busca dar carpetazo al Mundial con su quinta victoria en siete carreras

El piloto francés Sebastien Loeb (Citroën DS3 WRC) tratará de manejar su ventaja al frente de la clasificación o dejar casi sentenciado el campeonato buscando su quinta victoria en el Rally de Nueva Zelanda, séptima cita del Mundial que se disputa del 21 al 24 de junio.

El galo llega a la cita con una cómoda ventaja sobre su compañero de equipo, el finlandés Mikko Hirvonen, de 30 puntos a falta de siete pruebas. Loeb ya se impuso en la última cita, el Rally Acrópolis, en donde igualó a otras leyendas del campeonato como Miki Biasion, Walter Rohrl y Carlos Sainz al conseguir su tercer triunfo en tierras griegas, y luchará en Nueva Zelanda por la quinta victoria de la temporada.

El noruego Petter Solberg (Ford) tendrá que echar el resto para que sus mínimas opciones de aspirar al campeonato sigan siendo posibles; ya que se encuentra a 39 puntos del alsaciano, una distancia que a priori parece prácticamente insalvable. Sólo el noruego Mads Ostberg (Ford) -en Portugal- y Jari-Matti Latvala (Ford) -en Suecia- han podido discutir la victoria al francés esta temporada.

Además, el español Dani Sordo (Mini) regresa al campeonato y lo hace de nuevo con su equipo, Prodrive -con el que no compite desde el Rally de Portugal, que se disputó del 29 de marzo al 1 de abril-, tras una breve aventura con Ford sustituyendo al finlandés Jari-Matti Latvala en Argentina. El cántabro ya fue segundo en tierras neozelandesas en 2008 y pretende repetir la hazaña y volver a subirse al podio con el Mini John Cooper Works WRC.

El Mundial regresa de nuevo al Cono Sur, donde es invierno y se espera que se den temperaturas moderadas y bastante lluvia. Los pilotos disputarán un total de 413,94 kilómetros cronometrados y 22 especiales sobre tierra con algunos tramos asfaltados cercanos a la localidad de Auckland.

La mañana del jueves se disputará la calificación en Inland Road, un examen fundamental para los pilotos, ya que el orden de carrera volverá a ser vital para sus aspiraciones. En la primera jornada, el viernes, se celebrará el tramo más exigente, con casi 210 kilómetros cronometrados repartidos en ocho especiales, cuatro de ellas recuperadas de mundiales anteriores.

El segundo día de competición se compone de 143 kilómetros cronometrados y siete especiales, las mismas que habrá en la definitiva jornada del domingo, en la que se correrán 61.33 kilómetros contra el crono, en un bucle de tres tramos a doble paso.