La División de Proyectos Especiales de Morgan ha desarrollado el SP1, un coche de formas originales y con una estética más propia de un automóvil clásico. Con un exterior que nos recuerda a los trabajos de Wiesmann (fabricante alemán de automóviles) se ha presentado esta obra de arte en la que artesanía tradicional y tecnología moderna se unen para dar el resultado que veis en las fotos.
Se trata de una evolución de su concepto LifeCar, perfeccionado para adaptarlo a la conducción agradable en carretera y, en este caso, se trata de una unidad única y exclusiva, ya que se ha creado basándose en las peticiones del cliente.
Desde el boceto hasta el paso final, el Morgan SP1 se ha sometido a un exhaustivo trabajo manual, incluyendo el moldeado del marco de madera de fresno y de Bubinga africana, materiales que eligió el cliente por su pasión hacia África. Estos dos tipos de madera –una más oscura que otra- son visibles también en el interior del habitáculo, en el que contrastan con un moderno dispositivo iPad que hace de consola central y desde el que podemos manejar los sistemas de información y entretenimiento.
Un total de 10 personas (no dedicadas exclusivamente al SP1) se encargaron de desarrollo y ensamblaje del coche, que se finalizó tras 18 meses de delicado trabajo. Bajó su capó, han montado un motor de gasolina V6 de 3,7 litros y una potencia de 320 CV (el de origen del Ford Mustang). Sus prestaciones le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en cinco segundos y alcanzar una velocidad máxima de 233 km/h.