BMW amplía la gama de motores asociados al X1, el pequeño SUV de la marca.
Se trata de tres mecánicas de nueva incorporación, dos Diesel y una de gasolina. Este último es un tricilíndrico, correspondiente con la versión sDrive18i, de 1,5 litros y un desarrollo de 136 CV. Este propulsor, el primero de tres cilindros que llega a la gama del X1, se puede asociar a una caja de cambios manual de seis velocidades –transmisión automática opcional-.
De las versiones Diesel, nos encontramos con el sDrive16d, otro tricilíndrico 1.5 de 116 CV y con el XDrive18d, este último un cuatro cilindros 2.0 que rinde 150 CV. Esta versión es la más potente de las tres novedades, cuenta con tracción integral y se puede acoplar a la caja de cambios manual de seis velocidades o a la automática de ocho relaciones.
Todas ellas buscan una mayor eficiencia y que el precio de acceso sea inferior al del resto de la gama X1.