Kia Sportage vs Volkswagen Tiguan, duelo de nuevos SUV

No hay tregua, ni cuartel. Y tampoco ya fronteras. Segunda generación del Volkswagen Tiguan, cuarta del Kia Sportage. Si Kia ha sido una marca transnacional casi desde sus orígenes, volcada en la exportación, VW va hoy por el mismo camino, buscando ahora hacerse más internacional. Ofrece versiones con especificaciones propias para China, mientras que su estilo sigue los mismos pasos que el último VW Passat, es decir, gustar en Estados Unidos.

No sólo de estilo viven las ventas, especialmente en mercados como el americano en el que, por ejemplo, ven un Opel Mokka casi como un divertido mini-coche. Así que el Volkswagen Tiguan no podía quedarse igual: ha ganado en dimensiones interiores, pero sólo como un primer paso, ya que, incluso para los dos mercados mencionados, la marca alemana tiene en preparación incluso nuevas variantes de carrocería entre las que se incluye también un futuro VW Tiguan XL con batalla larga para 2017, en año y medio. Y eso que este renovado Volkswagen Tiguan tampoco viene mal dotado: su batalla ha crecido hasta los 2,68 metros, uno más que el también alargado y completamente nuevo Kia Sportage.

Kia Sportage y Volkswagen Tiguan: el espacio

El Kia Sportage, por su parte, ha perdido voladizo detrás respecto al anterior y, como su longitud ha crecido también dos centímetros menos que lo ha hecho el Volkswagen Tiguan, te encuentras luego con un maletero grande en uno (el Kia) y gigante en otro (el Tiguan). Lo puedes incluso ver en las fotos. En el Volkswagen, además, hemos podido medir ya unos majestuosos 140 centímetros de anchura para los pasajeros traseros a la altura de los hombros, de manera que tres personas podrán encontrar en él un buen acomodo. Tres centímetros pierde en esa medida el ensanchado Kia Sportage, pero no hay que engañarse, ha hecho bien sus deberes y, en cambio, el túnel central es relativamente bajo.

¿Por qué empezamos a medir desde detrás? Pues, porque como decía uno de los actuales responsables de Volkswagen, el SUV es hoy el nuevo monovolumen, el coche para quienes usan intensivamente las dos filas de asientos. Y las ventas en nuestro país así lo reflejan. Los dos ofrecerán todo tipo de equipamiento para estas plazas concretas, como salidas de ventilación orientables, respaldos regulables en inclinación, calefacción en las banquetas... Sólo hay un punto en el que el Kia Sportage no puede plantar cara al VW Tiguan, y que influye más en el maletero: la regulación longitudinal en 18 centímetros de la banqueta trasera del SUV alemán. Y un segundo para las versiones más equipadas, como su climatización individualizada en cuatro plazas.

A los puntos, pues, el Volkswagen Tiguan va tomando posiciones, al menos en parado, con las bolsas de las puertas también aterciopeladas, que evita ruidos y da mejor tacto, o con los reposacabezas delanteros con reglaje longitudinal. Definitivo (en mi opinión) es el asidero en la puerta, no sólo en la parte superior por la seguridad psicológica que procura a algunos ocupantes, sino por ser también cómodo en largos trayectos. Si en maletero el Volkswagen Tiguan brilla en cubicaje (hasta 615 litros anuncia en homologación frente a los 503 del Kia Sportage), sientes también cómo Kia ha intentado forzar la máquina todo lo posible para su nuevo SUV. Mientras que la anchura mínima en el VW se circunscribe a sus habituales 100 cm, en Kia han subido el listón hasta 103, bajando además hasta 4 centímetros su piso para facilitar la carga. Y, con inteligencia, han dispuesto también un hueco en el que anclar la barra de la loneta cubre-maletero cuando la desmontas.

Mientras tanto, el salpicadero del Kia Sportage intenta envolver siempre a los ocupantes, especialmente al conductor, también con la consola central orientada hacia él. La pantalla muy alta, el cuadro muy legible y la presentación cuidada lo sitúan a un muy alto nuevo nivel de realización. Por su parte, el VW Tiguan adopta un nuevo estilo hoy poligonal, opuesto a ese "muro" vertical, con dos pisos, del Kia Sportage. También incluye para la instrumentación una pantalla TFT digital y configurable, con una cúpula por encima donde se encuentra una pantalla escamoteable para el Head Up Display. Golpe aquí de efecto ante sus rivales, dando la impresión de que el Volkswagen Tiguan quiere parecer hoy más berlina, frente a la imagen más 4x4 del Kia Sportage.

Kia Sportage y Volkswagen Tiguan: sus variantes

Reconócelo: solo compras un único coche, pero te gusta como a todos poder elegir el que más se acerca a tus necesidades y preferencias, incluso disfrutar al volante. Kia, por ello, ha decidido apostar en su nuevo Sportage por la conducción… y el fichaje del ex-responsable de ingeniería de BMW M sólo ha sido un primer paso. Para su nuevo SUV ya han diseñado la parte de vestuario, una variante denominada GT-Line con estética propia -la unidad en concreto que verás en las fotos-, distinguible por sus enormes llantas de 19 pulgadas. Esperamos poder comprobar pronto cómo esto se traduce en movimiento.

El problema para el Kia Sportage es que el antecesor de este Volkswagen Tiguan ya venía con posible decoración también R-Line. El VW ofrece ahora una tercera variante adicional, con una configuración de carrocería "off-road". En nuestro país las ventas han sido marginales en la variante 4x4 del Kia -unos 50 a particulares en España, de 14.000 unidades en este año, nos apuntan sus responsables-, pero ambas marcas ofrecen la posibilidad de tracción total, que en el caso del VW Tiguan ofrece una distancia al suelo de hasta 20 centímetros, elevada respecto al normal en algo más de un centímetro. Alta conectividad, control de crucero adaptativo, frenada autónoma de emergencia, aviso más control activo de mantenimiento de carril son facetas de confort y seguridad comunes siempre a ambos SUV… y que ya podremos ver en más detalle cuando comiencen a venderse en nuestro país en la próxima primavera de 2016.

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