Vas conduciendo, ves un sitio donde aparcar en línea a tu derecha, estacionas y te bajas del coche para proseguir con tu vida. Pero, antes de bajar del coche, ¿te has asegurado que no venía otro coche, algún ciclista o algún motorista? Quizás no lo hayas hecho y, por suerte, no has tenido que lamentar nada. Pero ojo, porque esta simple maniobra que muchos conductores (y pasajeros) realizan de forma inconsciente podría acabar en tragedia.
Sí, así de claro. Si no echas un vistazo hacia atrás antes de abrir la puerta del coche y aparece un ciclista o un motorista, por poner los dos ejemplos más vulnerables, podrías acabar causando un accidente muy serio. Aparte de los daños que pueda sufrir tu vehículo, especialmente si el que te choca es otro vehículo, y de las consecuencias físicas que puedas provocar al ciclista o al motorista, puedes ser objeto de multa, y además como infracción grave.
Hay que recordar que el propio Reglamento General de Circulación avisa de que “se prohíbe llevar abiertas las puertas del vehículo, abrirlas antes de su completa inmovilización y abrirlas o apearse de aquél sin haberse cerciorado previamente de que ello no implica peligro o entorpecimiento para otros usuarios”.
#Recuerda
— Guardia Civil 🇪🇸 (@guardiacivil) December 5, 2020
Abrir la puerta del coche "a la holandesa🇳🇱" (con la ✋ derecha en lugar de la izquierda) es la forma más segura de bajar del coche con seguridad
Si usas esta técnica evitarás impactos con ciclistas, motoristas u otros usuarios#NoEsPorLaMulta pic.twitter.com/fqBdDbpOCQ
“Bajarse a la holandesa”, el truco que todos deberíamos aprender
A través de sus redes sociales, tanto la Guardia Civil como la DGT han advertido del peligro de esta maniobra, tanto para conductores como para pasajeros, que en la mayoría de casos realizan de forma inconsciente o por ir con prisas. Todos deberíamos echar un vistazo a lo que viene por detrás del vehículo antes de bajarnos de este.
Pero para que interioricemos mejor esta maniobra, la DGT y la Guardia Civil nos hablan de la “técnica holandesa” y comparten con nosotros un par de vídeos explicativos. Directamente desde los Países Bajos nos lleva esta simple maniobra que puede salvar vidas: cuando vayas a abrir la puerta del coche, en vez de hacerlo con la mano más cercana a la puerta, hazlo con la mano más alejada. Es decir, si eres conductor o sales de la plaza trasera izquierda, abre la puerta con la mano derecha; si eres el copiloto o sales de la plaza trasera derecha, abre la puerta con la mano izquierda.
Este simple movimiento provocará que gires el cuerpo y la cabeza, de forma que ya de forma intuitiva deberías mirar o bien al espejo retrovisor o bien echar un vistazo a lo que viene por detrás.
Algunos vehículos ya incorporan avisadores lumínicos o sistemas que bloquean las puertas si detectan que puede producirse una situación peligrosa. Sin embargo, estas tecnologías todavía no son muy frecuentes –lo acabarán siendo, seguro–, por lo que, de momento, te recomendamos que imites a los holandeses cuando vayas a abrir, a partir de ahora, la puerta del coche.
Cuando estaciones tu #vehículo, procura no abrir la puerta a tontas y a locas. Comprueba antes por el retrovisor que no vienen otros, especialmente #ciclistas, que puedan impactar en ella y recurre a la maniobra holandesa para abrir la puerta y salir. 🚴🚴 #CiclistaSeguro pic.twitter.com/pIP8veOWm3
— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) February 22, 2020