Estamos ante un compacto de 4,21 metros (6 centímetros menos que el DS4 actual), que destaca sobre todo por una gran anchura -1,98 metros de ancho ( 17 cm)- y una altura muy reducida-1,35 metros (17 cm) - que potencia el dinamismo y la musculatura del conjunto y que confiere al conductor una postura al volante a ras del asfalto.
En materia de diseño, en el frontal se siguen los preceptos marcados por el DS6 y el DS 5LS, con una aire más musculoso y vanguardista. Destaca en este apartado, las poderosas llantas de aleación de 20 pulgadas -con unos radios flotantes que no están unidos al centro de la rueda- y la configuración del techo, con una estética que recuerda al de las escamas de un reptil y que juega con los contrastes para dar luz al interior y brillar hacia el exterior.
Lujo por doquier
Dentro del habitáculo, se ha cuidado hasta el más mínimo detalle y el lujo y la exclusividad se tornan en protagonistas. La consola central, con un diseño inspirado en la forma de una columna vertebral, está recubierta con oro blanco, con mandos específicos, adornados con piedras talladas a medida y un reloj digital en cuyo contorno se ha insertado granito negro, con matices de oro. Al mismo tiempo y no menos llamativo, nos encontramos con un volante rectangular que, según Citroën, 'anticipa sensaciones de conducción inéditas'.
Llama la atención una enorme pantalla multifunción, situada en la consola del techo, que deja espacio libre en el salpicadero y sustituye al retrovisor central, ya que asegura la visión trasera. Además, toda pantalla física extra se sustituye por una pantalla virtual en el parabrisas queproyecta los datos esenciales para la conducción
La tapicería de los asientos también se une a la fiesta de la exclusividad y son de, citamos palabras textuales, 'piel anilina de calidad excepcional, seleccionada cuidadosamente y curtida específicamente por la tenería Seton con posibilidad de inserciones de oro blanco'. Además, se colabora con firmas de lujo como Swarovski -cristales- o Lesage -bordados-. Ahí es nada.
Pero eso no es todo. Las posibilidades de configuración y personalización son muy grandes. De hecho, el salpicadero y los paneles de las puertas se pueden sustituir en 15 minutos y se puede optar por tres ambientes o personalizaciones diferentes: 'Mâle, 'Parisienne Chic' o 'Fatale Punk' que expresan, respectivamente, sobriedad, refinamiento o rebeldia.
Mecánicamente, el Divine DS equipa un 1.6 THP turbo de inyección directa de gasolina de 270 CV y un par máximo de 33,9 mkg entre 1.900 y 5.500 rpm. Cumple la normativa Euro6 y sólo emite 145 g/Km de CO2.
El Divine DS se estrena en el Concurso de Elegancia de Chantilly el domingo 7 de septiembre de 2014 y lo podremos ver en el Salón del Automóvil de París.