De menor a mayor… Mini tres puertas como punto de partida. Para esta nueva generación quédate con estos titulares. Más corto de los 3,86 metros actuales perdiendo, sobre todo, voladizo trasero. Se quiere volver a los orígenes, a que un Mini sea eso, un Mini más cercano, si no al modelo de Sir Alec Issigonis, al menos al de Frank “Curro” Stephenson con la primera generación moderna a comienzos del milenio. Apostemos por unos 3,6 metros de longitud. Eso sí, optimización del espacio gracias a una batalla que crecerá unos cuatro centímetros. También se buscará un diseño más simple, más sencillo, con menos maquillaje. Por delante el cambio estético no será radical aunque la línea del parabrisas parece más tendida para mejorar aerodinámica y consumos.
Eso sí, dos plataformas posibles, según se apueste por la electrificación o por la combustión. Los modelos de combustión se fabricarán en Oxford y se recurrirá a los tres y cuatro cilindros apoyados por turbo –posibilidad de microhibridación extrapolable al 5 puertas y al Cabrio- y los 100% eléctricos tendrán sello chino –joint venture con Great Wall- con dos posibilidades de motor y batería: 40 kWh para asociarse a un motor de 181 CV y 300 km de autonomía o 50 kWh para 221 CV y 400 km de autonomía –la batería actual de Mini Electric se queda en 32,6 kWh de capacidad útil y unos 235 km de autonomía-.
Se mantendrá ese techo flotante tan Mini igual que el lenguaje lumínico trasero recordando a la Union Jack –con efecto pixelado- aunque con interpretaciones diferentes según silueta y conectadas de lado a lado. 2023 será la fecha de su lanzamiento, llegando inicialmente las variantes de 3 puertas, para luego ir incorporándose la variante de cinco –muy diferenciada estéticamente- y terminar con el cabrio en 2025.
En el interior, llamativa y gigante pantalla central táctil y con aprovechamiento total del espacio –nada de pantallas rectangulares con cerco redondo y espacio desaprovechado-. Menos botonería, aunque algunos interruptores físicos, por debajo de esta pantalla de tamaño similar al volante. Eso sí, el componente sostenible evitará cueros, cromados…
Por encima, una nueva silueta SUV B 100% eléctrica que debería moverse en el entorno de los 4,2 metros para sustituir a los Clubman y para rivalizar con los nuevos Smart e incluso con los DS3 Crossback y similares. Se buscará imagen robusta y tecnólogica a la vez y su lanzamiento también está previsto para 2023. Este tamaño obligará a crecer al futuro Mini Countryman por encima de los 4,3 metros actuales e incluso no se descarta que pudiese tener una variante coupé recuperando el espíritu Paceman -2024-.
En estos Mini Countryman y Paceman, la capacidad de la batería podría alargarse a los 60 kWh para garantizar autonomías de 400 km. Incluso se especula con la posibilidad de ofrecer una tracción total a partir de dos motores eléctricos para las versiones más deportivas. Aquí seguiremos encontrando la combustión junto al eléctrico 100%. Lo que sí parece desechado de cualquier Mini es la hibridación enchufable.
