La electromovilidad ha cambiado por completo el panorama automovilístico. Y uno de los sectores implicados en este cambio es el de los talleres. El “Cuaderno de recomendaciones para el mantenimiento y reparación de vehículos híbridos y eléctricos” que ha elaborado la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam) junto con la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (Aedive), recoge una serie de recomendaciones para adaptar los talleres teniendo en cuenta los riesgos que derivan de la electromovilidad. Pero no solo eso, también es la base de los programas de formación que tendrán que llevar a cabo los operarios y los jefes de taller.
Según esta hoja de ruta de Ganvam y Aedive, los talleres, una vez hayan recibido un vehículo eléctrico o híbrido al que se le vaya a realizar una reparación o un mantenimiento que no afecte al sistema eléctrico de propulsión, deberán habilitar una zona específica para el mismo. No tendrá por qué ser una instalación fija, sino una zona provisional separada del resto del taller, acordonada y con señalización que indique que se trata de un modelo eléctrico.
En el caso de que la reparación del coche eléctrico esté relacionada con la motorización o el cambio de algún elemento del sistema eléctrico, el modelo sí tendrá que trasladarse entonces a una zona permanente para este tipo de vehículos.
Programas de formación para los talleres
Ambas asociaciones también han puesto el foco en los elementos de protección necesarios para evitar que esta nueva tecnología pueda ocasionar cualquier tipo de lesión y en conocer las características y los tipos de vehículos híbridos y eléctricos existentes; conocer sus componentes, su descripción y su funcionamiento; conocer las precauciones en la manipulación de este tipo de modelos; conocer los peligros de la electricidad, así como ser informado de qué hacer en caso de accidente o incendio.
En cuanto a los equipos de protección de los operarios de un taller, todo el cuerpo del operador deberá estar protegido contra los riesgos de contacto con una parte eléctrica con zapatos de seguridad, herramientas y guantes aislantes. También se recomienda no usar objetos o colgantes de metal en las muñecas o alrededor del cuello.