Los propietarios de un vehículo movido por Gas Natural Comprimido (GNC), entre los que se incluye un servidor, ya se están empezando a plantear seriamente si compensa o no seguir utilizando este combustible. Hasta enero de este año 2022, repostar un kilo de GNC costaba en torno a 1 euro: por ejemplo, en mi Seat León TGi podía cubrir con los 14 kg de mi depósito unos 380 kilómetros por unos 14 euros, una cifra irrisoria por aquel entonces.
¿Sabes cuánto me cuesta ahora repostar dicho depósito, contando incluso el descuento del Gobierno de 20 céntimos por kg? ¡35 euros como mínimo! Si nos quejábamos, con razón, de la escalada de los precios de la gasolina y el diésel, lo del GNC no tiene nombre. Basta con echar un vistazo a los precios actuales, a 29 de agosto de 2022, y compararlos con los precios de hace un año.
Por ejemplo: el diésel, en estos últimos 365 días, ha visto incrementado su precio en un 42,5 por ciento (llegó a subir hasta un 56 por ciento en el peor momento, aproximadamente), mientras que la gasolina lo ha hecho en un 31,72 por ciento. Una auténtica barbaridad, sí, pero es que el precio del GNC ha subido un 160 por ciento.
Fíjate en el gráfico de arriba: se trata de la evolución del precio de GNC en una de las gasolineras más baratas de la Comunidad de Madrid. En enero fue cuando empezó la gran subida, como consecuencia principalmente de las incertidumbres que ha causado la guerra en Ucrania. El precio se mantuvo muy inestable durante los primeros meses, con bajadas que, como poco, se quedaron en los 1,6 euros el kg. El último “golpetazo” en el precio lo hemos visto terminando este mes de agosto.
Sabemos que la coyuntura económica actual está golpeando de lleno al sector energético: los precios de la luz, gas y carburantes en general sube, con la guerra de Ucrania, la crisis de suministro de materias primas y el conflicto diplomático con Argelia de por medio. Según la web Dieselogasolina.com, el GNC alcanza hoy 29 de agosto de 2022 su máximo histórico, rozando los 3 euros: 2,910 euros el kg. El GLP, ajeno hasta ahora a todos estos problemas, alcanzó hace poco su máximo, con 1,058 euros el litro. Y mientras tanto, tras unas semanas de “relax” en los precios gasolina y diésel, la tendencia vuelve al alza en la segunda quincena de agosto.
¿Me sigue compensando moverme en GNC con mi Seat León TGI? Ahora mismo, según mis cálculos, me cuesta lo mismo más o menos moverme con GNC o gasolina. Otro cantar sería si tuviera un coche diésel: la opción más económica en su coste por uso hasta hace apenas un año (sin contar el eléctrico con cargas domésticas), ya está por detrás del GLP y del diésel, y a punto de sobrepasar también a la gasolina.
