El Mercedes-Benz GLC 43 AMG 4Matic se posiciona en la gama como el SUV de tamaño mediano (antes con la denominación GLK) con la distinción radical y deportiva AMG, algo con lo que ya cuenta tanto el modelo que está un escalón por debajo, el Mercedes-Benz GLA 45 AMG 4Matic como el SUV más grande, el Mercedes-Benz GLE 63 AMG (hasta 2015 tomaba el nombre de Mercedes-Benz ML).
Al igual que en toda la gama AMG, el Mercedes-Benz GLC 43 AMG 4Matic toma elementos estéticos de corte más deportivo, como la parrilla delantera con efecto diamante y detalles cromados, el faldón delantero firmado por AMG y el splitter frontal acabado en cromado, estos dos últimos elementos trabajados para el correcto flujo del aire en términos de aerodinámico y de refrigeración. La parte trasera, por su parte, viste un faldón trasero de la gama de la división deportiva, del que parten dos salidas de escape dobles terminadas en cromado.
Las llantas de aleación elegidas tienen un generoso tamaño de 19 pulgadas, con un diseño de cinco radios dobles y pintadas de color negro brillante. Las dimensiones son de 235/55 para los neumáticos delanteros y de 255/50 para los traseros. El conjunto de la rueda incorpora un sistema de frenos de altas prestaciones con discos autoventilados, de 360 mm, en el caso de los delanteros, y de 320 mm para los traseros.
El interior del Mercedes-Benz GLC 43 AMG 4Matic cuenta con un volante deportivo de color negro y con las características costuras rojas de aspecto rácing. Los asientos también cuentan con una estética deportiva y envuelven y sujetan lateralmente tanto al conductor como al copiloto. El tapizado usado en el interior simula el cuero Ártico de color negro y también utiliza un contraste con las costuras de color rojo.
El cuadro de instrumentación de la serie AMG presenta dos esferas de gran tamaño y el sistema de información y entretenimiento se gestiona desde una pantalla táctil de 5,5 pulgadas.
Motor y prestaciones del Mercedes-Benz GLC 43 AMG 4Matic
El Mercedes-Benz GLC 43 AMG 4Matic monta el motor de gasolina 3.0 V6 biturbo de 367 CV, acoplado a la transmisión automática 9G-Tronic de nueve velocidades y que envía la fuerza a las cuatro ruedas gracias a la tracción integral ‘AMG Performance 4Matic’. El par motor máximo es de 53,06 mkg y la aceleración de 0 a 100 km/h la realiza en 4,9 segundos. La velocidad máxima establecida está limitada electrónicamente en los 250 km/h.
En el Mercedes-Benz GLC 43 AMG 4Matic encontramos de serie la suspensión neumática adaptativa y regulable ‘Air Body Control’, así como la dirección deportiva de alta precisión, el tren de rodaje ‘AMG Ride Control’ –regulable en hasta tres niveles), el ‘AMG Dynamic Select’ -que pemite elegir entre los modos de conducción Eco, Confort, Sport, Sport Plus e Individual- y el programa con tres niveles de desconexión del control de estabilidad ESP, entre otros elementos.
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