El origen de los nombres de los coches

Los nombres de los coches no están puestos al azar, sino que llevan horas de propuestas, estudios y discusiones. Unos se eligen a través de programas informáticos y otros casi sin pensar demasiado en su significado. Aquí tienes algunos ejemplos que te sorprenderán.

Marina Gª del Castillo. Twitter: @MarinaCActual

El origen de los nombres de los coches
El origen de los nombres de los coches

Dejando a un lado las denominaciones con números y letras como las que siguen algunas marcas desde hace años, vamos a centrarnos en los nombres más curiosos y los últimos en llegar. Algunos no necesitan explicación porque el significado está implícito en el nombre, pero otros te van a sorprender. Por norma general, para nombrar un nuevo modelo se busca un nombre que pueda ser registrado internacionalmente, que sea fácil de pronunciar en todos los idiomas, fácil de recordar e intuitivo. Algunas veces se consigue, y otras no.

 

Hay marcas que se rigen por normas curiosas como por ejemplo Opel. Desde el lanzamiento del primer Vectra en 1987, todos los nombres de turismos de la marca terminan en «a» y los vehículos comerciales en «o».  Compruébalo tú mismo. Y si sabes el origen del nombre de algún modelo y quieres compartirlo con nosotros, hazlo a través del Twitter y/o Facebook.

 

De la A a la Z

Captur: no tienes más que leer el slogan elegido para la campaña publicitaria de este de modelos de Renault y comprenderás que proviene de la idea de aventura: «captura la vida».

Renault Captur

Cee’d: con motivo de su origen europeo —recordemos que el Kia Cee’d fue el primer coche de la marca producido en Europa—, el nombre sale de las siglas Community of Europe European Design.

Duster: el todoterreno más barato del mercado, de la marca Dacia, tiene un nombre que proviene de la palabra inglesa «dust», polvo, y «evoca el polvo de los caminos no asfaltados, donde el Duster se encuentra más cómodo». Así nos lo explican desde Renault.

Exeo: fue en 2008 cuando apareció este modelo, y su nombre es un derivado de la palabra latina «exire» (evadirse, salir, ir más allá). Con esta denominación, Seat rompía con la tradición de llamar a sus coches con nombres de lugares españoles. Este modelo ha dejado ya de fabricarse.

Seat Exeo

Leaf: el eléctrico de Nissan tiene un nombre bastante peculiar, que quiere decir muchas cosas. Se trata de un acrónimo de L: Leader, E: Environmental friendly, A: Accesible, F: Family Car (algo así como líder entre los coches familiares accesibles y respetuoso con el medio ambiente.

 Lodgy: el nombre del monovolumen de Dacia proviene de la palabra «lodge», muelle en inglés, y con ello quieren resaltar que es un modelo que tiene mucha capacidad.

Mokka: Opel buscaba un nombre representativo para un modelo diseñado para personas con estilos de vida activos y refinados. Según la marca, los refrescos con base de moca son sofisticados y cultivados, ricos en carácter y llenos de energía, como su modelo. De ahí que se llame como el redondeado grano de café Arábica.

Picanto: es muy común poner nombres formados por la unión de varias palabras. En este caso Kia ha unido el vocablo francés «piquant» (picante), con «canto» (canción). ¡Ahí queda eso!

Kia Picanto

Rio: no se han esforzado demasiado en la casa Kia. Rio simplemente proviene de la ciudad brasileña de Río de Janeiro.

Sorento: y si Rio viene de Brasil, Sorento proviene de la ciudad italiana de Sorrento. Si siguen así van a empezar a parecerse a Seat y sus nombres de la geografía española.

Twingo: viene de la unión de las palabras Twist, Swing y Tango, —tres tipos de baile— de las que se extraen dos letras de cada una hasta formar la palabra que, según Renault, «a priori no debería sonar mal en ninguna parte del mundo».

Twizy: el nombre del pequeño biplaza eléctrico de Renault proviene de juntar las palabras «Too-Easy», para resaltar lo fácil y cómodo del concepto. Eso es que no se han subido en la plaza trasera, y mucho menos se han bajado de ella, porque cómoda es más bien poco.

Renault Twizy

Venga: España tiene algo que ver en este nombre. O al menos la lengua castellana, ya que Kia utilizó esta palabra española con la intención de resaltar fuerza, dar ánimo e impulso.

ZOE: aunque podríamos pensar que este nombre tiene una larga historia detrás, desde Renault nos aseguran que es un nombre propio sin más. ¿No habrá nombres propios más originales que éste?