Los Mossos d’Esquadra, la policía autonómica catalana, han informado en las últimas horas de la detención de un conductor, de 30 años y nacionalidad española, por conducir presumiblemente bajos los efectos del alcohol, accidentarse y negarse posteriormente a someterse a las pruebas de alcoholemia. Hasta aquí, triste y desgraciadamente, se trata de un hecho que no es infrecuente en carretera. Sin embargo, lo increíble de este suceso ocurrido en la autovía A-2 llega a continuación.
Según detalla el cuerpo de seguridad a través de una nota de prensa y de un post publicado en sus redes sociales (y que reproducimos debajo de estas líneas), los hechos ocurrieron a primera hora de la mañana del pasado domingo, cuando usuarios de la vía alertaron de que había un turismo circulando en dirección contraria a la altura del término municipal de Caldes de Malavella, en la provincia de Girona. Varias patrullas de los Mossos d’Esquadra se dirigieron entonces a la autovía. Y fue cuando se encontraron con algo insólito.
El coche infractor acababa de accidentarse contra una valla metálica de la autovía A-2 pero, lejos de detenerse, continuaba con la marcha. Finalmente y tras buscarlo, los agentes localizaron el vehículo parado en dirección contraria al peaje de acceso a la autopista AP-7, a la altura del término municipal de Fornells de la Selva. Fue entonces cuando comprobaron que el individuo, que estaba ileso del accidente, presentaba evidentes síntomas de alcoholemia, mientras que al coche le faltaba la puerta del conductor y una rueda delantera.
La puerta y la rueda, encontradas a 5 km
Al mismo tiempo, otra patrulla del cuerpo de seguridad, que inspeccionaba toda la vía, encontró la valla dañada y la puerta del turismo a unos 5 kilómetros del punto donde finalmente se detuvo. Algunos metros más allá también encontraron uno de los neumáticos delanteros.
Con todos estos hechos, los Mossos d’Esquadra han procedido a la detención del conductor de este vehículo como presunto autor de un delito contra la seguridad viaria por conducir originando un grave riesgo para la circulación y por negarse además a someterse a las pruebas de alcohol después del accidente. Sorprendentemente, el individuo no tenía antecedentes.
Los Mossos d’Esquadra terminan la nota de prensa confirmando que no ha sido el último caso que han tenido en las últimas horas con conductores en estado de embriaguez. De hecho, unas horas más tarde, y también en la provincia de Girona, un chico de 18 años y nacionalidad también española fue detenido por conducir bajo los efectos del alcohol y sin haber obtenido nunca el carné de conducir.