Los coches de James Bond

El glamour que irradia el conocido personaje creado por Ian Fleming siempre ha estado ligado a un impresionante automóvil. Es imposible no asociar la imagen de 007 a un Aston Martin, aunque otras marcas como BMW o Lotus han sido también sus compañeras de aventuras. ¿Preparado para un paseo al servicio de su Majestad?

Los coches de James Bond
Los coches de James Bond

No siempre hemos visto a James Bond a los mandos de un Aston Martin. BMW y Lotus son, principalmente, las marcas más habituales junto al fabricante inglés. Aunque también hemos visto ocasionalmente a Bond con modelos de Mercedes, Rolls Royce o Bentley.

El fabricante bávaro se sirvió de la imagen del agente secreto para promocionar uno de sus modelos, el roadster Z3.

En ‘Golden Eye’, si pasamos por alto su ‘aventura’ por la montaña con el DB5, era el Z3 de 2006 el automóvil que llevaba Pierce Brosnan. La variante descapotable del biplaza alemán lucía junto al agente en color azul claro. Poco podemos decir que ya no conozcas sobre este modelo creado sobre la plataforma de la Serie 3 E36. Impresionan, para su tamaño y bajo peso, los 325 CV que rinde su motor de 3,2 litros. Una pena que no sea él quien rete al F355 GTS en el film.

Otra de las entregas protagonizadas por Pierce Brosnan, ‘El mañana nunca muere’ (1997), alberga entre su reparto al BMW 750i L, una versión que fue creada ad hoc para el film. Esta exclusiva Serie 7 esconde bajo su imponente carrocería un arsenal muy propio de un agente doble cero: lanzamisiles, sistema electrónico de defensa (capaz de emitir una descarga de 20.000 voltios), chasis antideformable, cristales blindados, lanzacohetes y, como no, armas de fuego ubicadas en el frontal. El 750i L era, además, teledirigido: podía conducirse a través del teléfono móvil y ofrecía la posibilidad de ponerlo en marcha desde el asiento trasero. Toda una joya tecnológica que, por supuesto, iba acompañada de un motor igualmente impresionante: un propulsor V12 de 326 CV que le permitía alcanzar los 250 km/h.

Inolvidable es el Lotus Esprit, propiedad de Roger Moore en ‘La espía que me amó’ (1977), que, llegado el momento, era capaz de sumergirse en el agua para escapar del enemigo.

El Esprit anfibio, con su inconfundible color blanco, era, así mismo, un experto luchador: lanzaba torpedos, cohetes y minas.

Por su parte, en ‘Sólo para tus ojos’ (1981), dos Lotus Esprit Turbo, uno blanco y otro cobre metalizado, salían en la película dejando al Citroën 2CV, que también llevaba Roger Moore, casi en ridículo. Esta variante turboalimentada del Esprit integraba un motor Lotus de 210 CV y su velocidad máxima era de 240 km/h.

Todas las marcas y modelos mencionados en este especial dedicado a 007 son los más representativos, pero no podemos pasar por alto otros como el Alfa Romeo GTV o el Mercedes 250 SE de ‘Octopussy’ (1983) y el mítico Ford Mustang Mach 1 rojo de ‘Diamantes para la eternidad’ (1971).

...el Lotus Esprit, tras ser utilizado en ‘Solo para tus ojos’ y ‘La espía que me amó’, estuvo durante años en lista de espera ante la fuerte demanda del público? Y eso que no era submarino…

James Bond no siempre conduce vehículos inalcanzables para la mayoría. En ‘Quantum of Solace’ también vemos a 007 al volante del nuevo Ford Ka y del Ford Edge 2008.

Mientras que el pequeño utilitario hace prácticamente un ‘cameo’, la nueva versión del SUV de la marca del óvalo protagoniza varias escenas de acción junto a Bond. Y es que parece que el espía británico se ha vuelto ecológico, ya que este modelo es propulsado por un motor de hidrógeno que toma su potencia de una célula de combustible. Su ‘verde’ fisonomía no impide a Daniel Craig escapar de uno de los múltiples aprietos en los que suele verse envuelto.

Tras este recorrido histórico de la mano del británico galán, te habrán entrado ganas de verle en acción. No tienes que esperar mucho, a partir de este viernes, podrás verle a los mandos del Aston Martin DBS. Para que vayas abriendo boca, te dejamos el trailer. Aunque recuerda, el mundo nunca será suficiente para James Bond.

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