A partir del próximo sábado 8 de junio las motos tendrán un poco más difícil circular y moverse por la ciudad de Valencia. Ese día entrará en vigor la nueva ordenanza de movilidad en la ciudad que, además de regular bicicletas y patinetes eléctricos, afectará en gran medida a motocicletas y ciclomotores, restringiendo su uso y posibilidades de aparcamiento en sus calles.
Una de las grandes novedades será que esta nueva ordenanza eliminará la posibilidad de circular a estos vehículos por el carril bus EMT/TAXI, algo que hasta ahora podían hacer como medida de favor que se aplicó por el anterior Gobierno municipal. Ahora estará prohibido también para motos, ya que, según la Concejalía de Movilidad, “existen estudios técnicos que no recomiendan que los ciclomotores y motocicletas hagan uso del carril bus por el riesgo de incrementar la accidentalidad en número y en gravedad. A su vez, la circulación de estos vehículos por el carril bus supone un perjuicio para el correcto servicio de la EMT y el taxi".
Más perjudicial si cabe para las motos, sin embargo, será la nueva limitación para que estos vehículos de 2 ruedas aparquen en las aceras. Si hasta la fecha, las motos podían aparcarse en las aceras de más de 3 metros de ancho, ahora entran nuevas restricciones. Por ejemplo, que deben estar paralelas al bordillo, dejando a su vez una distancia mínima de 50 centímetros para permitir la apertura de puertas de otros vehículos estacionados.
Además, en lugar de 2 metros, ahora las motos también deben dejar al menos 3 metros (1 más) hasta el paso de peatones más próximo, distancia que se fija en un metro hacia el carril bici, en caso de que exista. Otra novedad importante es que, a partir del 8 de junio, las motos solo podrán además aparcar en aceras cuando no existan plazas específicas de estacionamiento habilitadas para estos vehículos a menos de 50 metros (estén o no ocupadas).
Por último, la nueva ordenanza municipal de Valencia expresa que las motos no podrán estacionar en la acera en ningún caso si ello supone hacerlo junto a una zona de carga y descarga, mientras que en caso de poder estacionar porque se cumpla todo el resto de requisitos no podrán acceder a aceras con el motor encendido, sino que desde el bordillo tendrán que llevarlas hasta el lugar de aparcamiento.
Una vez entre en vigor la nueva ordenanza municipal de Valencia, la Policía Local tendrá la autoridad para sancionar a todos aquellos conductores que no cumplan con la nueva legislación. Avisados estáis.