P: ¿Qué le pedimos a 2021 con el corazón y con la razón?
R: Con el corazón pediría a los políticos que pusieran un poquito de sensatez en las cosas, que escucharan antes de tomar decisiones y que entendieran lo complicado que es en un negocio como el nuestro, adaptarse a los tiempos tan cambiantes, siendo además uno de los sectores más demandados que existe ahora mismo por el tema de emisiones y sostenibilidad. Con la razón veo un primer trimestre que será muy triste como consecuencia de las pocas acciones que los políticos han tomado respecto a nosotros; luego es posible que la vacuna empiece a funcionar y comience a haber recuperación económica y entonces podamos ver un año mejor que 2020, pero plenamente por debajo de 2019 porque no hay indicadores de que esto vaya a ser recuperación en V. En Europa hablan de cifras un 10-15 por ciento de caída para el mercado en 2021 frente al de 2019 en lo que sería una recuperación razonable; aquí partimos de una caída en 2020 del 35 por ciento. Para el año próximo dependemos no solo de la efectividad de vacunas, sino de la capacidad de las empresas para generar empleo, de la reordenación económica de países como el nuestro con un sector que se ha hundido y va a ser difícil que se levante como es el de la hostelería…
P: ¿Por qué esa diferencia de comportamiento comercial entre Jaguar y Land Rover en 2020?
R: Land Rover se está comportando mucho mejor que Jaguar por renovación de gama y lanzamientos que nos han ayudado mucho. Jaguar ha tenido modelos que hemos renovado en el tramo final de año y de los que ya admitimos pedidos. Soy optimista porque en diciembre Jaguar nos va a dar una alegría, tiene buena pinta... Llevábamos tiempo sin hacer publicidad sobre esta marca, no teníamos novedades en las gamas que ahora sí llegan vía E-Pace, F-Pace, F-Type y I-Pace. En Land Rover somos básicamente Evoque y Velar que están funcionando de maravilla, hemos dado en el clavo en cuanto a posicionamiento de precios, y la llegada de las versiones híbridas enchufables está ayudando también muchísimo…
P: ¿Por qué el Premium se ha comportado mejor que el generalista en un año como 2020?
R: Nuestro segmento es más “inelástico” a los cambios económicos coyunturales. La gente con problemas para meterse en la inversión de un coche es gente que está pensando en si va a mantener su puesto de trabajo, mientras que en nuestros segmentos hay más empresario. Hay caída y en vez de un 35 por ciento del generalista caeremos un 20. En Land Rover, desde septiembre, estamos teniendo unos volúmenes de tráfico que hacía mucho no los veíamos. La gente, cuanto más caro el coche, barrunta mayor posible subida que se va a producir en enero y quien ya tenía decidido comprar un coche en este segmento está acelerando el paso para comprar ya.

P: ¿Cómo debería ser ese nuevo Jaguar XJ de 2021 que os permita recuperar glamour a nivel tecnológico?
R: Debería ser el coche con el que dejáramos de mirar al pasado y mirásemos más al futuro. XJ hasta la versión anterior se ha diseñado con nostalgia, con enfoque a cliente de los años 90 y ahora tenemos que dirigirnos a un target de cliente más joven, de cuarenta y tantos años, profesional de éxito, autónomo, liberal, y con un enfoque 100 por ciento tecnológico y electrificado. Y por supuesto con un diseño poderoso, moderno y actual.
P: Arrancasteis vuestra electrificación con un eléctrico puro y desde entonces solo híbridos enchufables… ¿Por qué?
R: La pandemia ha influido muchísimo porque aparte de parar fábricas hemos tenido que parar desarrollo de producto no solo los tres meses del pico álgido de la crisis sanitaria, sino algo más. Hemos pospuesto cosas, luego ha habido incertidumbre con el Brexit... Hay que ser prudente antes de meterse en grandes inversiones para ver cómo evoluciona todo. El ciclo de producto nuestro sigue con algún ajuste fruto de las circunstancias. Es cierto que hay mucho hueco temporal entre nuestro primer eléctrico y el segundo, pero ahora mismo tenemos casi el 100% de la gama con un modelo electrificado y eso es un avance sustancial porque el mercado, al menos el del sur de Europa, no está preparado para los modelos 100% eléctricos y la solución pasa por hacer una transición a través del híbrido enchufable. Si miras ahora los Premium eléctricos, poco a poco van subiendo pero seguimos hablando de unos volúmenes pírricos. También es cierto que la pandemia ha ayudado a la concienciación y el híbrido enchufable se ve como una transición hacia el eléctrico hasta que haya puntos de recarga suficientes porque en la actualidad los desplazamientos en coches eléctricos son cortos y ahí, autonomías como las de nuestros plugin con 70 km de autonomía son más que suficientes, sumando las ventajas de parkings, impuestos, uso de carriles preferentes…
P: ¿Y qué umbral nos fijamos para poder hablar de una realidad “real” del eléctrico puro?
R: Lo hablado últimamente en los discursos políticos es demasiado ambicioso. Lo que sí ha habido es un cambio de mentalidad claro en este último año y ya se empieza a ver curiosidad o interés por enterarse de en qué consiste esto. Para que esto cristalice deben cumplirse compromisos por parte de los fabricantes de que lancemos los modelos eléctricos cuando hemos dicho y que al mismo tiempo la infraestructura evolucione en la cantidad que se espera evolucione. Si llegamos a 2025 con 70 modelos eléctricos en el mercado y no pasamos de los 15.000 puntos de recarga –y que funcionen-, pues apaga y vámonos. Según una reciente auditoría realizada por Iberdrola, de los 6.000 que había funcionaban el 70 por ciento, incluso existiendo puntos declarados como de carga que eran enchufes mondos y lirondos.
P: ¿Es sensato cambiar criterios de ecoetiquetado en estos momentos?
R: Queremos que no se toquen las etiquetas porque todavía hay que terminar de implantarlas, que la gente las conozca... Yo si acaso añadiría una etiqueta para normativas futuras cuando lleguen. Empezar a escalar ahora de otra manera, pues no, y menos tocando a los híbridos enchufables porque cada vez están aumentando más las autonomías en eléctrico y en un uso normal urbano, que es donde se necesita bajar emisiones, estos coches son perfectos y competitivos. Si me apuran, que nos obliguen a poner una lucecita a los coches indicando si tiene carga la batería o no para beneficiarse entonces de ventajas a nivel de aparcamientos, carriles especiales... Sobre los mildhybrid, en Portugal ya han dado el paso y les han quitado cualquier tipo de subvención y todo tiene pinta de que esta solución irá imponiéndose en Europa.

P: Se cierra el año con el peligro de unas multas de las que se salvarán muy pocos…
R: Nosotros en nuestras marcas en nuestro país sí cumplimos con lo que nos ha demandado la central porque nuestras ventas son más de los coches pequeños que de los grandes –Evoque e e-Pace-. Y encima son de motores más pequeños que en otros mercados. Y vuelvo a hablar de políticos, ahora europeos, entendiendo los problemas del sector: no han sido capaces de entender que hemos tenido que parar fábricas y desarrollos de producto con los que contábamos para cumplir. Si retrasas tu gama de híbridos enchufables seis meses no cumples. Y esto se ha trasladado a la Unión Europea y no ha habido sensibilidad ni flexibilidad para entender la situación y nos van a venir unas multas a unos cuantos que, sinceramente, no nos merecemos. No sé qué ocurre últimamente con los políticos y la automoción pero no parece que haya mucha simpatía, y eso que nosotros cumplimos siempre con todos los objetivos que se nos fijan, mientras otros sectores se escapan.
P: ¿A nivel servicios en qué ha cambiado o evolucionado este año?
R: Hay un sector de clientes que sí está exigiendo y agradeciendo que ofrezcamos el servicio de recogida y entrega en casa, el servicio telemático de firma de documentos, la posibilidad de configurar, presupuestar y cerrar la operación de un coche nuevo a través de online, incluso prueba demo en casa… Eso no se hacía y ahora se empieza a hacer en un grupo que cada vez es más importante, de gente más racional y que también tiene miedo al contagio. Esto ha supuesto un esfuerzo extra para digitalizar nuestras redes de concesionarios.
P: ¿Cuándo volverá a recuperar Jaguar-Land Rover ese papel “canalla” que tuvo a principios y mediados de la década pasada?
R: Hay cosas muy interesantes por venir. Lo bueno y lo malo de ser una empresa pequeña es que puedes sacar los pies del tiesto más fácilmente y corriendo menos riesgos. Además tenemos un equipo de dirección y diseño maravilloso en Inglaterra. Llegará, te lo garantizo.