El concepto de coche 'low cost' lo anunció Renault en hace 16 años, y aunque el robusto Logan de 2004 (voluntariamente feo y espartano para diferenciarlo de los coches convencionales) no cumplió del todo el utópico objetivo de precio, sí abrió nuevos recovecos del mercado internacional. El Dacia Sandero, igualmente basado en la super-amortizada plataforma de un antiguo Renault Clio, ha sido desde el inicio su primo listo y el que ahora sustenta casi el 60 por ciento de las ventas de Dacia en España.
Sobre una base estructural y mecánica que garantiza un funcionamiento razonablemente eficiente, el Sandero radica su éxito en la mayor compacidad respecto al Logan, y, desde luego, en una estética mucho más lograda. Frente a la falta de refinamiento en los detalles, seguridad pasiva menos efectiva y el menor agrado de conducción y confort sonoro que otros modelos del segmento B, este 5 puertas ofrece una inusitada habitabilidad para su tamaño, especialmente en anchura interior, y un maletero con una capacidad real de 370 litros –según comprobaciones del Centro Técnico de Motorpress Ibérica- que para sí la quisieran algunos modelos que triplican su precio.
El más asequible: Sandero Base 1.2 75 CV
Con un precio teórico de menos de 6.500 € si se aplica el descuento PIVE, esta versión con motor de 1.149 cm3 es más una referencia comercial que un producto destinado a la venta; sólo los más obstinados obtendrán un coche que no ofrece el aire acondicionado ni como opción. Pero, atención, porque incluso este Sandero, por imperativo del mercado y de la normativa que se avecina, dispone de serie de control de estabilidad, de presión de neumáticos, asistencia de emergencia a la frenada, cuatro airbags, servodirección, ruedas de 185/65-15 y luces diurnas; o sea, que se aleja de la extrema simplificación de equipamiento de los Dacia iniciales.
El más distinguido: Sandero SL AuDacia dCi 90
Este Sandero de serie limitada y tapicería específica, con un precio de lista de 11.990 €, se circunscribe al motor Diesel 1.5 de origen Renault, y acumula todos los detalles de equipamiento de la versión Laureate de terminación superior: radio MP3 con mandos en el volante, retrovisores eléctricos, marcador de temperatura exterior, volante y asiento del conductor regulables en altura y faros antiniebla; y además añade llantas de aleación y es el único Sandero con aire acondicionado de serie. En cuanto a su motor de 90 CV, con un par máximo real de casi 25 mkg, es ya una cierta garantía de buenas prestaciones en carretera, justificando incluso un posible uso familiar.
El más ahorrador: Sandero dCi 75
Bien en versión Ambiance o Laureate, este Sandero (desde 10.330 € sin PIVE) ofrece un rendimiento mayor que el que sugieren sus 75 CV, porque el motorcito Renault 1.5 se acerca a los 20 mkg reales de par motor, lo que garantiza buena elasticidad y recuperaciones. En realidad, los consumos homologados, con un promedio de 3,8 l/100 km y emisiones de CO2 de 99 g/km, son en principio los mismos que en la versión 90 CV. En cuanto a las dos terminaciones, la Ambiance añade (respecto al Base) cerraduras centralizadas, luz en el maletero y poco más, y la Laureate cuesta 600 € más; el dCi de 90 CV añadiría un coste de otros 600 €, perfectamente asumible. Sería así la compra inteligente en este modelo.
El más dinámico: Sandero Laureate TCE 90
El motor tricilíndrico de 899cm3 (10.530 €), disponible sólo en terminación Laureate, es el ‘otro’ motor de gasolina además del 1.2, en el Sandero. No es un paradigma de suavidad y ausencia de vibraciones, pero funciona más que razonablemente bien, y de ahí su presencia en los Renault Twingo, Clio, Captur y Megane. En el Dacia, el empuje del motor turbocomprimido permite anunciar una aceleración 0-100 km/h de 11,1 segundos, frente a los 14,5 del 1.2, por no hablar de las limitaciones de éste en velocidad punta. La actualización técnica de este 900 también produce un consumo medio homologado de 5 l/100 frente a los 5,8 del motor 1.2, con el que sí se paga impuesto de Matriculación.
El más limpio: Sandero 1.2 GLP
La conversión a gases licuados del petróleo en el Sandero se efectúa en el motor 4 cilindros de 1.149 cm3. Esta variante mecánica, de creciente demanda en nuestro país con una disponibilidad de repostaje GLP que ya no es marginal, está disponible en el Sandero en terminaciones Ambiance y Laureate (10.030 y 10.630 €). La limpieza del combustible permite anunciar unas emisiones homologadas de 120 g/km de CO2 (no se paga impuesto de Matriculación), aún cuando el consumo real no es muy brillante; pero también está a favor el precio del GLP. Las prestaciones, obviamente, no son muy airosas, pues la potencia máxima cae a 72 CV con el gas.
El más pintón: Sandero Stepway
Ya antes de concebir el todo camino Duster –otro éxito de la marca- Dacia pensó en un modelo con estética campera, que le da un aire bastante distinto al Sandero, y no sólo por sus barras en el techo. El habitáculo y maletero conservan la misma amplitud de sus hermanos, pero el Stepway añade decoración específica, ruedas de 16” con neumáticos 205/55 de asfalto, y su distancia al suelo se aumenta hasta los 207 mm, en vez de los 164 habituales. La terminación es única y los motores son el 900 de gasolina y 1,5 Diesel, ambos de 90 CV, cuyas prestaciones y consumos empeoran un poco por el mayor peso y la aerodinámica peor que determina la distancia al suelo aumentada. Los precios respectivos son de 10.730 y 12.630 €.
