecieron distancias consistentes. Aunque los cuatro discos quedaron humeando tras nuestros exámenes, el tacto al pedal no perdió la firmeza.
La usual funcionalidad
No sobra comentar diversos aspectos de la cabina cuando al final este es un SUV de corte familiar.
Lo mejor es un espacio para los ocupantes muy bien aprovechado si pensamos en que hablamos de un tamaño menor al de sus hermanas de plataforma. Para las piernas no hay una desventaja evidente según nuestras mediciones y los centímetros habitables que se pierden son a lo ancho y un poco a lo alto. Se da el fenómeno usual de que para que viajen cómodos en la tercera hilera dos adultos, conviene desplazar los asientos de la mitad hacia adelante (y poner algo más rectos sus respaldos reclinables), aunque no al punto de incomodar a quienes se sienten ahí.
Estando GMC medio escalón arriba de Chevrolet por posicionamiento,
nos cruzamos con un nivel de acabados mejor a la Traverse en el sentido que el tablero viene cubierto junto a las puertas por un plástico mullido y una imitación de costura, que se complementa muy bien por unos asientos con unas vestiduras de mejor calidad aunque muy convencionales en lo anatómico, con una banca algo corta y un apoyo lumbar sencillo, del que solo entra y sale y no sube y baja. Lo que aleja a la Acadia de productos de similares dimensiones en otras marcas, como una Sorento, una Highlander o una CX-9, son molduras imitación madera o de metal muy económicas en su aspecto. En ese rubro está más cerca de una Ford Explorer.
Saca la cara su faceta práctica con
la presencia de un Hot Spot 4G LTE para conectar dispositivos móviles, un gran argumento a favor del sistema de información y entretenimiento Intellilink del que, dicho sea el paso, no tenemos reproche por su intuitivo manejo, en lo que han avanzado más que Ford con su SYNC a nuestro modo de ver.
Oferta inusual
Sin renunciar a una cabina versátil para una familia,
la Acadia All Terrain luce bien preparada para aquellos que con más frecuencia vayan a circular por vías en mal estado o de difícil acceso, pero sin llegar a lo extremo. Pareciera el mismo concepto de una
Mitsubishi Montero Sport pero sobre una plataforma tecnológica más moderna y con un enfoque no tan radical. Sin embargo, para quienes piensen usar su crossover en su mayoría en autopista y vías asfaltadas, recomendamos una Acadia Denali o un rival similar que no implique un sacrificio tan evidente en estabilidad.
Datos Oficiales
Precio
$827,200 pesos
MOTOR
Situación: |
Delantero transversal |
No. de cilindros: |
Seis en V |
Bloque/cabeza: |
Aluminio/aluminio |
Distribución: |
DOHC, 24 válvulas, VVT |
Alimentación: |
Inyección directa |
Cilindrada: |
3,649 cc / 3.6 l |
Diámetro x carrera: |
95.0 x 85.8 mm |
Compresión: |
11.5:1 |
Combustible: |
Gasolina, 87 oct. |
Potencia máx. |
310 HP a 6,600 rpm |
Par máximo |
373 Nm (271 lb-pie)
a 5,000 rpm |
TRANSMISIÓN
Caja: |
Automática, 6 vels. |
Tracción. |
Integral emergente |
Embrague: |
Convertidor de par |
BASTIDOR
Suspensión delantera: |
MacPherson |
Suspensión trasera: |
Multibrazo, 5 elem. |
Elemento elástico: |
Resortes helicoidales |
Estabilizadora del / tras. |
Sí/Sí |
Frenos delanteros: |
Discos ventilados, 321 mm |
Frenos traseros: |
Discos ventilados, 315 mm |
Dirección: |
Eléctrica, variable |
Giros del volante: |
2.9 |
Diámetro de giro: |
11.8 m |
RENDIMIENTOS
Velocidad máxima: |
N.D. |
Aceleración 0-100 km/h |
N.D. |
Consumo medio: |
8.50 km/l |
Emisiones de CO2: |
276 gr/km |
CARRROCERIA
Peso/báscula: |
1,795 / 1,695 kg |
Largo/Ancho/Alto: |
491/191/17 7 cm |
Dist. entre ejes/vías: |
285/163 cm |
Cajuela: |
2,237/1,181/362 litros |
Nuestras mediciones
Potencia: |
298.0 hp a 6,300 rpm |
Par: |
347 Nm (255 lb-pie)
a 3,350 rpm |
Relación peso/potencia: |
5.69 kg/HP |
Potencia específica: |
82.77 HP/l |
0-100 km/h |
10.00 s |
100-0 km/h: |
41.12 m |
Consumo medio: |
7.6 km/l |
Costo de neumáticos: |
24,860 pesos |
Gasto anual de combustible: |
52,605 pesos |
Servicios 60 mil km |
11,439 pesos |