Fiat Auto, obligada a reducir costes

Giancarlo Boschetti, presidente de Fiat Auto, ha anunciado que la firma italiana necesita reducir sus costes, al menos, un 3,5 por ciento. La compañía automovilística no logra salir de la fuerte crisis que le azota desde hace más de un año. Ahora, la reducción de costes y producción y el despido masivo de empleados parecen ser la única solución posible al problema.

Fiat Auto, obligada a reducir costes
Fiat Auto, obligada a reducir costes

Muchos fabricantes automovilísticos –entre ellos Ford, Toyota y DaimlerChrysler- aprovecharan el Salón del Automóvil de París, que se inaugura este viernes, para mostrar los síntomas de recuperación que empieza a registrar el mercado automovilístico. No será el caso de Fiat Auto, ya que la crisis que atraviesa no parece tocar fondo y su presidente, Giancarlo Boschetti, ha anunciado ya que la firma italiana recortará su producción en más de un 20 por ciento para reducir costes.

El objetivo de la firma automovilística es alcanzar los números negros, tras registrar este año unas pérdidas operativas de 823 millones de euros (más de 135.000 millones de pesetas) durante el primer semestre. La nueva estrategia de recuperación se centrará ahora en el lanzamiento de 20 nuevos modelos en los próximos cuatro años, para lo que se invertirá unos 2.500 millones de euros (unos 416.000 millones de pesetas).

"Tenemos una sobrecapacidad de producción en todos los niveles de entre el veinte y el treinta por ciento. Si lo reducimos en torno a un 20 por ciento, conseguiremos el dinero necesario para nuestras inversiones y eso es lo que estamos haciendo", ha señalado Giancarlo Boschetti, quien, además, no descarta nuevos ajustes de plantilla.

Precisamente, fuentes sindicales ya han expresado su temor a que esta nueva estrategia signifique el despido de numerosos trabajadores. De hecho, han anunciado que prevén unos recortes de hasta 6.000 empleos, teniendo en cuenta que la entidad italiana había anunciado la supresión de 2.400 puestos laborales en 2003, cuando el proyecto de reducción de costes todavía ni se había planteado.

Giancarlo Boschetti ha sido contundente en sus declaraciones, expresando su deseo de hacer todo lo que sea necesario para reflotar la empresa. "En Italia todo el mundo espera que hagamos algo drástico y lo haremos. Lo que está claro es que no podemos continuar así", ha anunciado el máximo mandatario de Fiat Auto, que por el momento descarta cerrar cualquiera de sus cinco fábricas italianas.

Las ventas de Fiat siguen cayendo
Mientras la firma italiana anuncia cambios en su política de producción, nuevos resultados confirman la magnitud de su crisis empresarial. En Europa occidental, las ventas de la compañía han caído un 19 por ciento durante los ocho primeros meses de 2002.

Con estos datos, Fiat Auto, que prevé registrar unas pérdidas de 1.200 millones de euros (200.000 millones de pesetas) durante este ejercicio, ha rebajado en la zona su cuota de mercado en un 1,5 por ciento, situándose actualmente en el 8,4 por ciento.

El peligroso futuro de Fiat está siendo observado muy de cerca por el fabricante estadounidense General Motors, quien podría verse forzado a adquirir una participación mayoritaria en la empresa en 2004. En estos momentos, la firma automovilística norteamericana posee el 20 por ciento de las operaciones de coches del consorcio italiano.