La Policía de Zaragoza mantiene de manera permanente los controles de velocidad en las capital aragonesa durante todo el año, ya que se entiende que el incumplimiento de los límites estipulados dentro de las vías urbanas genera serios riesgos contra la seguridad vial.
No obstante, y pese a la continuidad de esta vigilancia, los agentes refuerzan los llamamientos de la DGT para luchar contra la siniestralidad, informan desde el Ayuntamiento de Zaragoza.
Así, la última campaña en la que se ha colaborado con Tráfico se ha desarrollado entre el 15 y el 21 de agosto; es decir los días centrales del mes, en los que de manera tradicional aumentan los desplazamientos. Las medidas de vigilancia se han llevado a cabo en las vías más concurridas y se han controlado 146.690 vehículos de los que 308 fueron denunciados por utilizar una velocidad inadecuada.
El trabajo desarrollado en Zaragoza ha conseguido que los conductores no registren velocidades extremas en sus vías. No obstante, se considera que el cumplimiento de los límites es crucial para evitar accidentes. Asimismo, la capital aragonesa ha sido pionera en la implantación de la velocidad a 30 km/h en viales de un único sentido, potenciando, de esta manera, el carácter residencial de las mismas.