Ya no hay fisuras y todos los implicados están de acuerdo, así que la futura norma que permitirá, entre otras cosas, que la retirada de un carnet de conducir por infracciones graves en un país sea efectiva en todo el territorio comunitario, algo que hasta ahora no sucedía, se transformará próximamente en una nueva directiva de la UE de obligado cumplimiento.
Así lo han acordado ya en las últimas horas los Veintisiete estados que conforman la Unión Europea, tras una reunión celebrada la semana pasada para establecer una posición negociadora común en la reforma de la seguridad vial propuesta desde Bruselas. La propuesta va en línea y en total sintonía con lo propuesto desde la Comisión Europea y lo avalado también en la Eurocámara, que buscaba ya conseguir aprobar una medida para que la retirada del carnet de conducir por una infracción grave sea afectiva en todo el territorio comunitario.
El enfoque general, que solo contempla algunos cambios menores respecto a la propuesta inicial para limitar el intercambio de información entre Estados y plantea ahora además una cláusula de revisión, ha sido pactado directamente por los ministros de Transportes de la UE reunidos en Bruselas. A partir de aquí, será ahora el Consejo y el Parlamento Europeo quien anunciará la fecha final en la que se iniciarán las últimas negociaciones para cerrar todos los detalles de esta futura directiva.
Promovida en su origen por la Comisión Europea, el objetivo de los órganos comunitarios era que terminar por fin con el vacío legal que permite hoy en Europa que un infractor en las carreteras pueda conducir con impunidad en otros países del espacio común pese a haber sido sancionado con la retirada del permiso en otro estado. Una vez se apruebe la nueva norma, será el Estado miembro que expida el permiso de conducción quien deberá aplicar, "en condiciones específicas y de conformidad con su propia legislación nacional", la suspensión del permiso de conducir impuesto por otro país de la UE al responsable de una infracción grave.

Entre las novedades introducidas por el grupo de los Veintisiete estados miembros de la UE figura el apoyo a una reforma sobre el mecanismo de reconocimiento mutuo de los permisos de conducir, ya que a día de hoy un Estado miembro no puede garantizar según la legislación vigente que las sanciones de tráfico basadas en decisiones nacionales sean aplicadas del mismo modo en el resto de países miembros soberanos.
Entre las futuras disposiciones sobre retirada de permisos o condiciones de una nueva licencia, los ministros de Transporte de los 27 estados miembros plantean también la aprobación de distintos tipos de suspensión con definiciones claras y adaptadas para garantizar que todos los países comunitarios puedan implementar esta directiva, incluso cuando se trate, que ocurrirá, de tipos de infracción que no existen como tal en los distintos sistemas nacionales de tráfico.
Además, las negociaciones ya entre la Eurocámara y los 27 estados miembros prevén del mismo modo reducir la burocracia para que las sanciones con una duración real menor a los 3 meses, o cuyo período de castigo por aplicar sea menor de un mes, queden fuera del alcance de esta directiva. Atentos, porque en las próximas semanas se aprobará esta nueva regulación y te contaremos exactamente cómo afectará a la vigencia de nuestros permisos de conducir en toda la Unión Europea.