Santana, Nissan y Land Rover compiten en el Ejército

Santana, Nissan y Land Rover podrían enfrentarse en el concurso convocado por el Ministerio de Defensa para dotar al Ejército de todo terrenos. De momento, Santana ha asegurado su participación, aunque el contrato para el vencedor también podría atraer a Land Rover y Nissan.

El Ejército necesita todo terrenos de autobastidor de 1.000 kg de carga útil y, para adoptar el más adecuado, el Ministerio de Defensa decidió sacar a concurso su elección. Las bases están en el Boletín Oficial del Estado del 2 de julio, en el que se señala que el modelo seleccionado será declarado de necesaria uniformidad en las Fuerzas Armadas.

Los candidatos al contrato deben exponer sus proyectos antes del 10 de septiembre y, a mediados de ese mismo mes, se decidirá la adjudicación. De momento, Santana ya ha asegurado su participación, mientras que Nissan y Land Rover aún están estudiando esa posibilidad. La filial española de la automovilística japonesa ha señalado que podría homologar alguno de sus vehículos para presentarlo al concurso, según afirma el periódico “La gaceta de los negocios". Cuando los todo terreno sean declarados de necesaria uniformidad, una o varias series de los mismos quedarán homologadas y el Ejército estará obligado a adquirir estas unidades.Santana presentará a concurso el Aníbal, cuyo propósito de formar parte de las Fuerzas Armadas se puso de manifiesto desde su lanzamiento, en noviembre del año pasado. De hecho, la planta de Linares (Jaén) ya ha producido un prototipo de vehículo militar basado en este modelo, que ha vendido 25 unidades al Ejército del Aire.

El Aníbal, llamado a ser la “esperanza blanca" de la marca andaluza, no está dando los resultados esperados; seis meses después de su llegada al mercado se habían comercializado 149 unidades, cuando la previsión de ventas para un año completo era de 1.800 vehículos. Estos datos han incidido en un mal ejercicio de Santana: el constructor ha finalizado 2002 con un incremento del 40 por ciento en sus pérdidas, que se sitúan en 23,7 millones de euros. Nissan, por su parte, es un poderoso rival. La japonesa ya arrebató a Santana un contrato con el Ejército en 1994. En aquella ocasión, la Fuerzas Armadas homologaron su modelo Patrol –que ya no se fabrica-, frente al M-300 del constructor español. Además, el Terrano (muy probablemente, el vehículo que presentarían al concurso), también se manufactura en España y ya es utilizado por la Guardia Civil, como señala el diario nacional.Santana ha realizado una inversión de 56 millones de euros en su planta de Linares para producir el Suzuki Jimny. El Gobierno español subvencionará 4,5 millones de euros de esta cantidad, según ha anunciado el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.

Las diferentes versiones de este modelo sustituirán al Samurai, que dejó de fabricarse en Jaén a finales de junio, tal y como indica “La gaceta de los negocios".