La Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente, conocida como Transport & Environment, le ha declarado la “guerra" a los vehículos de gas. Según un estudio elaborado por este organismo, los vehículos propulsados por gas liberan grandes cantidades de partículas contaminantes y peligrosas asociadas con el cáncer, el alzheimer y enfermedades cardíacas y respiratorias. Unas afirmaciones que contradicen los reportes de la industria automovilística y gasista.
De acuerdo al documento, los coches y furgonetas de gas natural comprimido (GNC) Euro 6 emiten un número elevado de partículas. En algunos casos, las emisiones son un 50 % superiores a las permitidas para los modelos diésel o gasolina equivalentes.
El informe destaca que los riesgos se incrementan, debido a que los coches y furgonetas de GNC, a diferencia de sus equivalentes diésel y gasolina, no están sujetos a un límite de emisión de partículas. Los vehículos pesados de GNC no estarán sujetos a un valor límite del número de partículas en carretera hasta 2023. Pero se ha demostrado que emiten hasta 3 billones de partículas por km, revela el informe.
Por su parte, los autobuses también emiten un gran número de partículas. Los niveles más elevados de emisiones de partículas de los vehículos de GNC suelen registrase durante la conducción urbana (es decir, a bajas velocidades, con arranques en frío). Este hecho resulta particularmente preocupante para la calidad del aire en las ciudades y zonas densamente pobladas.
¿Deben llevar etiqueta ECO?
Transport & Environment no entiende que en España estos vehículos lleven una etiqueta ECO que les da acceso privilegiado a las Zonas de Bajas Emisiones que ya se aplica en algunas ciudades. Y que el Gobierno central, en su reciente plan de impulso de la cadena de valor de la industria de automoción, haya anunciado importantes ayudas a este sector.
El informe asegura que la legislación sobre emisiones de partículas se está mostrando insuficiente. Al contrario de lo que sucede con los diésel y a gasolina, no existe regulación de partículas para los vehículos de gas.
El estudio refiere 5 pruebas de laboratorio en las que los automóviles de GNC emitieron entre 9 mil millones y 900 mil millones de partículas por km. Otro aspecto destacado del documento es que los vehículos a gas emiten un número especialmente grande de partículas ultrafinas. Estas son consideradas como las más dañinas para la salud humana ya que penetran profundamente en el cuerpo. Se han relacionado con el cáncer cerebral.
Por lo tanto, el documento señala que el GNC no puede catalogarse como una tecnología limpia o de baja emisión. En consecuencia no puede estar sujeto a las políticas o los incentivos financieros para promover su uso como vía de mejora de la calidad del aire.