La UE da el visto bueno al sistema de reciclado de coches en Holanda

Desde hace meses, la Comisión Europea analiza con lupa el sistema de reciclado en Holanda, un país que ha hecho del lema "quien contamina, paga" todo un modelo de vida. Según la investigación del Ejecutivo comunitario, tras el reciclado de vehículos holandés no hay ninguna ayuda estatal.

El pasado mes de marzo saltó la alarma dentro de la UE; según afirmaban, "las primas concedidas para el desmontaje de piezas de automóviles destinadas a ser recicladas podrían ser superiores a los costes relacionados", una práctica que es ilegal según la normativa comunitaria.

Ahora, tras analizar este sistema, han descubierto que no hay ninguna ayuda gubernamental abierta. En este país existe un acuerdo libre entre empresas que luego es declarado obligatorio por las autoridades.

Bajo el paradigma de "quien contamina paga", los constructores e importadores deberán contribuir en el período 2001-2003 con una tasa de 45 euros (7.515 pesetas), unos ingresos que se utilizan para cubrir los gastos ocasionados por el desmontaje y reciclado de residuos.

En Holanda, el sistema está gestionado por Auto Recycling Nederland, una empresa que, según la UE, actúa muy satisfactoriamente.