Las cifras de ventas de vehículos nuevos en España registradas de enero a marzo reflejan una caída del 11,6 por ciento respecto al mismo periodo de 2021, según los datos oficiales recopilados por las asociaciones de fabricantes Anfac, de concesionarios Faconauto y de vendedores Ganvam.
Dentro de la lista de modelos más vendidos en nuestro país, uno de los top ventas lo ocupa el SUV VW T-Roc, en el puesto cuarto de la clasificación global con un total de 4.001 unidades matriculadas. Pues bien, dentro de los diferentes modelos de VW y según los datos de matriculaciones registrados durante el primer trimestre de este año, al T-Roc le sigue otro SUV de menor tamaño pero no por ello menos interesante, el T-Cross.

El VW T-Cross es un automóvil que se incluye dentro del segmento de los SUV pequeños o urbanos. Durante estos primeros tres meses, tal es el tirón que está teniendo este modelo que ya ha vendido más unidades que otros dos modelos superventas de la firma alemana, tales como el Polo o el Golf. De forma específica, de enero a marzo se han vendido en nuestro país 1.852 unidades del T-Cross, frente a las 1.512 unidades del Polo y las 1.173 unidades del Golf.
VW T-CROSS: LAS CLAVES Y BAZAS DEL SUV URBANO
Las dimensiones exteriores del VW T-Cross son las propias de un vehículo SUV pequeño o urbano, con 4,11 m de longitud, 1,78 m de ancho y 1,56 m de alto. De acuerdo a las pruebas que hemos realizado, entre sus rivales el modelo de la firma alemana es uno de los automóviles que mejor espacio interior ofrece para los ocupantes. Dentro del habitáculo, llama la atención su banqueta trasera, que se puede adelantar hasta 14 cm para tener más volumen de carga en el maletero, el cual puede oscilar entre los 385 y los 1.281 litros.
La gama mecánica actual del pequeño SUV de la firma germana la forman tres versiones de gasolina, en este caso los motores 1.0 TSI en niveles de potencia de 95 y 110 CV y, en el escalón más alto, el 1.5 TSI de 150 CV. Todos estos propulsores son turboalimentados e incluyen de serie el sistema stopt&start y un filtro de partículas. Todas las variantes son de tracción delantera y el tipo de cambio puede ser manual o automático de doble embrague DSG (según versiones).

La oferta comercial de este vehículo en nuestro país se articula en dos niveles de equipamiento: Advance y Sport. Existen diversos packs que añaden más equipamiento o incluyen elementos estéticos adicionales, como por ejemplo el R-Line, asociado al nivel Sport. Este pack R-Line acentúa el lado más deportivo en el diseño exterior del vehículo.
Entre los diferentes elementos que se incluyen de serie en toda la gama de este SUV urbano destacan el programador de velocidad, el asistente de mantenimiento de carril, el sistema de frenado automático de emergencia, climatizador de dos zonas y el sistema multimedia Composition Media, dotado con pantalla de 8 pulgadas de tamaño y compatible con las tecnologías de conectividad Bluetooth, Android Auto y CarPlay.
Dentro del nivel de equipamiento Advance, destaca de serie el volante de cuero, los sensores de ayuda al aparcamiento, el respaldo del acompañante delantero abatible y llantas de 16 pulgadas. En el caso de la versión Sport, son distintivos los faros con tecnología, los asientos confort/deportivos, los retrovisores plegables eléctricamente, la cámara de visión trasera y unas llantas de 17 pulgadas de diámetro.

La instrumentación tras el volante puede ser de tipo convencional mediante indicadores circulares con agujas (en la versión Advance) o bien mediante una pantalla digital (de serie en la variatne Sport).
Por último, hay que recordar que el T-Cross se fabrica en la planta española que tiene VW en Navarra, el mismo lugar donde también se ensambla el Polo.