Land Rover continúa inmersa en la renovación de sus modelos de tipo SUV. Si en pasadas semanas te informábamos de la nueva generación del Range Rover Evoque y de la gama actualizada del Discovery, ahora el que toma el protagonismo es el Range Rover Sport, cuya gama 2019 presenta los siguientes cambios.
A nivel mecánico, la principal novedad del Range Rover Sport 2019 la encontramos en la incorporación del motor biturbo Diesel 3.0 SDV6 de 249 CV, que reemplaza en Europa al anterior propulsor 2.0 SD4 de cuatro cilindros en línea. El nuevo propulsor ya está adaptado para cumplir los nuevos requisitos anticontaminantes, además de ser 9 CV más potente y ofrecer 100 Nm más de par motor que la mecánica a la que sustituye. En cuanto a datos de prestaciones, la firma británica anuncia para este motor 3.0 SDV6 una aceleración de 0 a 100 km/h en 7,9 segundos (0,8 segundos más rápido que el 2.0 SD4).
En la gama de este SUV deportivo de lujo, especialmente interesante es la versión híbrida enchufable P400e (PHEV), lanzada en 2018 y con una autonomía en modo puramente eléctrico de unos 50 km. En esta variante del Range Rover toma protagonismo un motor de gasolina de 2,0 litros de 300 CV y un motor eléctrico de 116 CV. La potencia total del conjunto híbrido es de 404 caballos.
Respecto al resto de la gama mecánica del Range Rover Sport 2019, la firma británica no indica ningún dato más y es de esperar que se mantengan las alternativas propulsoras ya conocidas. De esta forma, en su oferta comercial también se podrán elegir las versiones de gasolina 2.0 si4 de 300 CV, V6 S/C de 340 CV, 5.0 V8 S/C de 525 CV y 5.0 V8 S/C SVR de 575 CV; por su parte, en Diesel las alternativas disponibles son un 3.0 TDV6 de 258 CV, un 3.0 SDV6 de 306 CV y un 4.4 V8 SDV8 de 340 CV.
Ranger Rover Sport 2019: aún más seguro
En la amplia oferta de elementos de seguridad y de asistentes a la conducción del Range Rover Sport 2019 se incluye un optimizado y mejorado control de crucero adaptativo con ajuste constante de la velocidad y con función Stop and Go. Este sistema permite que el vehículo mantenga una distancia establecida respecto al automóvil que circula por delante y que lo siga hasta detenerse y separarse, si está parado por menos de tres segundos.
Este sistema inteligente de control de crucero adaptativo añade, además, la función Steering Assist, un dispositivo que ayuda a mantener el vehículo centrado en su carril al aplicar intervenciones moderadas en la dirección cuando una de las ruedas toca una de las líneas viales del asfalto.
Por otro lado, el sistema de frenado de emergencia a alta velocidad también está disponible, un dispositivo que reduce el riesgo de colisión o, en el caso de que finalmente no logre parar totalmente el vehículo, minimiza los daños o la gravedad de las lesiones de los ocupantes tras el accidente al reducir de forma considerable la velocidad de impacto.