Se acabó el Plan Canje

La crisis que vivió el sector sudamericano del automóvil durante el año pasado hizo que algunos países tomaran medidas intervencionistas.

El Gobierno argentino ha terminado hoy con el Plan Canje después de que estuviera vigente desde mayo pasado. Este plan entregaba a depósitos de desguace los vehículos con un antigüedad superior a los diez años y a cambio entregaba certificados de descuentos en la compra de nuevos coches. En total se han desguazado 340.000 unidades, pero sólo 175.000 han sido reemplazadas. Los propietario argentinos que aún tengan los certificados de descuentos podrán utilizarlos sólo hasta el próximo 31 de octubre. El Plan Canje fue instaurado por el Gobierno de Carlos Menem y el cambio de Ejecutivo, con Fernando de la Rúa, ha acabado con el Plan, además de considerarlo inútil. Según datos del Gobierno de Rúa, este plan representó para las arcas estatales un gasto de 1.000 millones de dólares (170.000 millones de pesetas). El Plan Canje se instauró tras el descenso de ventas de automóviles que sufrió Argentina durante el año pasado, que, en los dos primeros meses, supuso un 52 por ciento de matriculaciones menos. Esta situación provocó el despido de 20.000 obreros de este sector y el cierre de varias fábricas de repuestos de vehículos. Tras el nuevo acuerdo adoptado entre Brasil y Argentina sobre el comercio de automóviles, el Plan Canje parece no tener razón de ser.