La N-I estará año y medio de obras

Los conductores madrileños deberán armarse de paciencia, ya que la Concejalía de Obras Públicas ha anunciado que la N-I vuelve a estar en obras. Los trabajos durarán cerca de 18 meses.

Se trata de una de las remodelaciones más importantes de la N-I, concretamente en el tramo comprendido entre la M-30 y la M-40. Con ella, se reformarán las vías de servicio y se crearán nuevos accesos a los barrios de Sanchinarro y Las Tablas, que en la actualidad están creciendo a pasos agigantados.

Está prevista la construcción de dos nuevos puentes a modo de glorieta que conectarán ambos barrios y de nuevas conexiones en la zona con la M-30, al sur del nudo de Manoteras.

A la espera de que la Unión Europea dé su visto bueno, los trabajos no comenzarán antes de la primavera de 2003. Para evitar posibles alteraciones de tráfico, la Concejalía de Obras Públicas ha anticipado que se mantendrá la continuidad de las vías de servicio y se realizará la reordenación de las conexiones.

Además del tiempo de las obras, a la oposición también le preocupa la inversión necesaria para las mismas. Se estima que los trabajos costarán al Ayuntamiento madrileño cerca de 21 millones de euros (casi 3.600 millones de pesetas), una cantidad que, según PSOE-Progresistas e IU, deberían sufragar en mayor medida los dos barrios que se beneficiarán de este proyecto.