La DGT junto con las tres comunidades que tienen las competencias de Tráfico trasferidas, como son Cataluña, Comunidad Foral de Navarra y País Vasco cuentan con más de 2.000 radares en nuestro país. Sin embargo, las sanciones locales, las lleva cada ayuntamiento, siendo ellos responsables de poner o quitar radares y de recaudar el dinero de las multas.
Lugones
La velocidad máxima permitida en centros urbanos es de 30 km/h. No obstante, muchos residentes y usuarios de la zona de la avenida de Les Bellotines, en Lugones, no sabían que era parte de la zona urbana, lo cual podría explicar el porqué un radar instalado a principios de enero en dicha calle ha registrado más de 10.000 denuncias por exceso de velocidad, a pesar de que este está calibrado para activarse a partir de los 48 kilómetros por hora, en vez de los 30 del límite.
A su vez, el proceso de tramitación de las infracciones es automatizado y lento, lo que ha causado retrasos en la notificación de las multas a los sancionados, haciendo que algunos hayan recibido más de dos decenas de denuncias, muchas de las cuales conllevan la retirada de puntos del carnet de conducir y fuertes multas económicas. Todo ello ha causado un gran revuelo entre los vecinos de la vía, ubicada en la entrada de Lugones por La Fresneda. Es más, el considerable número de quejas llevó al Ayuntamiento de Siero a desactivar provisionalmente el cinemómetro. El regidor sierense, Ángel García ha reconocido la alta cantidad de multas, aunque señalando que el Ayuntamiento está limitado por la ley en cuanto a la velocidad máxima permitida.
En la localidad, hay un total de siete cajas repartidas por el centro urbano, donde se instalan de forma rotatoria dos de los radares móviles del Consistorio. De hecho, junto al de Les Bellontines, hay otro colocado en una zona más céntrica, que suma casi otras 5.000 sanciones. En zonas como la calle Conde de Santa Bárbara, se llegaron a registrar 300 sanciones diarias, lo que ha supuesto en total que, en 59 días de funcionamiento, ambos radares consiguieron la cifra de 15.164 multas.
Según la Policía Local del municipio mencionado, el 60% de los sancionados circulaban a una velocidad entre 48 y 50 km/hm con una multa de 100 euros, 50 euros con pronto pago. El 35% recibió sanciones por exceder los 50 kilómetros por hora, perdiendo además dos puntos del carnet de conducir. Otro 4% circulaba entre los 60 y los 70 kilómetros por hora, perdiendo cuatro puntos, y menos del 1% fue multado por superar los 70 kilómetros por hora, con una pérdida de seis puntos. Esto ha resultado en que muchos conductores se queden sin puntos en su carné, además de recibir las sanciones correspondientes.
Amposta
El otro radar móvil del que te hablamos hoy ha sido desplegado por la Policía Local de Amposta en el casco urbano del municipio. Este cinemómetro ha revelado que más de la mitad de los vehículos sobrepasan el límite de velocidad de lo establecido que en la zona es 30 km/h.
Durante la pasado semana, el radar móvil se ubicó hasta en seis puntos estratégicos de la localidad, identificando a un total de 57 vehículos circulando a velocidades superiores a los 45 km/h, es decir 15 km/h por encima del límite establecido por la autoridad.
Entre el 11 y el 17 de marzo se monitoreó un total de 673 vehículos en diversas vías de la localidad, de los cuales, 372 estaban siendo conducidos por encima de 30 km/h y 57 de ellos, como hemos mencionado, excediendo los 45 km/h, siendo la velocidad máxima registrada de 71 km/h.
Durante el pasado año 2023, este mismo radar móvil operaba principalmente con fines educativos. No obstante, la situación actual implica un cambio de enfoque, según lo señalado por el inspector jefe de la Policía Local de Amposta, Josep Massana. Ahora, la tarea educativa continua al advertir a quienes superen los 30 km/h, mientras que se aplican sanciones a aquellos que exceden los 45 km/h que se han mencionado anteriormente.
