Chevrolet Tahoe Midnight Z71 4X4 2018: prueba de manejo

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Por Gilberto Samperio (@gilsamperio)                     Fotos: Carlos Quevedo

 

A veces, los fabricantes de gran volumen se arriesgan con series únicas que buscan demostrar que son capaces de crear productos versátiles, que normalmente serían retocados o reconstruidos por un especialista.

 

 

Es el caso de esta edición especial llamada Tahoe Midnight. Aprovecha la base deportiva de esa camioneta —Z71—, pero su preparación y equipamiento están enfocados para lograr una imagen siniestra, ruda. Vamos, el SUV de tamaño completo que un villano bien entrenado tendría a su disposición.

 

 

Como corresponde al epíteto de medianoche, bajo el anglicismo MidNight, esta Tahoe presume terminados en negro y sus distintas tonalidades, tanto al exterior como al interior. Eso incluye rines y embellecedores que normalmente serían cromados. Lo dicho, un trabajo que solo un cliente caprichoso ordenaría a un taller privado.

 

 

Con respecto al interior, el volumen y espacio sobran, y existe una amplia configuración de asientos (2+2+3), todo acompañado por un completo equipamiento en casi cualquier rubro: aire acondicionado de tres zonas, puntos de energía en la cabina completa, toda la seguridad activa y pasiva de la casa, y la efectiva interconexión de señal celular de alta calidad, denominada 4G LTE, cortesía de su filial tecnológica OnStar.

 

 

Su corazón es un V8 de 5.3 litros y 335 HP, cuya energía es administrada por una transmisión automática de seis escalones, repartida a las cuatro ruedas. Esta circunstancia mecánica confirma la instalación de neumáticos de uso mixto, con grandes tacos en su rodado y ejes de servicio pesado, así como los puntos de arrastre y remolque tan conocidos por los fanáticos del todoterreno.

 

 

En consecuencia, su dinamismo no es el mejor sobre vías rápidas o de rumbo cambiante. Su considerable masa —más de 2.5 toneladas— y el TreadWear de sus neumáticos —500—, así como un mayor centro de gravedad —por el chasís 4X4—, suman para que aflore el típico balanceo en la transición de curvas o un evidente cabeceo en frenadas intensas.

 

 

Por lo que se refiere al todoterreno, también hay que ser honestos: por su gran ancho y sus largos estribos, las cotas 4X4 no son las mejores para incursiones aventureras de alto nivel; solamente para escapadas de mediana intensidad al campo, o en pistas en malas condiciones, pero nada que despierte el espíritu de un verdadero amante del off-road.

 

 

Por lo tanto, su mejor escenario son las vías rápidas, buenas o malas, en el asfalto. Ahí sí se aprecia toda la fortaleza de este SUV de tamaño completo. Ni baches ni topes existen y su amenazadora estampa obliga, inconscientemente, a otros automovilistas a cederle el paso. Esto la convierte en una camioneta mala, ruda, con la que no conviene discutir o interponerse, a riesgo de ser arrollado por semejante monstruo.

 

 

Por una etiqueta de poco más de un millón de pesos, este SUV puede ser suyo. Ideal para quien prefiere al villano tosco, rudo y amenazante, y no al héroe buena onda, inherente a cualquier saga de talante épica. 

 

 

Unidad probada

1,070,800 pesos (a fecha de la publicación)

 

NOS GUSTA

-      Imagen ruda

-      Nivel de equipamiento

-      Espacio interior

 

NOS GUSTARÍA

-      Un V8 más potente

-      Mejor tacto de frenos

-      Dirección más rápida

 

Resumen técnico

MOTOR

Tipo/cilindrada: V8, 5,328 cc

Potencia máxima: 355 HP a 5,600 rpm

Par máximo: 519 Nm a 4,100 rpm

TRANSMISIÓN

Caja: Automática, seis velocidades

Tracción: Trasera con eje delantero conectable

DIMENSIONES

Peso vacío: 2,554 kg

Largo x ancho x alto: 518 x 204 x 189 cm

Distancia entre ejes: 294 cm

Cajuela: 433 litros

PRUEBAS AUTOMÓVIL (a 2,240 msnm)

0 a 400 metros: 17.54 s

Rebase 80 a 120 km/h: 7.56 s

Frenado de 100 a 0 km/h: 44.9 m

Consumo medio: 8.3 km/l