A su paso se extienden las alfombras rojas, llueven pétalos de rosas y corren apresurados decenas de guardaespaldas. No es extraño que estas joyas de la automoción no abandonen a menudo los suntuosos garajes donde se conservan: son los Phantom IV, los “Rolls-de reyes".El próximo sábado, uno de estos exclusivos modelos, en concreto la unidad 4AF18, recorrerá las calles de Madrid. Para recordar su última aparición en público, nos tenemos que remontar al año 1997, a la boda de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín.
Sin embargo, no es exactamente el mismo: los equipos de seguridad de la Casa Real llevan meses trabajando en una “especial puesta a punto". Una empresa madrileña se ha encargado de reforzar su blindaje y ha preparado una especie de techo de cristal blindado (una estructura parecida a la que usa el “Papamóvil").
Los recién casados podrán ser vistos, pero estarán protegidos por un armazón invisible.
El Rolls-Royce que llevará al príncipe Felipe tras su boda se construyó directamente blindado. Sin embargo, se ha reforzado su seguridad, han aumentado el grosor de las planchas tanto de los laterales del vehículo como de los bajos del mismo. Además, se ha añadido una especie de armazón de cristal –también blindado- que permitirá que se vea a sus pasajeros, pero que estos no vayan expuestos. Por motivos de seguridad, sólo ha transcendido que los refuerzos se han realizado en una fábrica del norte de Madrid, sin especificar cuál. En 1950, Rolls-Royce quiso hacer un regalo muy particular a Isabel de Windsor, todavía no era reina, y al duque de Edimburgo por su aniversario de boda: el coche más exclusivo que nunca se hubiera fabricado. Así, nació el Phantom IV, un modelo del que sólo se produjeron 18 unidades en los seis años siguientes. Lleva un motor de 5.675 cm3, con 8 cilindros en línea, capaz de desarrollar 160 km/h. Posee un cambio de cuatro velocidades, frenos hidráulicos, suspensión independiente a las cuatro ruedas, llantas de 17 pulgadas... Para el Phantom IV, Rolls realizó un logotipo específico; en realidad, “arrodilló" a su ya veterana “Espíritu del Éxtasis", la estatuilla -también conocida como Emily- que corona sus modelos desde 1911. ¿Por qué? Según afirmaban, tenía que quedar muy claro su señal de respeto hacia el alto rango de los ocupantes de estos modelos. Si juzgamos la lista de sus “compradores", no nos extrañamos de que este fabricante se dedicara a hacer genuflexiones: la familia real británica, el Sha de Persia, el Aga Khan... son algunos de los mandatarios que unieron su nombre al de Rolls-Royce.
NÚMERO DE CHASIS | AÑO | PRIMER PROPIETARIO |
4AF2 | 1950 | PRINCESA ISABEL DE INGLATERRA |
4AF4 | 1950 | ROLLS ROYCE: vehículo usado para test y posteriormente desmontado |
4AF6 | 1951 | EL SHA DE PERSIA |
4AF8 | 1951 | EL EMIR DE KUWAIT |
4AF10 | 1951 | EL DUQUE DE GLOUCESTER |
4AF12 | 1952 | LA DUQUESA DE KENT |
4AF14 | 1952 | FRANCISCO FRANCO |
4AF16 | 1952 | FRANCISCO FRANCO |
4AF18 | 1952 | FRANCISCO FRANCO |
4AF20 | 1952 | EL AGA KHAN |
4AF22 | 1952 | EL PRÍNCIPE TALAL DE ARABIA SAUDÍ |
4BP1 | 1953 | EL REY DE IRAK |
4BP3 | 1953 | LA PRINCESA REGENTE DE IRAK |
4BP5 | 1954 | LA REINA ISABEL II DE INGLATERRA |
4BP7 | 1954 | LA PRINCESA MARGARITA DE INGLATERRA |
4CS2 | 1955 | EL EMIR DE KUWAIT |
4CS4 | 1956 | EL EMIR DE KUWAIT |
4CS6 | 1957 | EL SHA DE PERSIA |
Audi aportará un centenar de vehículos; la mayoría de ellos serán A8. BMW también aportará 20 unidades de la Serie 7. También podremos ver muchos Mercedes, en concreto de las clases E y G.