Porsche Mission E, súper misil eléctrico de 600 CV

Ya está aquí el primer eléctrico puro de Porsche. El Mission E tiene 600 CV y puede recorrer hasta 500 km con tan sÓlo 15 minutos de carga. Podría estar en el mercado en 5 años.

Daniel Cuadrado. Twitter: @DanielCuadradoT

Porsche Mission E, súper misil eléctrico de 600 CV
Porsche Mission E, súper misil eléctrico de 600 CV

Para una marca de un producto tan tradicional como es Porsche el progreso podría haberse convertido en un obstáculo insalvable y vehículos como el Mission E que ahora muestran hubiesen sido imposibles. Sin embargo, en lugar de encerrarse en su propia historia y agarrase a su 911 con el motor colgado por detrás y refrigerado por aire, ha sabido adaptarse a los tiempos que corren y ha ido incorporando las nuevas tecnologías en sus vehículos pero siempre llevadas a su terreno. No le tembló la mano al hacer un SUV, ni al crear su primera berlina. Tampoco al incluir el motor diésel y mucho menos a desarrollar el híbrido de calle más rápido del mundo con el Porsche 918.

 

Ahora hay que entrar en la era eléctrica y la mejor forma de hacerlo es a lo grande, con un coche como el prototipo Porsche Mission E. Se trata de un deportivo cien por cien eléctrico de cuatro plazas y una potencia equivalente a los 600 caballos. No hay más que verlo para encontrar en él a la evolución de su 911, con el que guarda muchas similitudes, pero también el estilo que tendrá el nuevo Panamera a mediados de 2016. Al final no hay nada como recurrir al icono de la marca para explicar el futuro. El frontal carece de los tradicionales faros redondos y se inclina más hacia el estilo del 918. La tecnología Led Matrix de las ópticas permite un diseño mucho más pequeño, con lo que se gana en aerodinámica a la vez que se ahorra peso y consumo energético. La vista lateral nos sorprende con cuatro puertas enfrentadas y la ausencia del pilar central que difícilmente veremos en el nuevo Panamera.

El Porsche Mission E tiene una construcción ligera con una perfecta distribución del peso y un centro de gravedad bajo, ideales para ser eficiente y deportivo. La batería es de iones de litio y va ubicada en los bajos del coche en el espacio que hay entre ambos trenes. La carrocería está formada por aluminio con acero y fibra de carbono mezclada con plástico, e incluye unas preciosas llantas de fibra de carbono de 21 pulgadas delante y 22 pulgadas detrás. La ausencia de túnel de transmisión le otorga un amplio habitáculo para lo que acostumbraríamos a ver en un coche de 1,30 m de alto.

Emplea motores completamente nuevos con tecnología desarrollada en el 919 Hybrid ganador de Le Mans. Lleva dos propulsores sincrónicos de imanes permanentes (PSM) encargados tanto de la aceleración como de la recuperación de energía. Rinden entre los dos 600 caballos, que le permiten una aceleración de 0 a 100 km/h de 3,5 segundos y de 0 a 200 km/h de 12 segundos. Según Porsche, al alto grado de eficiencia de estos motores se suma una alta densidad de potencia; al contrario que los eléctricos actuales, los nuevos propulsores desarrollan su potencia máxima incluso durante la aceleración repetida en breves espacios de tiempo. Al llevar un motor en cada tren, cuenta con tracción total, controlada por el Porsche Torque Vectoring, encargado de distribuir el par a cada rueda individualmente. Dispone de cuatro ruedas directrices, con lo que la marca promete bajar en Nurburgring de los 8 minutos.

El Porsche Mission E puede recorrer más de 500 kilómetros con una sola carga de batería. En tan solo 15 minutos es capaz de recargar hasta un 80 por ciento de la carga, con lo que en un cuarto de hora de recarga se asegura una autonomía de 400 kilómetros. Utiliza un sistema de 800 voltios, cuando los vehículos actuales llevan uno de 400 voltios, y unos ligeros cables de cobre con una sección transversal reducida permitirán tal velocidad de carga con lo que en la casa han denominado el Porche Turbo Charging, de 800 voltidos. El Mission E podrá recargarse en un sistema tradicional de carga rápida de 400 voltios o en la red común del hogar a través de la inducción mediante un sistema inductivo situado en los bajos del vehículo.

El salpicadero dispone de una única pantalla central en forma curva y plana. Esta pantalla representa hasta cinco relojes asociados a las funciones Connected Car, Performance, Drive, Energie y Sport Chrono. El sistema reconoce mediante una cámara qué instrumento está mirando el conductor, quien activará la función mediante una tecla situada en el volante, mezclando así el reconocimiento de la mirada con la confirmación manual. La pantalla se adapta a la altura o movimiento lateral del conductor, de tal forma que siempre vea la información al margen de su movimiento. Mediante una cámara puede retratar el estado de ánimo del conductor, reproduciendo el estado de ánimo del mismo mediante un emoticono en la pantalla, que podrá enviarse a sus redes sociales y compartir su felicidad de la conducción con sus amigos.

Dispone de una pantalla holográfica que se extiende hasta el lado del acompañante, que crea un efecto tridimensional. Aquí se encuentran todas las aplicaciones multimedia, de navegación, control climático, contactos y vehículo, que se podrán controlar sin contacto y mediante gestos reconocidos por sensores de movimiento. Carece de retrovisores y en su lugar hay un equipo de cámaras que proyectan su imagen en la pantalla central. Porsche estaría lista para tener este prototipo en la calle en cinco años, si bien el Mission E podría ser el anticipo de una nueva línea de productos de la casa ubicada entre el 911 y el Panamera, fruto de la versatilidad de la plataforma modular que estrenará este último a mediados de 2016.