La limusina acorazada más espectacular y sorprendente del planeta llega hoy a España. Nuestras calles y carreteras darán hoy la bienvenida a La Bestia, o a The Beast, como se le conoce también en Norteamérica, o a Cadillac One o a Limo One –en la línea de los vehículos presidenciales tipo Air Force One-. Es el coche en el que Joe Biden, presidente de Estados Unidos, se moverá desde este martes en la cumbre de la OTAN que se celebra en Madrid. Y ahora queremos contarte sus secretos.
Desde 2009, el coche del presidente del Gobierno norteamericano ya no deriva de un modelo de serie. De hecho, el último fue un Cadillac DeVille bajo el mandato de George Bush. A partir de ese momento, es General Motors la encargada de realizar, partiendo de cero, el vehículo presidencial más seguro del mundo. La Bestia parte de un chasis de un camión ligero de GMC Trucks y se carroza salvajemente para convertirlo en una célula inviolable.
Así es La Bestia: hermética, a prueba de bombas, con sangre para transfusiones...
Puertas con refuerzos de 20 centímetros de grosor, cristales de 13 cm para evitar munición de cualquier tipo, bajos blindados antibombas... son algunos de sus detalles más curiosos. Pero hay más: este coche, al estilo de los coches de James Bond, es capaz de electrificar las manetas de las puertas para evitar intrusos, es hermético para evitar gases y sustancias químicas, puede generar nubes de humo a su alrededor, tiene armas incorporadas para repeler agresiones… y, como colofón, cuenta con unidades de sangre por si fuesen necesarias las transfusiones al presidente, tanques de oxígeno para aguantar en situaciones límite…
Ah, y otra gran curiosidad: se comenta que cada puerta pesa lo mismo que la de un Boeing 757. Y es que estamos hablando de nueve toneladas de peso para un siete plazas con detalles de diseño de un Cadillac Escalade o de un CT6.
Este coche forma parte de una serie de doce que se encargaron a General Motors bajo el mandato de Barack Obama por un montante de 15 millones de dólares y que estrenaría el anterior presidente norteamericano, Donald Trump, en 2018 en un viaje a Nueva York para una cumbre de la ONU. Mecánicamente se ha recurrido, aunque parezca paradójico, a un motor diésel, al ser éste un combustible de baja volatilidad evitando riesgos ante ataques de incendios.
Así es La Bestia: impactante... pero lento
Su motor dispone de 300 CV con un consumo medio de 23,5 litros y ofrece unas cifras dinámicas muy modestas ante este tonelaje y tamaño, ya que mide 5,5 metros de longitud: 15 segundos en el realizar una aceleración de 0 a 100 km/h.
En cada viaje presidencial se trasladan dos unidades de La Bestia que circulan en la comitiva norteamericana sin saberse exactamente en cuál viaja el presidente. Ambas unidades, junto a un Chevrolet Suburban que ejerce de oficina permanente de telecomunicaciones, se trasladan específicamente en un avión de transporte militar pesado del ejército norteamericano.